Buenos días! muy buenos días!
No sabíamos que foto poner para hacer esta entrada que tanta ilusión nos hace, así que, por si alguien se la perdió, una foto de nuestra ya patentada "pose Atelier" en el photocall de Expotarta, con nuestro look nata-fresa del primer día.
Que todo hay que decir, en lugar de Mónica Marta y María, salimos María, Marta y Mónica.
Pero de todos es sabido que el orden de los factores no altera el producto, así que ahí estamos. (Sí, soy de ciencias, se nota?)
Hoy hace justo un año nos lanzábamos de lleno con nuestro blog.
Habíamos estado unos días cargando fotos de los primeros trabajos que habíamos hecho, pero no fue hasta el 28 de abril que lo hicimos público.
Lo abrimos a modo de galería fotográfica, las amigas de las amigas querían ver los pasteles que hacíamos, y de repente el facebook personal, dejó de serlo, así que abrimos el blog.
Poco después abrimos la página de facebook. Y otra vez a cargar fotos y a descubrir nuevas páginas.
Una nunca puede imaginar que lo que empezó como una diversión se iba a convertir, en solo un año, en una profesión.
Hemos explicado muchas veces que siempre hemos sido muy cocinitas. Nuestra madre preparaba los postres y nosotras íbamos tomando nota:
- ¿Como haces el arroz con leche, mamá?
- Pues echas un "puñaito" de arroz, lo cubres de agua, le das un hervor para quitarle el almidón, y luego la leche y azúcar hasta que te guste.
Y entonces nosotras pesábamos el "puñaito" de arroz y el azúcar hasta que te guste, y le hacíamos echar la leche en una jarra y así sacábamos la receta.
Porque nuestra madre, como muchas otras, son de las de cocina de puchero, de las que no les hacía falta receta ni báscula ni vasos medidores ni thermomix, ni KA, ni tan siquiera varillas de mano.
Vamos, ni rodillo. Usaba una botella para estirar la masa de la empanada que, obviamente, hacía a mano.
De las que, sin saber cómo, se presentaba gente en casa y al momento ponía una mesa que daba para todos.
Tú abres tu nevera y solo ves lechuga como no hayas hecho la compra (si es que queda lechuga!) y como se te presente alguien vas y pides pizza o sales fuera.
Pero nuestra madre parecía obrar el milagro de los panes y los peces ante cualquier imprevisto.
Y por eso la admiramos.
Por eso y por muchas cosas más, está claro, pero habernos inculcado el amor por la cocina es de agradecer.
Y nuestro padre, trabajador incansable y emprendedor nato, siempre deseando que montásemos algo.
Pues aquí está, papá, al final te hemos hecho caso.
Y es que nuestro padre es de aquellos hombres que se levantaban antes de amaneciera y llegaba a casa cuando estábamos ya durmiendo.
Que trabajaba en dos sitios, y en tres si hacía falta. Que lo veíamos los sábados al medio día y lo esperábamos para comer, porque los sábados tocaban macarrones (bien!).
Y el domingo se levantaba y nos metía a los seis en el coche (sí, seis) y nos llevaba a patinar, o al campo, o a montar en bici o a la playa... o a lo que fuese, pero había que hacer cosas en familia.
Y así lo hemos hecho.
Nuestros tres hermanos trabajan juntos en una empresa de piscinas que montaron hace algún tiempo, Aquanet piscinas, S.L.
Y ahora nosotras, las niñas (ay, niñas!) haciendo caso a nuestro padre, nos hemos atrevido con Atelier Sucrème, S.L.
Queremos daros las gracias a todos los que desde hace un año nos habeis acompañado, y por eso, aunque ya pusimos un pequeño adelanto en facebook, os lo queremos agradecer de la forma que más nos satisface: creando.
Sabéis que (si las obras y los proveedores nos lo permiten!!!) este próximo mes de mayo abrimos nuestro obrador-escuela, así que, en cuanto podamos confirmar las fechas de apertura y de cursos, sortearemos unas plazas.
Para agradecer los casi 700 seguidores del blog en nuestro primer año
Para agradecer los más de 2700 seguidores de facebook en menos de un año
Y para que podais ver el taller más nata-fresa de tooooooda la historia de la humanidad!!!
Gracias por acompañarnos en este bonito camino, gracias por habernos permitido conocer a tantas personas que se han convertido en amigas, gracias, en fin, por estar ahí, porque nosotras, sin vosotros, no seríamos nada.
...y porque, a veces, los sueños sí se hacen realidad.
Gracias.
♥♥♥