¿BODA EN SEPTIEMBRE?

sábado, 29 de julio de 2006

Que dice que se casa…cuando me lo dijeron, mi cara debió ser un poema. Cuando ella misma me lo verificó, mi cara debió ser algo así como las rimas completas de Bécquer…

A ver, ella tiene 27 añitos ya, casi 28…y en edad casadera está, no lo vamos a negar (y más teniendo en cuenta la pila de años que lleva la nena martirizando nuestros oídos con eso de casarse…). Él…si os digo la verdad no tengo ni idea de cuántos años tiene, pero debe rondar los treinta y pocos. “Bueno” pensareis “pues no es tan raro…¿a qué venía la cara de rimas completas de Bécquer?” Pues no, la verdad es que hasta aquí no es tan raro…

Lo raro viene ahora, y es que, si hacemos un cálculo del total de los días que se han visto desde que se conocieron hace más o menos un año, nos salen unos dos meses día arriba, día abajo. Y además, si tenemos en cuenta que sus respectivos lugares de residencia distan entre si de una distancia de…mmm…más o menos…mmm…no sé cuánto será exactamente, pero vamos, que de España a Perú, además de todo el Atlántico, tiene que haber una sarta de kilómetros que pa qué!

Si, los que estéis pensando que se conocieron por Internet, habéis dado en el clavo. Cuando llevaban unos meses hablando (cuatro o cinco, creo recordar), el muchacho agarró la maleta y vino a verla. Fue en esa ocasión cuando le conocimos las demás. Sólo hablamos con él una vez (el resto del tiempo que estuvo por aquí se lo pasaron viajando por el país), y la conversación que mantuvimos con él cada una de nosotras fue más o menos esta:

- Hola! ¿Qué tal?

Muack, muack.

- Encantada.

Cuando el chico volvió para las américas, ella se quedó con una sensación que podríamos ubicar entre la añoranza y la alegría. Le echaba de menos, pero después de conocerle en persona, según ella, ya si estaba segura de que le quería…

Hace un mes, fue ella quien se subió a un avión con la única compañía de su maleta para hacerle una vistilla. Y qué os voy a contar…que vino encantada y, también según ella, más enamorada aún.

Ha tardado bastante en confesar lo de la boda, no se atrevía, “me ibais a llamar loca” dice que pensaba…no se equivocaba. Los términos loca y locura volaron aquella tarde y las siguientes a su alrededor sin que nada de lo que dijera pudiera acallarlos.

Al final, de tanto repetirla que se lo pensara, que el matrimonio no se puede tomar tan a la ligera, que arriesgándose tanto las probabilidades de ganar o perder son de un 50%/50%, y eso es muy poco…al final ha decidido pedir una excedencia en su trabajo e irse a vivir con él seis meses. “Si va bien, me caso en septiembre”.

Sin embargo, a pesar de parecer tan segura de si misma, estos últimos días se la ve distante, sus comentarios ya no son tan categóricos y cuando habla de él, ya no repite como una ametralladora que le quiere…y no es que no lo repita, es que ni siquiera lo dice. Y a pesar de ello, sigue convencida (o eso parece) con lo de los seis meses de convivencia y con lo de la boda en septiembre.

Y hasta aquí puedo contar, porque hasta aquí tengo permiso…Podéis darla vuestras opiniones y consejos, leerá vuestros comentarios.

Y en cuanto a mi, sólo me queda decirte que no avances hasta que no estés segura del todo de querer hacerlo, y que si en septiembre del año que viene vamos de boda, espero que esa boda sea el principio de una historia de amor digna de contar a los nietos. ¡Te deseo toda la suerte del mundo!

SIETE SECRETOS COFESABLES...

sábado, 22 de julio de 2006

Paper nos reta en su blog a contar 7 secretos nuestros…y yo, que me dejo engañar fácilmente, después de pensarlo…¿cuánto?¿dos minutos? Pues me he decidido a aceptar el reto…Así que, ahí van los 7, por el estricto orden de absurdez que mi cabecita les ha dado:

1.- La película que me más me ha marcado a lo largo de mi vida…y sé que esto resulta muy triste…es Grease! Si, si…la de los engominados de chupa de cuero, la de las cancioncillas pedantes y cursis, la de la pijilla y el super chulito…Supongo que es porque la vi por primera vez en esa época de “Oooh, que bonito es el amor que rompe todas las barreras…yo quiero que me pase eso cuando llegue al instituto!”. Lo que ignoro totalmente es la razón que me lleva a terminar tragándomela las tropecientas mil veces que la ponen en televisión. Si me la encuentro haciendo zapping, empiezo a criticarla con miles de argumentos en su contra…pero ¡coño! Siempre termino como hipnotizada delante de la pantalla, acordándome de aquella niña de 8 ó 10 años que se emocionó al ver ese “apoteósico final” (léase con ironía) del coche volador…En fin…¿y yo voy a hacer mi tesis sobre cine? Ayyy…¡Que Dios me pille confesada!

