Este tapiz, en concreto, lo empecé hace al menos doce o catorce años y me gustaba tanto que lo acabé de bordar en seguida y, además, me animé a hacer otros dos con el mismo diseño, pero distintos colores. Va bordado con madejas de lana de DMC, que no sé por qué hace muchísimo que no las veo a la venta en ningún sitio. Menos mal que creo que compré suficiente para acabar los dos que faltan.
El primero llevaba ya el gráfico impreso sobre el cañamazo, los otros dos ha sido cuestión de ir contando puntos y pasándolo al cañamazo liso.
Me animé tanto, que empecé el segundo y, no recuerdo por qué, quedó inacabado a falta de una esquina.
El caso es que al final se quedaron en ufos... y no por falta de ganas de verlos acabados, no... aunque está claro que los gustos van cambiando y hay colores que ahora mismo ni me plantearía utilizar e incluso pienso que no sabría dónde colocarlos en mi casa.
