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La misma de ayer
Ha vuelto sin perder la magia |
la ambigua antigua sensación
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tan vieja que cambió de pieles
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para dar sorpresa en su aparición,
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su rostro, no muestra ternura
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no es el sosiego que solía ser
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el tiempo hizo su trabajo
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¿o el recuerdo grato no quiere ceder?.
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Dañada, se ve su silueta
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como una figura que se expone al sol
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desgaste, el que a simple vista
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es causa de juicio sin ser corazón,
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pues este percibe la muda
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mas nunca es jurado si hablamos de amor
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sabido es que esconde sus ojos
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como el ciego loco, que una vez amó.
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Y vuelve sin perder la magia
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el borroso rostro o la sensación
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la misma, que late en esencia
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pero troca imagen como camaleón.
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RICKY ROSE
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El Mentirón
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En invierno las temperaturas se desplomaban. Los parroquianos, con gorros
de lana, botas y bufandas en lugar de txapelas y alpargatas, buscaban el
cal...
Hace 1 semana
