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LINGÜINI CON ALBÓNDIGAS CRIOLLAS
(para 2 personas humanas)
INGREDIENTES:
- 200 g. de Pasta Lingüini
- 2 Chorizos Criollos
- 1 Lata de Tomates Enteros Pelados
- 2 Hojas de Albahaca
- 2 Dientes de Ajo
ASÍN SE HACE:
En este ajetreado mundo que vivimos siempre vamos con prisa y a pesar de que nos encanta enrollarnos en la cocina, a veces no hay tiempo. Sobre todo los días laborables. Hoy vamos a preparar una receta rápida. Pero rápida de verdad, aunque no por ello menos sabrosa que otras más elaboradas.
Empezaremos cociendo la pasta en abundante agua con sal, que al ser fresca estará lista en un periquete. Yo he utilizado unos lingüini, que en realidad son lo que toda la puta vida se han llamado tallarines, pero llamarlos con su nombre italiano queda que te cagas de bien. Nos da un aire interesante, cosmopolita y todas esa gilipolleces.
Seguimos con la parte más curiosa de la receta que son las mini albóndigas que vamos a hacer con los chorizos criollos. Para ello hay que hacer un corte en uno de los extremos y estrujar hacia abajo como si estuvieramos ordeñando a una vaca o comprobando la fiabilidad de un preservativo después del acto. Si es el del tercer acto, mi más sincera enhorabuena.
Continuamos estrujando y moldeando la carne con la idea de hacer unas cuantas albóndigas del tamaño aproximado de una canica.
Cuando las tengamos todas, las ponemos al fuego en una sarten con poco aceite y una vez que esten doraditas, añadimos los dientes de ajo bien picados, la albahaca troceada y los tomates de la lata espachurrados con nuestras propias manos.
Ya sé que no es lo más reglamentario pero....teníamos prisa ¿verdad?
Mientras termina de hacerse la salsa a fuego vivo, escurrimos la pasta, la regamos con un buen chorro de aceite de oliva virgen y justo después el broche final con nuestras albóndigas criollas y la salsa de tomate.
A pesar de que sé que lo vais a devorar, ésta es de las recetas que tardan más en comerse que en hacerse. Así que antes de iros a currar yo me asomaría un momento al espejo y me quitaría el cerco de tomate de alrededor de la boca, que siempre se nos olvida y parece que nos ha mordido los labios un borrico. Agur.
Cocinera en pruebas para esta receta: AZUCENA DEMPRESA