2.- Mi juego favorito de pequeña era inventarme mil historias de amor (tipo Grease…ejem) y recrearlas con las Barbies. Tenía, además de 7 u 8 de las famosas muñecas (y otros tantos Kenes, el famoso amor de la Barbie), la mansión y sus accesorios, el coche, la caravana, el remolque, miles y miles de vestidos…vamos, que a cualquier coleccionista de Barbies se le hubiera hecho la boquita agua al entrar en mi habitación…Hasta ahí, todo bien... Lo raro viene después, cuando tras dejar de jugar con ellas más o menos con 12 añitos, guardarlas en una caja y hacer desparecer de mi habitación la ciudad Barbie…estuve, por increíble que parezca, sacándolas cada cambio de estación para cambiarlas de ropa, hasta nada menos que los 16 años…No me preguntéis por qué, pero, ey! Si las dejaba con abrigo en verano, se me iban a asfixiar las pobres, no? En mi favor diré, que hace años que ya no sé ni por donde anda la famosa caja…¿Estarán pasando mucho calor este verano?

3.- Tengo la absurda manía (valeee…ya sé que todo lo que estoy contando es absurdo, pero no se me ocurre un sinónimo en este momento…) de alinear perfectamente mis zapatos, cuidando que queden hipermegasuperparalelos entre ellos…Eso de tirar cada uno a un lado de la habitación antes de meterme en la cama no va conmigo…si lo intentara seguro que a los cinco minutos me tendría que levantar a colocarlos porque no podría dormir…que se lo pregunten a mi niño, que coloco hasta los suyos! Jaja!

4.- Soy totalmente incapaz de deshacerme de un libro…Por muy malo o estúpido que sea jamás podré reunir la fuerza suficiente para tirarlo. Son como pequeños tesoros para mí, aunque no me gustaran nada al leerlos. Hace más o menos dos años perdí la pista de uno que presté (si, joer! Que dejarlos los dejo, jeje!) y que fue pasando de mano en mano hasta que su rastro se hizo totalmente invisible…y aún sigo en mi empeño de encontrarlo, sé que algún día volverá a mis estanterías, lo sé…

5.- Es dificilísimo conseguir hacerme gritar…¡No penséis mal! Que me refiero a durante un enfado o discusión. Si ya de por si hacer que me enfade en serio es difícil (los enfados me duran un par de días como mucho…a no ser que el o los demás implicados se reiteren en su afán por seguir tocándome los…piiii), hacer que levante la voz es casi imposible…la única persona que ostenta el honor de haberlo conseguido una vez es mi querido hermanito…y hace muchos, muuuuuchos años de eso. Y espero que esto nadie se lo tome como un reto! Jeje! Odio tener que enfadarme, no me gusta nada lo que se siente…

6.- Mi habitación parece una tienda de peluches…hay de todos los tipos, tamaños y colores que os podáis imaginar…Y no los quito del medio, porque me da penita (si…es pena y no pereza!). Todos son regalos y me da no sé qué esconder o tirar un regalo…Mmm, ahora que lo pienso, entre esto y lo de los libros, puede que tenga un principio del Síndrome de Diógenes! Aaaaahhh…En fin, algún día tendré que meterlos en una caja y llevarlos allí donde esté la de las Barbies…algún día…

7.- ¡Por fin! Pues nada, que en este último secreto vosotros sois los protagonistas. Y es que, coincido con Paper en este…me hace muchísima ilusión cada vez que me encuentro con un comentario nuevo el blog…al leerlos se me pone una sonrisilla tonta. En fin, ¿qué puedo decir? Que me encanta que me leáis, tanto como me apasiona leeros!

Y después de esta sarta de (si, lo voy a volver a decir, sigo sin encontrar sinónimos…) absurdeces, espero que me perdonéis por haberos hecho leerla…¡Ha sido culpa de Paper!Jeje! Besitos a tod@s!

