29 diciembre 2009

...

No creas que me olvide que ya pasaron dos años...
No creas que no seguís muy cerca mío a cada paso que doy...
No creas, ni por un minuto creas, que no estás a mi lado cada día, cada segundo...
No creas que te olvidé. No creas que ya se me pasó.
Todavía te extraño, te epero y te ansío...
Cada vez que me miro, te veo, como un reflejo que no deja de ser...
Como siempre te llevo debajo de mi piel...

Sabía que estaba otra vez de su lado, que no se había ahogado,

que él la estaba sosteniendo a flor de agua y en el fondo era una lástima.

Los dos se sintieron en el mismo instante,

y resbalaron el uno hacia el otro como para caer en ellos mismos,

en la tierra común de las palabras y las caricias

y las bocas los envolvían como la circunferencia al círculo,

esas metáforas tranquilizadoras,

esa vieja tristeza satisfecha de volver a ser el de siempre, de continuar,

de mantenerse a flote contra el viento y marea,

contra el llamado y la caída.

20 diciembre 2009

Mar del Plata en Apargatas


Balneario de todos y cualquiera,
con almenas de arena y silicona
tanga imposible, mínima pollera
primavera que llega y no perdona.
Mono Burgos, Luthier, Serrat, Olmedo
confitería bailable, chicas malas
albergues transitorios, dos en pedo,
efebos con derecho a generala.
Duende con lamparones de Aladino,
bandiera nera, código pirata,
prófugo de los puertos sin destino,
Paquebote con mástil de hojalata.
Mi postrero crucero ultramarino
sueña con naufragar en Mar del Plata.

Es evidente que la playa no es playa si no estan:





Los abuelos con sombrilla de los años '20
Los niños correteando con la pelota
El que arma la carpita
El que desarma la carpita
Las esterillas
Los toallones de colores
Las tablas de Bodyboard
El termo y el mate
El que vende gaseosas
El Churrero
Palito Bombon Helado
La gorda en Bikini
Los muy blancos
Los muy bronceados
El baldecito y la palita
La heladerita de camping
Los que venden lo que sea
El que duerme la siesta al rayo del sol
Los que salen del agua y se hacen milanesa en la arena
Los que quedaron rojos como camaron
Gorritos, gorras, sombreros, pañuelos, pilusos
Los mil y un pareos
Las mil y un formas de quedarse en maya sin que nadie te vea la cola
los maridos cargados con todo...
Y las mujeres caminando detrás
Los miles de modelos de mayas y bikinis
Y ahora se agregan las zungas!!!



Es evidente, todo se conjuga para que la playa se sienta como playa. De otra forma sería como tomar mate en la terraza... el olor a sal, arena y bronceador...
Ayyyy hacía tanto tiempo que no sentía y veía todo esto que todo me llama la atención. De a poco fui recordando y participando de lo que se sentía tirarse en la arena a tomar sol, mate, reirse de todo(s) y escuchar el oleaje del mar...

07 diciembre 2009

Encuentros...


¿Por qué te contemplo? ¿Por qué te toco?
¿Qué busco en ti, mujer, Que he de apresurarme
para estar contigo una vez más?
aprieto tu cuerpo contra mi cuerpo
como si esperara abrirme una brecha
Directamente a otra esfera;
Y me esfuerzo por hablar contigo con palabras
más allá de mí palabra,
En las que todas las cosas son claras
Pasaron muchos meses sin pasar por acá... Revisando mis notas, mis recuerdos y mis palabras, tuve varias emociones.
Los días se sucedieron vertiginosamente y ya casi estamos en fin de año. El tiempo voló como vuelan las palabras, los recuerdos...
Hoy, estoy acá sentada frente a la computadora, casi dandole la bienvenida a la madrugada, como hacía bastante tiempo no hacía.
Esta vez, me acompaña el murmullo de las olas del mar, un recuerdo que no quiero que nunca sea lejano y las ansías de verte cruzar la puerta de casa.
Cada tanto, tenemos tiempo de tomarnos unos mates y hablar... Hablar de todo eso que no podemos hablar en semanas...
Me encanta cuando te espero, porque dentro mío siento la misma emoción que sentía cuando lo esperaba a él, con las zapatillas puestas y las llaves en la mano lista para ir al almacén y buscar: una coca, una fanta, una 7up, medio kilo de queso fresco y medio kilo de dulce de batata, una cerveza para papá y mamá, unos yogures de vainilla, alguna golosina, el diario...
Hoy releyendo notas viejas, me di cuenta que ya hace casi dos años que lo extraño todos los días y me parece casi increible todo lo que no le puedo contar personalmente.
Estoy en casa, sola, la gata duerme en el sillón, los minutos pasan y cada vez estás más cerca.
Hoy no importan las discuciones en el hotel, la gente que va y viene, las cuentas, las facturas, los francos que no son...
Hoy solamente estas vos... como antes, como siempre... Solos vos y yo... Para mirarnos a los ojos y recordar por qué nos elegimos. Para hablarnos aún en los silencios más infranqueables. Para reconocernos en los abrazos, en las risas, en los besos.
Hoy estás vos, que sos parte de mí, así como estoy yo que quiero ser parte de vos...
Hoy, vos y yo, haremos desaparecer al mundo entre mates y sonrisas. El ritual va a adquirir su viejo significado, en cada mate que nos pasamos y en cada palabra que nos dedicamos, la alegría de compartirnos y la delicia de sabernos caminando juntos paso a paso...
Escucho el ascensor llegando al 8vo, ya estás acá...