Museo de la evolución humana

Atapuerca es una más de esas joyas relativamente desconocidas que tenemos en España. Como de costumbre, nos cuesta sacar partido a nuestros tesoros, pero esta vez parece que pasito a pasito vamos consiguiendo algo. ¿Estaremos aprendiendo?

Llevo mucho tiempo preparando una entrada sobre este yacimiento excepcional, que es posiblemente el mejor del mundo, y no quiero dejar pasar la ocasión de avanzaros algo, porque se inaugura por fin el Museo de la Evolución Humana. Mientras, seguiré documentándome para la otra entrada.

El nuevo museo estará en Burgos, en un edificio diseñado por el arquitecto Juan Navarro Baldeweg y nos mostrará no sólo los mejores fósiles encontrados en la Sierra de Atapuerca, sino que se centrará también en la evolución humana. El proyecto es ambicioso, no en vano, se dedicarán más de 12.000 m2 y se espera que se convierta en un punto de referencia a nivel mundial.

No sé vosotros, pero yo estoy deseando contemplar de cerca a “Miguelón”, el cráneo más completo encontrado hasta la fecha, que corresponde a un Homo Heidelbergensis de hace más de 500.000 años. Como podéis suponer es el que corresponde a la foto de esta entrada.

Aceptamos pulpo

Aceptamos pulpo como animal de compañía.

Un punto negativo para mis compañeros de trabajo ingleses y alemanes, que no han sabido estar a la altura. Tampoco me ha sorprendido. Que se jodan todos los que deseaban que España perdiese, que eran bastantes. Repito para que quede claro: que se jodan.

Un hurra por mis amigos holandeses, que sí han sabido perder. Ojala que les vaya bien desde ya. Son un pueblo moderno, inteligente y abierto.

El fútbol no me interesa demasiado, sobre todo desde que dejó de ser un deporte para convertirse en puro marketing, pero he de reconocer que he seguido de cerca la evolución de la selección española en el Mundial.

Creo que han hecho historia, por una vez podemos sentirnos orgullosos y nos han animado a sacar lo mejor de nosotros. La emoción de esta fase final será difícil de olvidar.

¡España está de enhorabuena!

La reapertura de Altamira

Vaya por delante que ando en las antípodas de ser un experto y que sólo manifiesto una opinión personal fundamentada en lo poco que conozco sobre cuevas prehistóricas.

Leo con sorpresa que van a reabrir Altamira al público, lo que me parece un crimen, por mucho que limiten la entrada de visitantes. Os dejo un par de enlaces con la noticia:

http://www.eldiariomontanes.es/v/20100613/cantabria/visitas-experimentales-realizadas-2007-20100613.html

http://www.google.com/hostednews/epa/article/ALeqM5hXNhnXDE7iie_0vpAIsqki4bb5tg

Descubierta a finales del siglo XIX, Altamira es el máximo exponente de una representación artística que es menos común de lo que pensamos. En todo el mundo, sólo hay tres cuevas similares, la propia Altamira en España y Lascaux y Font-de-Gaume en Francia. Si bien hay más cuevas con pinturas, éstas no comparten la factura de las tres que menciono.

De ellas, sólo la última puede verse sin que la respiración cause daños irreparables, estando limitado el número a doscientas personas diarias. Esto es así porque la cueva está seca, no tiene agua, algo que no sucede con las dos primeras.

Altamira y Lascaux llevan varios años cerradas, aunque dependiendo de la época del año han podido entrar hasta medio centenar de personas al día. Ambas cuentan con excelentes museos en los que los profanos podemos hacernos una idea sin que las originales sufran. En el caso de Lascaux, el museo es tan fiel que replica incluso la temperatura. Yo, que iba en mangas de camisa, sobreviví gracias al forro polar que me prestó una amiga (ella llevaba tres o cuatro).

No estamos preparados. He visitado muchas cuevas en media docena de países y en todos ellos se puede advertir lo mismo. La gente no las respeta. Flashes que se disparan en lugares prohibidos, estalactitas manoseadas, ennegrecidas por la suciedad de las manos, cuando no simplemente rotas. No nos importa que hayan tardado milenios en crecer, ni que muchas lo sigan haciendo todavía. No se nos ocurre que los que vengan detrás puedan estar interesados en verlas y disfrutar de ellas.

No sé qué intereses hay detrás de la reapertura, tampoco nos lo va a contar nadie, lo que sí sé es que vamos a perder irremisiblemente una parte esencial de nuestro patrimonio. Deberían permanecer cerradas hasta que el avance tecnológico consiga evitar su deterioro y las personas aprendamos a comportarnos.