Título: Guardians of Ga'Hoole
Género: Acción/Animación
Director: Zack Snyder
Género: Acción/Animación
Director: Zack Snyder
Actores (voces): Emily Barclay, Abbie Cornish, Emilie de Ravin, Ryan Kwanten, Jay Laga'aia, Miriam Margolyes, Helen Mirren, Sam Neill, Richard Roxburgh, Geoffrey Rush, Jim Sturgess, Hugo Weaving, David Wenham
Duración: 90 minutos
Calificación: Apta Para Todos
Paìs: USA
Calificación: Apta Para Todos
Paìs: USA
Estreno: 7 de octubre
La última película del realizador de “300” y “Watchmen”, Zack Snyder, tiene una factura técnica irreprochable, sobre todo en su versión 3D. Esa excelencia se achata frente a un guión que linda de poco original, pero al mismo tiempo ofrece una revisión de la imagen del héroe en los relatos clásicos.
La historia se centra en la heroica lucha de un joven búho por salvar a su comunidad. Su nombre es Soren, y nació en el bosque Tyto, donde hubo un tiempo en el que habitaban en paz los búhos. Ahora la sombra del mal asecha sobre el reino de las aves. Para evitarlo buscará el Gran Árbol Ga'Hoole, en un viaje que se le resultara largo y angustioso. Soren y sus amigos tendrán que someterse a pruebas que jamás habían soñado y afrontar desafíos que nunca habían imaginado (entre ello la traición de su hermano).
En la cinta hay ecos de Caín y Abel, pero también de “La naranja mecánica” y “Corazón valiente” (1995), y la lista sigue. La película se multiplica en vueltas de tuerca, personajes secundarios que esconden secretos, conspiraciones y acción por doquier. El resultado es agridulce. Por un lado, esta elección de profundizar en la psicología del héroe, hay muchas secuencias de acción de alto vuelo, en donde el efecto tridimensional se luce y mucho. Pero este relato deja abierta puertas sin cerrar y no logra una un desarrollo mínimo en varias subtramas.
Si hay algo que agradecerle a esta nueva fábula cinematográfica es la crudeza de las imágenes, a tono con el tremendo drama que la recorre. Hay una alegoría al nazismo, pero Snyder elije un tono sórdido que no desentona. Algo que queda claro cuando la película muestra en forma gráfica a un ratón recién cazado, o la muerte en primerísimo primer plano. Resulta menos explicable, en cambio, la solemnidad de la banda sonora interrumpida en una secuencia cómica musicalizada con un tema pop que pareciera contradecir la estética de la película.
Es complicado definir el segmento generacional al que apunta el filme, pero este hecho (teniendo en cuenta el párrafo anterior) le da una madurez al relato que potencia su mirada sobre la construcción del héroe. En ese sentido, están todos los condimentos puestos para que “La Leyenda de los Guardianes” sea una gran película: hay pasión, deslealtades, un pasado mítico y todas las flaquezas que el sabio búho Soren podrá sortear, casi sin necesidad de acorralar a los personajes con secuencias musicales poco inspiradas o chistes a tono con el mundo televisivo. ¿Por qué la película no consigue ser más que un pasatiempo?
A diferencia de lo que ocurría con la exquisita “Pollitos en Fuga” (2000) aquí la iconografía nazi y la imagen del Mal quedan en lo ilustrativo, resintiendo el resultado final. Pensando en “300”, la curva va en ascenso, pero esta desciende.
0 criticas cinéfilas :
Publicar un comentario