Tarta de Batata

  Me encantan las batatas y boniatos asados. Recuerdo con muchísimo cariño cuando de pequeña llegábamos al portal y se notaba el aroma de los boniatos recién asados y como pensaba mientras subíamos en el ascensor "Ojalá que este olor salga de casa!" y la tremenda alegría cuando en efecto teníamos tan delicioso postre.
  Por eso cuando vi esta receta en Bakemania me encantó la idea y sabía que era garantía de éxito porque sus recetas siempre salen bien. 

  En efecto, fue un éxito rotundo y quería compartirla antes de que se acaben las batatas. 


Ingredientes para la base

• 185 gr de harina.
• Un pellizco de sal.
• Dos cucharadas soperas de azúcar (unos 50 gr).
• Un pellizco de levadura.
• 55 gr de mantequilla.
• 60 ml de aceite.
• Una cucharada sopera de queso philadelphia.
• Dos cucharadas soperas de leche.

Ingredientes para la crema

• 400 gr de batata asada.
• 150 gr de azúcar moreno.
• 100 gr. de azúcar.
• Una pizca de canela.
• Un pellizco de sal.
• 55 gr. de mantequilla.
• 310 ml de leche evaporada.
• 3 huevos.
• Una cucharada de pasta de vainilla.

  En la receta original se utiliza batata cocida, basta cocerla hasta que esté tierna, pero yo la asé en el horno, envuelta en papel de plata, a unos 160º hasta que al pincharla no ofrecía resistencia.

  Sólo utilicé una de ellas, porque al quitarle la piel vi que tenía el peso necesario. 

  Una vez asada o cocida la batata, empezamos con la base de galleta. Se ponen en un recipiente la harina, sal, azúcar y levadura en polvo. Yo siempre lo tamizo.

  Se añade la mantequilla y el queso y se amasa. 

  En bakemanía vi una fotografía de un utensilio que tengo desde hace años y no utilizo a menudo, así que lo probé con esta masa.

  Será que tiene truco, pero no acabo de cogerle el punto a esta herramienta. La masa queda como arena gruesa, sin llegar a mezclarse del todo. Entonces se añade la leche y el aceite.

  Entonces se termina de amasar (ya sin cacharro) y queda una masa flexible y elástica, algo blandita pero manejable.

  Para ponerla sobre el molde la estiré sobre un papel vegetal procurando que quedara lo más circular posible.

  Volqué el papel sobre el molde (previamente engrasado con una pizca de spray desmoldante) y ajusté la masa para que lo cubriera por completo.

  Este molde mide unos 26 cm de diámetro y 5 de alto y se ajustó perfectamente a las cantidades de la receta. 

  Lo dejamos enfriar mientras se prepara el relleno. También podemos encender el horno para que se vaya calentado a 230º.

  Ponemos la batata machacada, el azúcar moreno, la mantequilla, sal, canela y la mitad de la leche evaporada en un cazo al fuego.

Aunque no lo parezca, los ingredientes están en una cazuela, aunque es de pirex y por eso se ve lo que está detrás

  Se calienta removiendo con unas varillas hasta que el azúcar se disuelva y la mantequilla esté derretida.

  Retiramos del fuego y dejamos que se enfríe un poco. Yo le pasé la batidora eléctrica para que quedara una crema muy fina.

  Lo pasé a un bol para que se enfriara antes. 

  Mientras se enfría, batimos los huevos con el azúcar blanco, la vainilla y lo que queda de leche evaporada.

  Se mezcla con el puré de batata. La mezcla queda bastante líquida.

  Y se vierte sobre la base. 

  Horneamos 10 minutos a 230º (yo lo tuve 15 minutos porque este molde no se calienta tanto como los metálicos y alguna vez me ha quedado la base poco hecha). 

  Y después bajamos el horno a 160 y dejamos la tarta una hora más. 

  La crema sube un poco pero luego se asienta.
  

  Lo dejamos enfriar por completo. 

  Se me ocurrió decorarlo con un poco de azúcar glas en una de las plantillas que tengo de Todo Stencil. 

  El resultado es delicioso. Incluso los que no estaban convencidos cuando dije que era de batata, pidieron un trozo al probarla y alguno repitió. La galleta queda fina y crujiente, la crema extremadamente suave y con una textura deliciosa.

  Seguro que repito pronto.