Como en un flashback del pasado, imágenes en blanco y negro, tiñen de gris la primavera del Mediterráneo, cambian los tiempos, pero perennes quedan las presas y sus perros, molidas a palos sobre el asfalto terco, sujetan a duras penas sus cartones pintados bajo sus mochilas escolares, no llevan con que defenderse más que sus voces y sus gritos. Los atacantes empuñan sus porras bajo las miradas desviadas de sus cascos protectores. Todo ha salido bien al final, dice uno... no hemos llegado al final todavía, replica otro.
DÍAS GRISES
Hace 9 horas