IMÁN NO APTO PARA GUARDERÍAS

sábado, 15 de julio de 2006

Yo no sé qué tipo de imán tengo oculto en alguna parte de mi cuerpo que hace que todos los niños/as menores de 5 ó 6 añitos, en cuanto me ven, decidan que lo mejor es quedarse a mi vera por siempre jamás…hasta que los arrancan de mi lado, muchas veces entre lágrimas…y, oye! Sensible que es una, encima lo paso mal yo también…

El otro día por la tarde, acompañé a Laurita a la guardería donde trabaja porque se había olvidado allí no se qué…Y os preguntareis “¿Y tú para qué te metes en una guardería sabiendo lo del imán???”… Pues si, era meterse en la boca del lobo así, sin más, de golpe, sin anestesia ni nada…pero teniendo en cuenta la hora que era (como las siete y media de la tarde) deduje que no quedarían muchos babies por allí. Y estaba en lo cierto. Sólo quedaban cinco…¡Sólo!

Quedaban, por una parte, dos bebés, de los chiquitines, chiquitines…de los de menos de un año…ahí tan tranquilillos en sus cunitas. Por otra parte, dos locos bajitos, de los revoltosos, revoltosos…de los que no paran quietos, vamos…Y por último, con el número cinco, tenemos a la linda niñita, que sólo llevaba dos días en la guardería y que cuando llegamos tenía un berrinche que pa qué contaros…Normal! Esa niña tan mona ella, con su vestidito y sus lacitos, sola, abandonada a su suerte, con la única compañía de dos machotes peleándose por un triciclo y dos bebés durmiendo a pierna suelta…Ainsss…¡Vaya drama que me he montado en un momento! ¡Os prometo que era una guardería y que nada tenía que ver un campo de concentración o algo por el estilo, eh!

A lo que iba…que fue asomarme a la puerta y a la nenita se le pasaron todos los males, se le iluminaron los ojillos y me dedicó una sonrisa que me ablandó todo lo ablandable…

Laurita se va a buscar lo que había olvidado y yo me quedó ahí, de frente a la niñita, mirándonos fijamente…¡Que ni un Western, oye! Yo pensando “No, Martha, no…ni se te ocurra cogerla”. Ella con su sonrisa elevando los brazos hacia mí. “No,no…que no nos vamos de aquí hasta las mil…”. Sigue sonriendo. Desvió la mirada. Los machotes se revuelcan por el suelo…se pegan, se tiran del pelo (si, se tiraban del pelo y eran chicos...eso seguro!), se lanzan uno encima del otro, ¿se ríen? Hombres…y mientras me distraigo con el espectáculo de lucha libre de estos dos pequeñines, noto algo en la pierna. Miro hacia abajo y ahí está la niñita, mirándome con cara de pena…"No, Martha, nooooo…"

Entonces apareció Laurita y fue ella quién la cogió. Pero la niñita seguía mirándome con carita de cordero degollado por encima de su hombro…y yo intentaba no mirarla a ella, pero era superior a mis fuerzas…Entre pucheros, volvió a alzar los brazos hacia a mi…y yo ya no pude más…Fue sólo hacer ademán de ir a cogerla y se lanzó sin paracaídas de los brazos de Laurita a los míos. Y la niña tan sonriente y feliz…y yo diciéndola cosas con esa voz de idiotas que ponemos cuando hablamos con los niños (¿por qué haremos eso? ¿Y lo de ponerles caras raras??? En fin…eso da para otro post…).

Pero el lió estaba montado ya…nos teníamos que ir y la niña que decía que se fuera su tía…y que de irnos, la primera que salía por la puerta, era ella. Y Laurita y la otra chica que había allí, intentando cogerla…y la niña abrazándose a mi cuello y lanzándolas unas patadas que ni el campeón mundial de Capoeira … y yo…yo regañándome a mi misma por no haberme hecho caso desde el principio…

Al final, claro está, no me llevé a la niña…aunque con ganas me quedé, porque me dio muchísima penita irme mientras la veía llorando a moco tendido, echándome los brazos, mientras la otra chica la sujetaba…Ainsss…que aquello parecía una escena del Making Off de Titanic…

Y Laurita, que ya está acostumbrada a estas cosas, riéndose…y yo, acordándome de la niñita cada dos minutos a lo largo de toda la tarde…

Así que, Laurita, guapa, para la próxima…¡Te espero fuera! ;)

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Aviso a navegantes: Un buen amigo mío ha creado un blog a raíz de una idea buenísima…aunque no original a nivel mundial, pero, que yo sepa, si a nivel nacional. Algun@s de vosotr@s ya lo conocéis, porque he visto comentarios vuestros por allí, pero para los que no le habéis hecho aún una visitilla, animaos! Y a ver si os da por poner vuestro granito de arena a su iniciativa! Jeje! Besitos a todos!

