
Le quise todo lo que una nieta puede querer a su abuelo, le admiraba porque era digno de admirar, en su juventud quiso dedicarse a los demás, por eso entro en un seminario siendo un niño con la intención de dedicarse al sacerdocio, paso toda su niñez y parte de su juventud en él.
Y cuando iba a tomar los habitos, tuvo una grave enfermedad que le causo la perdida de la audición, se vio obligado a abandonar su propósito y olvidarse de la que había sido su vocación desde niño con mucha pena y tristeza.
Pero mi abuelo siguió adelante, por que era un hombre de fe y asumía lo que Dios había dispuesto para el.
Estuvo solo algún tiempo hasta que un día se cruzo en su camino una malagueña, de " de toma pan y moja".Con una belleza extraordinaria la típica mujer andaluza, morena, con grandes ojos negros alta y delgada,un belleza y la VIDA DE MI ABUELO CAMBIÓ
Aunque no su amor por Dios y su intención de hacer el bien, eso le acompaño el resto de su vida.
Fruto de su amor nacieron ocho hijos,que criaron en la fe de Dios y con todo el amor del mundo.
Mi abuelo quiso a sus nietos con ternura y cariño , nos hacia sentir especiales a cada uno de nosotros y nunca hubo diferencias nos mimo a todos por igual.
Tengo tantos recuerdos de mi abuelo... nos llevaba al cine, a la feria... recuerdo aquellos veranos que pasábamos a la orilla del mar.
se levantaba muy temprano, yo le oía y de puntillas sin hacer ruido me levantaba para ir paseando con el, por la orilla de la playa como era su costumbre cada mañana.
Al atardecer cogíamos un cubo y junto con mis primos íbamos por la playa cogiendo coquinas para luego cocinarlas, nos contaba historias hermosas vivencias personales y otras historias que yo creo que casi las inventaba para nosotros.
Era tan humano nunca olvidare la bondad de su mirada, la sabiduría de sus palabras y la ternura con que nos obsequiaba cada día con su presencia.
Realmente fui una privilegiada por haber sido parte de su familia doy gracias a Dios por haberme bendecido poniendo en mi vida un techado de virtudes de quien tomar referencia.
Era un hombre elegante como pocos que yo haya conocido y el alma de la fiesta en cualquier evento al que asistiera.
He crecido y encontrado mi camino pero su recuerdo permanecerá conmigo eternamente, mi abuelo ha sido uno de los mejores regalo que la vida me ha dado.