En esta ocasión las algas dieron una tregua aunque no por mucho tiempo. Llegué al pesquero a eso de las 5:00 de la mañana, sobre las 6:00 ya tenía las tres cañas caladas, el día empezaba a clarear, no hacía ni una gota de aire el mar era una piscina y lo mejor de todo es que había pocas algas y las que había estaban en la orilla, con lo cual el día tenía muy buena pinta. La marea llegó al parón y la primera picada hacía su aparición. Era una pequeña dorada de unos 500g de peso que fue devuelta al mar. No hice mas que lanzar otra vez y al minuto la misma caña se volvía a doblar, otra dorada mas esta si de 1,100kg de peso que dio una bonita pelea en la orilla. y en el siguiente lance con la misma caña la tercera picada seguida, otra de 1,200kg.
Pero la marea empezó a bajar y las algas no tardarían en hacer su aparición, eso si, no sin antes tener otras dos picadas una fallida y otro pequeño ejemplar devuelto al mar.
Al final cinco picadas en una hora, el tiempo de tregua que dieron las algas, luego ya imposible de pescar.
Os dejo un video de una de las doradas que grabé como pude ya que estaba solo.