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Muchos de vosotros ni siquiera os habréis percatado de la
noticia que apareció el viernes a altas horas de la madrugada en el periódico El País.
Cuando se ´calentó´ el debate y la sección de comentarios empezó a llenarse (calculé 170 mensajes en menos de una hora) enseguida la quitaron de la portada y estos días ningún otro medio de comunicación, salvo el periódico argentino Diario Crítico y el mexicano El Financiero, se ha vuelto a hacer eco de ésta.
Curioso publicar algo que afectará a
1 millón y medio de ciudadanos españoles en plena Semana Santa y además avisando que la ley se firmará el día que comienza la operación salida de las vacaciones de Agosto
¿coincidencia? Sí, debe ser éso, puras casualidades de la vida...Quieren vetarnos, a los emigrantes españoles, del
derecho fundamental de sufragio en elecciones municipales, autonómicas y para el Congreso de los Diputados, efectivamente haciendo con ello que tengamos nacionalidad de este país (y un pasaporte muy mono de color granate, que conste) pero ni voz ni voto.
A la palestra han saltado docenas de compatriotas que nunca han viajado más allá de los Pirineos con comentarios al más puro estilo
KKK llamándonos traidores, anti-españoles, chupasangres sólo interesados en dinero y argumentando que si no estamos aquí sufriendo las consecuencias de la crisis económica no merecemos opinar sobre el futuro de
España.
Como nieta e hija de emigrantes que soy me duelen especialmente estos comentarios.
Mi abuelo (bombero de profesión, desempleado por aquel entonces) se fue a
Cuba con el fin de encontrar un trabajo y mantener con ello a toda la familia y sobre todo pagar el tratamiento contra el cáncer de mama de mi abuela.
Mi otro abuelo (médico) al terminar la carrera que estudió con beca y regresar a Galicia vio que en su pueblo seguían sin tener para comer y emigró a
Suiza para sacar dinero y mantener a una familia compuesta de 14 miembros.
Años más tarde mi padre hizo lo mismo, en su caso estudiando la carrera en Suecia y más tarde haciendo un máster en Inglaterra (nada de esto pagado por el gobierno de la madre patria); siempre envió dinero a sus padres y el año que el ayuntamiento de su pueblo no tenía fondos para celebrar las fallas él regaló la cifra necesaria a la agrupación vecinal para que no se quedasen sin sus fiestas.
Gracias a gente como mis antepasados muchas comunidades en este país
han salido a flote durante décadas.
Los
´nuevos emigrantes´ desde luego tampoco nos quedamos atrás y pongo como ejemplo a mi amiga B. que lleva años donando dinero a su aldea cántabra para que los críos no se queden sin la tradicional cabalgata de Reyes donde se les da regalos (los padres ya dejaron hace tiempo de tener suficiente para esos
lujos...) y a mi amiga A.(vasca) cuyo padre era pescador y ahora por minusvalía no puede dedicarse a la faena así que ella mantiene a su padre, madre (ama de casa) y a los dos
NiNis que tiene por hermanos.
Y yo, claro, que durante los 10 años que viví en el extranjero enviaba dinero a casa todos los meses porque mis padres llevan siglos buscando empleo y malviven con 400 euros al mes que les da de
¿limosna? el Estado español después de haberse estado partiendo el lomo ambos durante años, especialmente mi madre que comenzó a trabajar en una tintorería a los
14 años. Ahora, en mi segunda incursión al extranjero, tendré que hacer lo mismo y tengo asumido que así será a largo plazo.
Sin contar la de veces que he donado dinero a la ONG católica de mi ciudad natal para que en fiestas navideñas puedan ofrecer más menús en el comedor social (que yo no sea religiosa no quita para que ayude a mis paisanos, irrespectivamente de si creen en Jesucristo, Allah o el mismísimo Pocoyo).
No me cabe la menor duda que estos
pobres de espíritu (por llamarles algo sutil) que hacen ese tipo de comentarios pertenecen a uno de estos cuatro grupos:
cobardes que no se han atrevido a salir fuera a buscarse las lentejas a pesar de estar deseando hacerlo; envidiosos (ay, ese deporte nacional que nunca deja de ganar adeptos) pijos que nacieron con el pan bajo el brazo y tendrían que consultar un diccionario para aprender el significado de la palabra
esfuerzo y personas que parecen aplicar diariamente a sus vidas el lema ´´
Yo primero opino, ya después me informo... o no´´.
¿Y me vienen a decir que yo soy
menos española que ellos y no debo participar en las decisiones de
MI país?
¿De verdad se piensan que nos vamos a cruzar de brazos, que no les vamos a inundar con quejas y hacer tanto ruido que esta ley se acabará metiendo en un cajón y olvidando para siempre?
