Portrait from The box portrait series. Fuente:SWPC |
Portrait from The box portrait series. Fuente:SWPC |
Portrait from The box portrait series. Fuente:SWPC |
Portrait from The box portrait series. Fuente:SWPC |
Portrait from The box portrait series. Fuente:SWPC |
Portrait from The box portrait series. Fuente:SWPC |
El pasado 30 de septiembre el Cultural publicó un artículo sobre la exposición de Lisa Oppenheim en la Galería Marta Cervera de Madrid. Hablar de su trabajo es una forma de rescatar procedimientos analógicos algunos arcaicos y otros que se van dejando de lado para disfrutar de las comodidades difícilmente resistibles que la fotografía digital nos ofrece.
Sin duda a Oppenheim le interesa mantener vivos estos procedimientos porque son el medio idóneo para contar sus historias y que además resultan esenciales para potenciar esa idea del paso del tiempo.
La exposición “Fuegos grandes y pequeños” cuenta con tres trabajos de la artista: la filmación en 16mm “Yule Log”, fotogramas “Cuando el rio suena agua lleva” y los “Heliogramas”. El fuego, el humo y el sol son motivos de cada una de las obras y que además se interrelacionan.
Me gustaría detenerme en una de las obras, “Heliogramas 1876/2011”. Se compone de series de fotografías que repiten aparentemente la misma imagen del sol, sin embargo, todas son distintas por la exposición que se ha realizado en cada una de ellas. Las fotografías tienen algo de 1876 y algo de 2011.
La imagen del sol pertenece en realidad a John William Draper y fue tomada por este científico el 8 de julio de 1876. Posiblemente la artista haya utilizado esta imagen como negativo para realizar las fotografías. La fecha en que fue tomada en 1876 nos revela que el científico había fotografiado el sol durante el equinoccio de primavera y la artista pretende rescatar esa misma imagen y mostrarla también con la luz del equinoccio de 2011. Me parece inteligente la forma en que la artista ha querido retratar la luz del sol de hoy con la imagen del sol del ayer.
El estudio que realiza Oppenheim es poético, artístico y hasta científico ya que la imagen del sol no es una, sino varias realizadas en distintos días y en horas concretas. Resulta curioso el modo como organiza estas fotografías, como si se tratase de una tabla en que las filas son los días y las columnas las horas, dejando algunos espacios vacíos como ausencias.
En las siguientes fotografías podemos ver por orden cronológico las fotografías en el que se aprecian los cambios de luz solar en el equinoccio.La última imagen corresponde con la serie expuesta en la galería Marta Cervera.
Os presento una estupenda exposición de fotografía en la que no se utiliza una cámara fotográfica. Y entonces alguien podría pensar. Pero… si la fotografía necesita una cámara ¿Quién ó qué se convierte en cámara?
Todo tiene una simple explicación y precisamente todos aquellos que hayan pasado por un laboratorio de blanco y negro recordarán los primeros fotogramas con los que se nos revelaba el misterio de la fotografía y descubríamos asombrados como un papel blanco puede transformarse en fotografía. En entradas anteriores ya hablamos precisamente de procedimientos similares a través de Man Ray, Moholy-Nagy o las cianotipias de Ana Atkins.
En la exposición “Shadow Catchers: camera-less photography” se recoge la muestra de cinco artistas contemporáneos Floris Neusüss, Susan Derges, Adam Fuss, Pierre Cordier y Garry Fabian Millar que trabajan la fotografía sin utilizar cámara fotográfica. Sus obras son creaciones fotográficas que juegan con la luz, la sombra y con emulsiones preparadas que hacen visible aquello que quieren atrapar en una fotografía.
La exposición tiene un recorrido marcado en el que se introduce al espectador en la variedad de procesos fotográficos que existen sobre fotografía sin cámara y continúa por un espacio dedicado a obras de cada artista, así como un vídeo de cada uno de ellos.
FLORIS NEÜSUSS (Born, 1937)
Son las primeras fotografías que encontramos. Floris Neussüs ha dedicado toda su vida a investigar y enseñar las posibilidades que ofrece el fotograma. Además es un defensor de la fotografía sin cámara, es conocido por sus fotogramas de cuerpo entero (körperfotogramms). Sus fotografías son imágenes de gran tamaño que utilizan la sombra o huella del cuerpo femenino como motivo principal.
