Jano acechado por Saturno. Gira la cabeza hacia la última hoja de un calendario con pátina grasienta. Giro en dirección opuesta: otro calendario exhibe, aún con olor a tinta, unos números impresos que solo son eso, dibujos de cifras. No sabe interpretar lo caduco con suficiente claridad. No puede oler lo nuevo con certeza alguna. ¿Por qué vericuetos conducirán los números de las casillas? Juego de la Oca el calendario, un año más.
Cuando Jano gira un rostro el otro apunta en la dirección contraria como para recoger la globalidad del plano en el que se hallé.
ResponderEliminarOjo, admite toda gama de interpretaciones .
Y que sigamos jugando muchos años más.
ResponderEliminarotro año más....¿ no se porqué pero me huele a que será más movido ?..¿ he dicho mas..o más ?
ResponderEliminarsalut
Un año que se va y otro que viene pero lo que de verdad importa es que fluye, nada puede detener al calendario que sigue su curso.
ResponderEliminarY tal vez la vida es un juego, pero estamos vivos ¿no? motivo más que suficiente para estar agradecido.
Calendario, sólo una manera arbitraria de contar
ResponderEliminar=)
Hay muchas esperanzas puestas en los siguientes 365 días, algunas creadas por quienes comercian con ellas en interés propio.
ResponderEliminarYo no me fío.
Sólo espero seguir avanzando por el tablero de la oca, aunque sea de casilla en casilla.
Saludos.
El texto es brutal. El tiempo está acotado en casillas que se repiten. Tienen carácter cíclico pero a la vez hay incertidumbre por lo que nos espera... Estamos atados a esas casillas. Eso es lo que me inquieta. Saludos.
ResponderEliminarcomentaNDO
ResponderEliminarCOMENTANDO
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