17 de octubre de 2016

Me han dado calabazas

Chicas, como se pasa el tiempo. Me encanta el mes de octubre y se me está escapando de las manos. Casi empezaría a preocuparme, pero entonces miro por la ventana de mi salón, veo la lluvia caer y respiro profundamente. En ese momento me pregunto "¿pero lo estás disfrutando?", y la respuesta es "taaaaanto".

Una de las cosas con las que me estoy divirtiendo es preparando decoraciones de Halloween, concretamente una que tenía en la cabeza desde hace ya tres años. La primera vez que lo vi fue en el blog de Hamptons SC, luego he visto diferentes versiones y, tengo que decir, que cuando me decidí a poner las manos a la obra, terminé haciendo un batiburrillo de todas las versiones que he visto en este tiempo en Internet. 

¿Comenzamos?

Materiales:

Bandanas de colores
Cordel
Relleno
Lana del mismo color que la bandana
Aguja lanera
Tijeras

1.- Colocamos la bandana estirada sobre una mesa con la parte del revés mirando hacia arriba. Doblamos de un lado y después de otro haciendo que se solapen en el centro.


2.- Ahora cogemos el córdel, cortamos cuatro cabos un poco más largos que la bandana y los atamos juntos. Colocamos la cuerda de 4 cordeles por dentro de la tela, en el centro y estirada.
 

3.- Ahora cortamos otro trozo de cordel, lo suficientemente largo para poder atar el extremo de la bandana por donde asoma los cuatro cabos y que no se escape al darle la vuelta. Enhebramos la aguja lanera y cosemos la abertura lateral de arriba abajo.


4.- Damos la vuelta a la bandana y comenzamos a rellenar a nuestro gusto. He hecho tres calabazas (naranja, verde y morada) y cada una tiene un tamaño, no quería que quedasen exactamente iguales.


5.- Una vez que tiene la forma que deseamos, sujetamos la boca con una mano y con la otra vamos subiendo los cordeles y enrollando cada uno alrededor de ella para cerrarla y que no se salga el relleno. Aprovechad para mantener el cordel tirante y que marque la tela, así parecerán los gajos de una calabaza.


6.- Como sobraba demasiada tela por arriba la corte y dejé suficiente cordel colgando para que simule los tallos de una calabaza de verdad.


Me gustaría poner una foto de como ha quedado el mueble de la entrada, pero hay cero luz natural y las fotos no salen bien. Para que os hagáis una idea, es algo así:


Sin la corona y con mis calabazas de trapo en lugar de la natural.

Ahora que tengo este proyecto terminado, voy a volcar todo mi tiempo en terminar el espantapájaros.


Deseadme suerte y seguid disfrutando de octubre.

5 de octubre de 2016

Un momentito para saludaros

Ha comenzado ya el mes de octubre y se nos acabe el año 2016. Hay que hacer balance, ver los proyectos que teníamos para este año, lo que hemos hecho, lo que no... o relajarse y disfrutar de lo que queda. A gusto de cada quien.


Viendo la fecha de la ultima entrada, me doy cuenta de que han pasado... demasiados días. Pero ya sabéis que hay semanas (meses, años) que se ponen cuesta arriba y casi no he podido coger ninguna de las cositas que tengo empezadas. Como además cuando podía hacerlo era muy tarde y la luz no era buena, me he decantado por recuperar una labor antigua de ganchillo que es  la historia de nunca acabar.



Desde que la comencé ha sido colcha de mi cama, echarpe para los pies de mi cama también, mantita para el sofa... creo que hasta que no la acabe no volveré a hacer planes para ella.

Pues entre los primeros exámenes de mi hijo, cursos de mi marido, reuniones de los scouts, del AMPA del cole, visitas de amigas... me ha dado tiempo a blanquear almohadas.


Antes


Y después. 

Son las almohadas viejas de mi cama que hemos cambiado hace poco. Ya veis que tenían un color... pero el caso es que estaban relativamente bien, así que decidí hacer unos cojines para la cama. De la fórmula que veis en el enlace de más arriba, no le puse borax porque se me había acabado, pero a mi me parece que han quedado muy bien.

También he limpiado la tapicería de la silla de la habitación de mi hijo que, al parecer, encuentra mucho más aliciente en enguarrinar el asiento con los rotus que dibujar en un papel


Antes


Y después.

El problema aquí ha sido que la tinta del rotulador ha calado hasta la goma espuma de debajo y no sale del todo. Pensé en utilizar algún limpiador natural de internet, pero todos llevan amoniaco y temía que se comiera el color. Así que compré esto


Es un producto de Mercadona y el resultado ha sido bueno, aunque funciona mejor en las manchas negras que en las rojas, que no han salido del todo.