Pero si su anterior película, "El fascista, la beata y su hija desvirgada", funcionaba ligeramente, en esta falsa secuela (hay muchos fachas en ella, y aparece José Luis López Vázquez, pero no es el mismo personaje de la anterior), se impone tanto el rollo político, que la comedia se queda en una mera anécdota. Como consecuencia, nos aburrimos soberanamente.
Tras la muerte de Franco, un grupo ultra-derechista decide hacer una estatua ecuestre del generalísimo. Uno de estos fascistas se quiere beneficiar a la mujer de un escultor rojo, por lo que le ofrece el trabajo a este tío, que de primeras se niega por sus convicciones políticas, pero acaba cediendo, ante la insistencia de su mujer, quien termina liada con el fascista. Todo esto desencadenará supuestas situaciones cómicas.
Un poco de destape, con la escasamente apetecible Nieves Navarro mostrando miserias, Ovidi Montllor muy contento de hacer su papel de escultor rojo, José Luis López Vázquez no tan entregado como suele habitualmente y un ritmo leeeento, leeeento, leeento en una de esas películas que carecen de interés alguno para todos aquellos que no se sientan fascinados por el cómo la historia de un país afectó a sus géneros cinematográficos. A mi sí me fascinan esos factores y, sin embargo, esta peli no me dice ni fu, ni fa.
Un deleite para los sentidos poder ver al gran “Saza”, interpretando al facha con absoluta maestría. No me extraña que se encasillara en este tipo de papeles. Recomiendo el visionado con avance rápido, y parando solo en las escenas donde el veterano actor tira de verborrea fachosa asegurando, tras un asesinato para-fascista, que a un rojo no se le asesina; se le ejecuta.
Por lo demás… mala.
Un deleite para los sentidos poder ver al gran “Saza”, interpretando al facha con absoluta maestría. No me extraña que se encasillara en este tipo de papeles. Recomiendo el visionado con avance rápido, y parando solo en las escenas donde el veterano actor tira de verborrea fachosa asegurando, tras un asesinato para-fascista, que a un rojo no se le asesina; se le ejecuta.
Por lo demás… mala.