LA FACULTAD FANTASMA

sábado, 1 de julio de 2006

Esto es inhumano...clase hasta el 15 de julio. ¿Pero en qué mundo vivimos?¿Qué clase de tortura es esta??? Vale que ya lo sabía desde principio de curso, pero ahora que ha llegado el calorcito de verdad, es cuando me he dado cuenta de que yo no puedo con esto...y lo peor: ¡las clases son los fines de semana! Arggh!

Ayer por la tarde fue horrible. Cuando llegué a la universidad, parecía la facultad fantasma. No había ni un alma por los pasillos (si exceptuamos el alma del pobre vedel, que me miró con cara de pocos amigos...¡normal! Seguramente al verme pensó que si no hubiera gente tan masoca como yo, que decide por voluntad propia matricularse en algo que dura hasta mediados de verano, él estaría ya de vacaciones...).

Ya sentada en clase, con las luces apagadas mi mayor afán era no dormirme mientras con voz muy dulce (seguro que lo de la voz lo hace aposta...) mi profe explicaba la vida y milagros de los fotógrafos cuyas fotos veíamos en el proyector. Media hora después la historia de la fotografía se me antojó la mejor nana del mundo, y mis intentos por no dormirme se fueron por la taza del váter. Eso si, conseguí no cerrar los ojos, pero me dormí con ellos abiertos...y hasta sueños que tuve, oye! Y sólo me desperté cuando empecé a escuchar de fondo las risas de los niños que jugaban en el parque anexo a la facultad....¡Ey! Ya sé que todo el mundo está de vacaciones menos yo (hasta los de la selección han cogido vacaciones antes que yo...) pero ¡dismulad un poquillo, hombre!O al menos...esperad a que yo salga de clase para divertiros a voz en grito, no? Ainss...que poca solidaridad hay en el mundo.

Cuando salí de clase, a eso de las 10 de la noche, de camino a casa me corroía la envidia...toda esa gente disfrutando de un viernes noche de verano, y yo corriendo hacia el hogar, para cenar e irme prontito a la cama, porque hoy a las siete tocaba diana...

Y las siete han llegado volando, y casi tiro el móvil por la ventana cuando ha sonado la alarma esta mañana. He estado a punto de darme la vuelta y hacer como que ningún ruido había pertubado mis dulces sueños...para esta tarde comunicar a mi profe vía e-mail lo malvado que es mi móvil, que ha decidido no sonar para que yo no pudiera ir a clase...Pero responsable que es una, al final he terminado levantándome.

Iba medio zombi de camino a la universidad, e ¡ilusa de mi! que pensaba que me iba a encontrar con cuatro viejecitos con insomnio y como mucho con el camión de la basura rezagado, me he encontrado con muchísima más gente. Pero no, ellos no iban a clase...¡Ellos aún estaban de fiesta! Ahí si que he tenido que reunir toda mi fuerza de voluntad (que no sabía yo que tenía tanta...) para no tirar la carpeta y meterme en el after más cercano...

Ya en la facultad fantasma, habiendo evitado toda tentación de no ir a clase, el sueño ha hecho en mi muchísima más mella que ayer. Lo de hoy ha sido una prueba de resistencia física en toda regla. A media mañana, mi compi de la izquierda estaba ya por el décimo sueño (y si, él si ha cerrado los ojos...¡hasta se ha improvisado una almohada con la cortina!) y la de la derecha, para vencer a Morfeo ha decidido que lo mejor era ponerse a mandar mensajitos...Y yo...yo me he pasado la mañana inmersa en una guerra constante contra la caída de mis párpados.

La profesora, viendo el panorama que tenía en frente, ha decido que lo mejor era...tacháaannn ¡No! No era dejarnos ir antes, era hacernos sufrir un poquito más...Y a las 12 más o menos a empezado a decir al comienzo de cada frase cosas como: "Y por último", "Para ir acabando", "Una cosita más y nos vamos"...Y así hasta las dos de la tarde, prolongando la agonía a base de falsas esperanzas.

Y al fin de semana que viene, nueva visita turística a la facultad fantasma, cuna de siestas inalcanzables...¿Alguien se apunta?

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