La arcilla polimérica es una pasta que sirve para modelar. Es un material muy manejable y flexible que coge resistencia y se endurece al cocerla en un simple horno doméstico a una temperatura entre 100º-130º C.
Se usa principalmente para hacer elementos decorativos, esculpir figuras o en joyería y bisutería.
Esta pasta está formada principalmente por PVC (Policloruro de Vinilo), y además lleva otra serie de componentes como pigmentos para el color, tintes, y un aceite plastificante que es lo que hace posible manejar la pasta a temperatura ambiente y que quede más fuerte al cocerla. La combinación de estos ingredientes es lo que diferencia a una marca de otra.
No es un material tóxico pero no es comestible, detalle que hay que tener en cuenta a la hora de dejar que los más pequeños jueguen con ella.
Esta pasta puede ser cortada, doblada, triturada, perforada, texturizada, esculpida, mezclada con diferentes elementos como pinturas, pigmentos, materiales naturales y una vez cocida se puede lijar, pintar, barnizar, pulir, marcar, agujerear.
Dada esta diversidad de formas de uso, puede imitar diferentes tipos de materiales y superficies, como el hueso, la madera, piedra, minerales, etc.