En este último año, el blog ha estado algo abandonado (supongo que os habéis dado cuenta) por motivos laborales.
Trabajar a jornada completa en una cocina es muy gratificante para quienes disfrutamos de esta actividad. Por contra también es agotador. Es como ir al médico, sabes cuando llegas pero nunca cuando sales....
Disfruté como una niña de mi trabajo, conocí a gente maravillosa que además de clientes se convirtieron en amigos. De repente, fui madre de tres niñas que me sacaban de quicio y a los cinco minutos estábamos riendo como locas ! Era una montaña rusa de sentimientos que no olvidaré nunca.
Actualmente vivo una nueva etapa. Sigo en una cocina pero a media jornada. Disfrutaré de más tiempo libre para "mis cositas" entre las que se encuentra este blog, que después de 8 años sigue recibiendo miles de visitas a pesar de su poca actividad. Os doy las gracias por estar ahí.
Bueno, vayamos a la receta.
Durante los días 2, 3 y 4 de octubre, se celebra en
Lourenzá, la XXV edición de la Festa da Faba, declarada de Interés turístico de Galicia en el año 2000.
Hace unos meses, Mari Carmen Seijo Otero, productora de
fabas "Xoia do Val" me invitó a probar parte de su cosecha. Las fabas blancas las empleé en esta receta de
fabas con bacalao y las verdinas que recibí las preparé en la que hoy os voy a relatar.
Para quien no la conozca, os diré que es una faba más pequeña que la blanca y de delicado sabor. Su piel no se distingue una vez cocida, es tierna y suave. Mantiene muy bien sin deshacerse durante la cocción y combina perfectamente con cualquier pescado o marisco.
SALPICÓN DE RAPE Y FABAS VERDINA