Entonces es que estos politicuchos aún desconocen de qué pasta estamos hechos los emigrantes españoles.Firmado: ´Saray´
Os dejo con los enlaces a otros blogs que están cubriendo este tema y más abajo con algunos comentarios que he rescatado del foro que se ha abierto en la prensa escrita.
´Pelocha´ , mañica en GlasgowÁlvaro, ovetense en SouthamptonReena de Las Palmas en SingapurMarco en Tampa - FloridaMireia, barcelonesa en ParísGustavo en LondresLuna, granadina en Vancouver´Morti´, malagueña en Nueva YorkMiércoles en GlasgowPepi de Manresa en TokioJavi, vasco en LethbridgeMariano en Seattle´´A partir de hoy en el Club Español de la ciudad donde resido dejaremos de comprar productos españoles a la hora de celebrar nuestras fiestas.Y que dejen de venir a molestarnos los empleados de la embajada Zapatera-Rajoyana.No los queremos ni ver.Ahora si que me voy a sentir ciudadano del pais que me dio acojo.Goodbye Spain´´
´´Yo vivo en México desde hace 4 años, si ahora por vivir fuera me quitan el derecho de voto, dejaré de pagar impuestos. ¿No les parece?´´
´´Si hasta ahora éramos españoles de categoría inferior ahora, ¿para qué ser españoles?´´
´´Soy emigrante, tengo alguna propiedad que me quedò en herencia de mis padres en el mismo municipio en el que nacì. Todos los años pago los gastos de luz, agua, comunidad, recogida de basura, etc., y contribuyo con mi dinero para todo aquello que se me requiere dentro de la comunidad de vecinos. Pago pues religiosamente por mantener unos servicios que sólo utilizo durante un par de meses al año. Si soy nacido español y pago en mi municipio de nacimiento los gastos e impuestos de mis propiedades...¿Por què se me quiere negar el derecho a poder defender mis intereses y lo que es mio?´´
´´Soy residente en el extranjero y esto me deja helado. No estoy fuera por gusto, sino que no hay oportunidades para ejercer mi profesión en España. Mucha gente se ha dejado la piel para darnos a los españolitos el derecho a votar como para que ahora esta gentuza venga y nos lo quite a mi y a todos los que vivimos fuera´´
´´Pues resulta que como la nación está tan mal ( mucho peor de lo que dicen los partidos politicos que son mentirosos compulsivos ), la gente que no llora o no se queda llorando en la nación, se va fuera a buscarse las habichuelas y traer dinero, y mejorar el pais, y ESA ES LA RECOMPENSA que recibimos. Es la gente inteligente y emprendedora la que no interesa´´
´´Quitar el derecho al voto a los ciudadanos del propio país significa atentar contra sus derechos fundamentales. Poco importa dónde residan. Yo resido fuera de España, sí, y llevo más de veinte años hablando de la cultura y de la lengua española, como profesor de universidad. Gracias a mí y a otros como yo se difunde nuestra cultura por el mundo entero. Y mi propio país me da las gracias quitándome el derecho al voto. O sea que soy un ciudadano de segunda. ¡Qué bajeza la de esos políticos de pacotilla!´´
´´Para mí, como emigrante española en Alemania desde hace 9 años, el problema de fondo es otro. Por un lado, pienso que los emigrantes por razones de trabajo debiéramos computar como parados españoles y, por otro, que, por el hecho de vivir en el extranjero, nuestra visión de la realidad española es más amplia y menos susceptible de ser manipulada´´
´´Mmmm, ¿y no será para que no pueda votar toda esa gente que se ha tenido que ir fuera en los últimos años y que, en la mayoría de casos, tienen mucha más formación que nuestros políticos? Una masa de gente formada, crítica, con opinión propia y no manipulable... Demasiado peligrosa para permitirles que sigan votando...´´
´´Vivo fuera desde 1994, apoyo a mi familia que lo tiene crudo para salir adelante y las dos veces que he intentado volver han sido fallidas: sin trabajo digno y más que ayudando a mi familia, hubiese acabado siendo una carga más. A mí sí me afecta qué partido gobierna, soy española y quiero influir de forma directa sobre el gobierno de mi pueblo y región, que al fin y al cabo serán los que me permitan, o no, volver al lado de mi familia, mejorando, o emperorando, la situación de empleo, etc. etc. Para muchos de nosotros la llama de la esperanza de volver "a casa" aún sigue viva...´´
´´¿Cuál es el siguiente paso, me suprimen también la seguridad social?´´
´´Si no me dejan votar desde el extranjero, renuncio a la nacionalidad y punto. No me quieren, pues rompo amarras. En el mundo globalizado hay países más atractivos que ese reducto de alternancia decimonónica y caciquerío´´