miércoles, marzo 11, 2009
jueves, octubre 23, 2008
viernes, marzo 14, 2008
lunes, febrero 11, 2008

(Fragmento de Rayuela cap. 36)
miércoles, diciembre 19, 2007

PENSAMIENTOS (no le busquen coherencia)
Uno intenta verse a sí mismo (esencialmente) a través de la mirada de otros, interceptada por la subjetividad de quien te mira. Pero es esa subjetividad cargada de otredad la que genera la válidez de esa mirada. Todo eso que convierte a la sensación en percepción.
Pero eso refleja esencia?
Vos te querés ver a vos mismo, no querés ver lo que los otros ven de vos. O acaso eso te sirve?
Habrá que cerrar los ojos y mirar para adentro. Pero no hay nada más oscuro que el propio adentro.
Cambiemos el sentido. No, tampoco es auditivo. El adentro está mudo. Es intangible, insípido, inholoro.
Por ahí se trata de encontrarse con uno, en vez de verse, olerse, escucharse...
Pero cómo uno se va a encontrar con uno mismo, si para encontrar se necesita a otro.
Acaso yo soy mi otro yo? Pero el otro yo no busca al propio yo. Juguemos al yo-yo.
Dejemos que el otro yo se manifieste.
Uno intenta verse a sí mismo (esencialmente) a través de la mirada de otros, interceptada por la subjetividad de quien te mira. Pero es esa subjetividad cargada de otredad la que genera la válidez de esa mirada. Todo eso que convierte a la sensación en percepción.
Pero eso refleja esencia?
Vos te querés ver a vos mismo, no querés ver lo que los otros ven de vos. O acaso eso te sirve?
Habrá que cerrar los ojos y mirar para adentro. Pero no hay nada más oscuro que el propio adentro.
Cambiemos el sentido. No, tampoco es auditivo. El adentro está mudo. Es intangible, insípido, inholoro.
Por ahí se trata de encontrarse con uno, en vez de verse, olerse, escucharse...
Pero cómo uno se va a encontrar con uno mismo, si para encontrar se necesita a otro.
Acaso yo soy mi otro yo? Pero el otro yo no busca al propio yo. Juguemos al yo-yo.
Dejemos que el otro yo se manifieste.
lunes, noviembre 26, 2007
Tirame las Cartas...

Todo eso para que Lili tire las cartas...
Planteados algunos temas por la persona a la que le iban a tirar las cartas, Lili paso por algunos lugares en el transcurso de "la tirada": pasado inmediato, el ahora, futuro inmediato. Básicamente hablaba de donde estaba parado uno respecto al tema del que se le había preguntado, y cuales eran las tendencias o predisposiciones respecto a eso, digamos: las cartas con las que uno cuenta para jugar.
También habló de auto-boicots, de enrosques, de ponerle más (o menos) razón de la necesaria, de tiempos, de ansiedades, de estructuras que romper, de ciclos.
Uno de los puntos clave fue la decisión. El poder de decisión que uno tiene frente a todo eso, que uno no es un sujeto sujetado a su destino inmodificable. Es uno el que decide usar esas cartas (o no), y el como usarlas.
Durante y luego de la tirada de cartas, se hicieron comentarios recurrentes que tenían que ver con lo parecido a una sesión de terapia, en cuanto a la influencia que tiene uno mismo en todo esto, aunque suene a obviedad. A veces uno le adjudica mucho al plano de lo mágico, de las coincidencias cósmicas y todo eso que nos gusta tanto, pero nos olvidamos que somos nosotros lo que elegimos (conscientemente o no) romper con las estructuras para pasar a otra etapa o quedarnos con lo que conocemos.
Y otro tema que se me cruzaba por la cabeza respecto a esto último, era que tanto la psicología o el tarot, o lo que sea, son herramientas que usan personas con ciertos dones de percepción, utilizados para ayudar a encausar a otras personas.
Para finalizar este cúmulo de ideas no tan sueltas, me gustaría compartirles un fragmento de El libro de los amores ridículos de Milan Kundera:
"El hombre atraviesa el presente con los ojos vendados. Sólo puede intuir y adivinar lo que de verdad está viviendo. Y después, cuando le quitan la venda de los ojos, puede mirar al pasado y comprobar qué es lo que ha vivido y cuál era su sentido".
Suscribirse a:
Entradas (Atom)