Una de las fotografías que llama la atención es “El homenaje a Talbot: The Latticed Window, Lacock Abbey” con las dimensiones originales de la ventana que fue el motivo del primer negativo fotográfico realizado por Henry Fox Talbot en 1835. Neusüss cubrió todo el interior de la ventana con papel fotográfico utilizando la luz de la luna. La luz exterior dejo su dibujo en el papel que cubría las ventanas inmortalizando el mismo motivo que Talbot plasmó y que Neussüs realizó a tamaño natural.
Floris Neusüss (made in collaboration with Renate Heyne)
'Homage to Talbot: The Latticed Window, Lacock Abbey, 2010'
2010 (first made in 1978; new version commissioned for this exhibition)
Dye destruction print photograms
Width 315 cm x height
Collection of the artist
© Courtesy of Floris Neusüss
SUSAN DERGES (Londres, 1955)
Durante los años 90 Susan Derges fue bastante conocida por sus fotogramas de agua, realizados bajo la luz de la luna y en un espacio natural. Como si se tratara de un laboratorio fotográfico, Susan sumergía papeles emulsionados dentro del agua atrapando todos los movimientos del agua en sus fotografías. El agua como motivo clave de su obra guarda una significación especial para la artista como metáfora de la transformación.
El vídeo que vemos a continuación muestra todo el trabajo previo antes de salir por la noche al laboratorio fotográfico de la naturaleza.
Susan Derges from Victoria and Albert Museum.
ADAM FUSS (Londres, 1961)
Fue de forma casi accidental como Adam Fuss descubrió los fotogramas y a partir de aquel momento se interesó por experimentar y buscar otros procesos o formas de fotografiar sin la ayuda de la cámara.
El artista define su trabajo no como una forma de reproducir lo que aparece de forma obvia ante nuestros ojos, sino de mostrar y descubrir aquello que nos vemos y que permanece invisible a nuestros ojos.
Uno de sus primero fotogramas realizados en el laboratorio dibuja sobre el papel fotográfico diferentes círculos concéntricos. Esta obra Ark, fue creada de una forma similar a como ha trabajado Susan Derges pero dentro del laboratorio fotográfico. Adam colocó un papel fotográfico dentro de una bandeja cubierta con agua y dejó caer dentro una gota de agua. En ese momento la luz comenzaba a grabar aquel acontecimiento, haciendo visibles las sutiles ondas creadas por el movimiento de una simple gota de agua.
Para Adam, esta gota de agua contiene una significación añadida, más relacionada con lo metafísico. Como una sola gota de agua es capaz de generar un movimiento infinito a través de ondas. Es como la primera gota de lluvia que anuncia el diluvio. Este tipo de ondas concéntricas pueden encontrarse también en las pinturas de Hilma af Klint, un místico sueco con el que Adam Fuss se siente bastante identificado.
En general, todo guarda cierta vinculación con los recuerdos de su infancia y sus experiencias vividas. Su trabajo se concibe como elegías visuales centradas en temas universales como es la vida y la muerte y que en sus fotografías aparecen representadas con diferentes elementos y formas.
Adam Fuss from Victoria and Albert Museum
PIERRE CORDIER (Bruselas, 1933)
Descubrió uno de los procesos fotográficos denominado “quemigrama” en 1956. Durante muchos años se ha dedicado a explorar las posibilidades de esta técnica más dentro del campo experimental que artístico.
Los trabajos se acercan más al grabado o a la pintura que a la fotografía. Cordier sustituye el lienzo por el papel fotográfico. Como si se tratara de una plancha de grabado utiliza barnices, cera, pegamento, aceite o yema de huevo para reservar zonas y dejar visibles aquellas por donde la luz pasa. La superficie del papel después es trabajada, bien creando dibujos o realizando incisiones o incluso escribiendo texto sobre la superficie emulsionada. Una vez terminado se revela y fija en el laboratorio para obtener la imagen final.
Pierre Cordier from Victoria and Albert Museum .
GARRY FABIAN MILLER (Bristol, 1957)
Su preocupación principal es la luz, el tiempo y como combinar ambas en lo fotográfico. Muchas de sus obras exploran el paso del tiempo a través del ciclo de un día, de un mes o incluso de un año, pero además sugieren el paso del tiempo a través de la historia, el espacio y lo desconocido.
En las fotografías podemos ver series en las que una misma forma aparece repetida pero sensiblemente cambiada tras el paso del tiempo. Una hoja o un pétalo pueden ser motivos para mostrar esa transformación de su forma y de su color. Las series hacen visible a nuestros ojos ese cambio a través de sutiles transformaciones naturales.