Ahora que estamos en plena época de fresas, que da gusto verlas tan hermosas pero que lamentablemente se echan a perder en un par de días, este tipo de trucos es estupendo para aprovecharlas en su mejor momento antes de que se pongan pochas.
Realmente no es una receta, es más bien una idea que leí en el blog Denikatessen y me pareció perfecta.
- Fresas
- Azúcar
- Zumo de Limón
No pongo cantidades precisas porque se pueden utilizar las fresas que necesitéis, el azúcar dependerá del gusto y de lo dulce que sean las fresas. El zumo de limón ayuda a que se conserven mejor. Si os sirve de referencia yo utilicé 250 gr de fresas, 30 gr de azúcar y el zumo de medio limón.
Hay que limpiar muy bien las fresas y quitarles las hojas. Se parten en trozos y se les añade el azúcar y el zumo de limón.
Se trituran con las cuchillas hasta que quede una salsa muy fina.
Incluso se puede pasar por un colador para que no se noten las semillas.
Si uno es capaz de evitar la tentación de beberse directamente el batido de fresas así, sin más, consigue una salsa estupenda.
Es genial para añadir un toque de color y sabor a cualquier postre. Yo además la he utilizado para cubrir una tarta añadiendo un poco de gelatina y queda perfecta.
Pero lo que más me gusta del truco es que se puede congelar estupendamente. Yo utilizo unas bolsas de cubitos de hielo que se congelan estupendamente y son muy cómodas.
Basta utilizar un embudo como el de la foto y verterlo con cuidado. Una vez llena la bolsa no se desborda y tampoco hay que hacer nudos ni nada.
Al congelarse se pueden separar fácilmente y se utiliza la cantidad que se necesite en cada momento.
Se trituran con las cuchillas hasta que quede una salsa muy fina.
Incluso se puede pasar por un colador para que no se noten las semillas.
Si uno es capaz de evitar la tentación de beberse directamente el batido de fresas así, sin más, consigue una salsa estupenda.
Es genial para añadir un toque de color y sabor a cualquier postre. Yo además la he utilizado para cubrir una tarta añadiendo un poco de gelatina y queda perfecta.
Un ejemplo de la salsa de fresas con un poco de gelatina para decorar un brazo de gitano |
Basta utilizar un embudo como el de la foto y verterlo con cuidado. Una vez llena la bolsa no se desborda y tampoco hay que hacer nudos ni nada.
Al congelarse se pueden separar fácilmente y se utiliza la cantidad que se necesite en cada momento.
Muy buen truco para poder utilizar con diferentes frutas y con fresas es genial.Bssss y buenas noches.
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