Cuando alguien opina de literatura (y lo hace tan insistentemente desde un lugar aparentemente apoltronado de "crítico literario" o "profesor de literatura") se supone, se sobreentiende (o connota) que detrás de cada palabra, detrás de cada idea puntillosa hay un respaldo no solo académico, lectural, sino que el posible escritor en realidad escribe "bien" y no es un payaso imitador tautológico o inventor de la pólvora en una fiesta patronal.
Entonces entendemos que la autoridad de este capitoste no proviene de la escritura o de la lectura sino de un punto secreto de la soberbia o la ignorancia, desde algún lugar de la rabia y de la impotencia ante el verdadero escritor que siempre, pero siempre, lo mirará con lástima (y lo ayudará a rehabilitarse, si es que él se lo permite).
(…) "El fútbol es la literatura más social que encuentro. Pero en nuestro país toda literatura está condenada a la eterna crisis. El triunfo es moral, como Cueto, el poeta de la zurda" (sic. Gustavo Faverón)
Hormiga
Tu mano que describe
la órbita
de mi cuerpo
luneciendo va.
Bajo
nuestro hoyo en la tierra
plateadas bailan
las mil patitas:
puede cada una
caminar por mis raíces
marrones
y extendidas
sin tocar las tuyas,
árbol
a.2
No me enamoré
en primera
de las piedras
redondas
se me fue
la cadena
del abuelo
bajo un espigón
para botes
pobres
por la respiración
inmensa
de la playa
en otro lecho
los pasos del agua
allá al fondo
la última vuelta
del mar.
Que el silencio y la madera
se lleven las piedras
y caminen los mares
sin hacer ningún ruido.
Epílogo
Y vive Dios
Solitario
en las partes
donde no
vive
el hombre
1.
Y en torno a esto
Nada ha brotado.
"The English Army
Had just won the war"
Lennon & Mac Cartney
Este artículo de mi autoría --que está siendo reproducido en diversos blogs-- ha salido publicado en http://luzdelimbo.blogspot.com/
y también en http://sol-negro.blogspot.com/
http://generacion-cochebomba.blogspot.com/
Nota: tengo problemas técnicos para responder los comentarios. En las próximas horas debo estar solucionando este impase. Disculpen mi ausencia forzada...