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viernes, 8 de junio de 2012

Sesión Privada. Javier Rovira


     "De modo que ahí estaba yo, en Málaga, observando cómo intentaban desenterrar unas cuantas maderas para complacer así a una chiflada. No me había costado demasiado conseguir el permiso y encontrar a la persona necesaria, regento desde hace veinte años un negocio de pompas fúnebres y en este mundillo, como en todos, los contactos son importantes. Por entonces yo tenía muchos contactos. Ahora menos. Ahora no tengo casi nada."

     Cuando me recomendaron este libro lo cierto es que no conocía ni el título ni a su autor. Así que investigué un poco y me dí cuenta de que estaba ante una ópera prima. siempre me llaman la atención, y si os habéis fijado en la portada es muy cinematográfica, así que poco más hizo falta para que me decidiera a descubrir las letras de Javier Rovira. No se si vosotros ya lo conocéis, puesto que he visto que tiene bastantes ventas, pero yo hoy traigo a mi estantería virtual este descubrimiento, Sesión Privada.


     Conocemos a Marcos Alvar, un hombre desencantado con casi todo y que está aburrido de historias de la Guerra, que recibe un encargo de una anciana. Recuperar los restos metidos en un armario de dos familiares suyos. Están enterrados junto a la tapia de un cementerio, se trata de dos amantes que yacen abrazados, se suicidaron así que no tienen lápida, y le pagará bien por ello. Marcos acepta sin saber que está a punto de descubrir una historia que lo acompañará el resto de su vida.

    Como he comentado al comienzo, este libro ha sido un descubrimiento para mí. Está narrado con mucha sencillez y cercanía, poco a poco Marcos nos va contando su historia y consigue que nos pongamos a su lado comprendiendo perfectamente sus decisiones y sentimientos. Tengo que reconocer, eso sí, que en un primer momento tuve mis recelos sobre si esta era "una historia más sobre la Guerra Civil", y no, nada más lejos.

    Sesión Privada se compone de tres historias que el autor ha sabido entretejer sin fisuras, algo que ya he comentado alguna vez que me parece harto complicado. Si es difícil mantener el interés en una sola, conseguir hacerlo en tres es un logro. Lo hace alternándolas sin saltos abruptos, dejando que el lector sea el primero en hacer cábalas sobre quien es quien en esta historia llena de secretos y mentiras que se mueve a caballo entre las calles del Madrid de los años 50, lleno salas de fiesta, censores respetables y prostitutas que pasan por serlo; los últimos años de la Guerra con momentos difíciles en los que mucha gente huía; y se acerca hasta la actualidad. Se trata además de un libro muy ágil que mantiene el interés en todo momento, en el que reconocemos muchos clásicos del cine negro hasta el punto de tener la sensación de que somos nosotros los que estamos viendo una película antigua. Describe más ambientes que lugares, más gestos que personas, y eso otorga mucha fuerza a sus personajes, a todos ellos que se nos van descubriendo poco a poco, mostrando facetas nuevas y jugando con lo que pensamos de cada uno hasta encontrarnos con un final que yo, tengo que confesarlo, no supe anticipar.
   
     Es un libro de amores prohibidos y relaciones tortuosas: la de Marcos con su mujer que es con la que arranca el libro. La de la pareja que le ordenan buscar. Y la tercera pareja... sería la formada por un censor, y no tengo claro si esta vez hablar de su chófer en lugar de la mujer que lo acompaña. Porque aquí sobresale el libro. En la caracterización del respetable censor que esconde un secreto oscuro a través del ojo de una cámara de vídeo. Una historia morbosa que poco a poco va saliendo a la luz para deleite del lector que termina componiendo en la figura de este hombre una sombra negra vestida de traje que esconde mucho debajo de esa fachada de aparente solidez.

     Mi comienzo con este autor ha sido todo un acierto así que no puedo hacer otra cosa que recomendaros que lo descubráis por vosotros mismos.

     Un libro de secretos.. todo el mundo guarda algún secreto por pequeño que sea, ¿o no?
¿Qué pensáis?

     Gracias