En mi busqueda de galletas variadas, siempre encuentro alguna que me sorprende, como esta receta del estupendo blog "Albahaca y canela", que están de verdadero lujo, con un sabor y una textura increibles, son un verdadera gozada y a la vez muy fáciles de hacer, espero que os gusten.
150 gr. mantequilla a temperatura ambiente
115 gr. azúcar
1 huevo
1 cucharadita de extracto de limón o ralladura
1 cucharadita de levadura
1 pizca de sal
450 gr. harina
mermelada de frambuesa, melocotón (al gusto)
115 gr. azúcar
1 huevo
1 cucharadita de extracto de limón o ralladura
1 cucharadita de levadura
1 pizca de sal
450 gr. harina
mermelada de frambuesa, melocotón (al gusto)
1. Batir la mantequilla con el azúcar hasta formar una pasta homogénea (con batidora de varillas, aproximadamente 1 minuto). Añadir el huevo y el limón y batir un poco más. Aparte, tamizar 2 tazas de harina con la sal y la levadura; incorporar la primera preparación y mezclar. Ir añadiendo más harina (más o menos 1 taza más), poco a poco, hasta tener una masa suave, blanda y húmeda pero no pegajosa. Formar una bola, envolver en film y dejar en la nevera unos 30-45 minutos.
2. Preparar un par de bandejas y precalentar el horno a 180 grados.
3. Espolvorear con harina la superficie de trabajo y estirar la masa hasta dejarla con un grosor de unos 3-4 mm. Con un cortador redondo (el mío no era liso, pero sirvió igual) recortar porciones y colocarlas sobre las bandejas. Poner un poco de mermelada en el centro de una galleta. Humedecer el exterior con un poco de agua y formar un triángulo levantando los lados con los dedos, apretando con cuidado en los extremos. Continuar con el resto y hornear durante unos 15 minutos, hasta que se hayan dorado ligeramente. Dejar enfriar sobre una rejilla y guardar en recipiente hermético
2. Preparar un par de bandejas y precalentar el horno a 180 grados.
3. Espolvorear con harina la superficie de trabajo y estirar la masa hasta dejarla con un grosor de unos 3-4 mm. Con un cortador redondo (el mío no era liso, pero sirvió igual) recortar porciones y colocarlas sobre las bandejas. Poner un poco de mermelada en el centro de una galleta. Humedecer el exterior con un poco de agua y formar un triángulo levantando los lados con los dedos, apretando con cuidado en los extremos. Continuar con el resto y hornear durante unos 15 minutos, hasta que se hayan dorado ligeramente. Dejar enfriar sobre una rejilla y guardar en recipiente hermético