ME CAGUEEEEEEENNNN! (o la vida es de color de rosa)
¡Pedazo de cabrón! ¿Pero tú que te has creído, que estoy esperando a que vengas tú por casa? “Por casa”, dices, “por casa”. ¿Ahora es tu casa? Vale que es tuya en un cincuenta por cuento, pero joer, YA NO ES TU CASA, en el sentido en el que decimos eso de “mi casa”.- Es que quería pasar por casa a eso de las siete y media a recoger las muletas –dijiste.
- Pues no voy a estar a esa hora, no paso por casa hoy, ya quedé a las ocho.
- Mira, si quieres puedes acercarte ya mismo, voy para allá, tengo una visita, y tengo que ir aAhora es cuando olvidas que es tu casa ¿verdad? Pues estoy hasta los putos cojones de enseñar mi casa o tu casa si lo prefieres a posibles compradores, y ya ves, pedazo de imbécil, hasta tengo que salir del curro para hacerlo, como ahora, cosa que tú ni te plantearías por supuestísimo. Pero nooo, ahora no dirás eso de “por casa”, noooo.
enseñarlo.
- Es que no puedo, tengo curro, ya me está costando lo de quedar a las siete y media.Si es que eres de un previsible!
- Es que C. se ha fastidiado un tobillo y voy a León a dejarle las muletas.
- No me interesa.Por mí como si le cortan las piernas, vamos. Mejor la cabeza, directamente, para qué andarnos con zarandajas. Hay que ser de la pasta de C. para utilizar a la esquizofrénica de tu madre (declarada por fín) para hacer daño a las nueras, decirle lo busconas que somos todas (por mujeres) y lo bien que nos gastamos los dineros que ganan sus hijos esperando, he de suponer, el día en que nos rebanara el cuello. Hay que ser de esa pasta que sólo puede ser uno de tu familia para decirle a tu cuñada desde hace catorce años, el día de nochebuena, cuando mete en el frigo la cena que TRAE ELLA, porque no se cena en esta casa salvo que ella traiga la cena, que hay demasiada gente ese día.
¡MIERRRRDA! Ya me pilló. Y lo haré claro, ¡Me CAGUEEEEENNN to lo que se menea!- Oye si vas a pasar por casa ahora (obvias a qué voy a casa, claro) que si no te importa puedes coger las muletas y ya paso yo por tu trabajo a por ellas a las siete y cuarto.
- Bueno, vale, pero sé puntual.Y como soy imbécil en grado superlativo, voy a casa, tu casa si quieres, enseño el maldito piso, soy amable, simpática, les doy el puñetero plano y todo. Cojo las muletas de las narices y me vuelvo a mi trabajo, cargando con las muletas para el tío al que desearía meterle las muletas por el culo y sacárselas, horas después, por la boca. Ya las ví, encima, esas no vuelven, para acabar de ponerme de más mala ostia, si es que eso es posible.Y dan las siete y media y no has llegado, como yo podía haber previsto, porque siempre haces lo mismo, SIEEEEEMMMPRE llegas tarde a todas partes, JODERRR. Como si yo no tuviera nada mejor que hacer que esperar a que aparezcas, leches. Y encima no coges el puto móvil, no, para qué.
¿Pero tú te has visto en un espejo? Esos rizos serán para esconder las patas de gallo, supongo, porque el look de veinteañero grunchero no pega nada con esa cara de treintañero quemado, la verdad.- Perdona es que me lié …- dices besándome escondido tras esos rizos que, ahora, rodean tu cara.- Te estaba llamando para dejártelas en esta cervecería, que tengo prisa.
¿Y a mí qué COJOOONES me importa? El tiene más luces que tú, eso está claro, por lo pronto ha sobrevivido a sí mismo, a su empresa y a la fama, cosa que no creo que tú pudieras hacer, entre otras cosas porque a las dos primeras NO LO HAS HECHO YA.- ¿Has visto a T.S. en nuestra web?- Sí, le he visto, sí.- ¡Es un tío supermajo! Es un dios en esta profesión y es de lo más humilde, tía! (se te ilumina la cara entera, no sólo los ojos, casi tanto como cuando me amabas a mí. Ahora son T.S. y el trabajo quienes prenden tus bombillas) Dimos las conferencias esas y compartimos mesa y cafés, y hasta tengo su mail privado.
¿Pero tú de QUÉ vas?- Bueno, que me tengo que ir.- ¿Sales hoy?
- Sí- miento, y mira que me cuesta mentirte- al final he quedado a las nueve y tengo que ponerme guapa.
No te estrellarás con el coche, no. Menudo disgustazo para C. cuando descubriera que sigo siendo la beneficiaria en el seguro de TU VIDA. Me acabo de reír. Esto es macabro macabro, pero que requetemacabro oye, pero me ha hecho reír imaginándome a tu hermano en tu funeral, diciendo lo tonto que eras, mira que no cambiar tu seguro de vida ni año y medio después de separado, seguir teniendo a la ZORRA esa, que soy yo, de beneficiaria.- Bueno, pues si eso, ya tomamos algo otro día.- Sí, eso, otro día. –sonrío, que guardo muy bien la compostura- ¡Adiós!- Ya te llamo.
Glauka
Etiquetas: MAR DE FONDO