Autor: Laura Gallego
Páginas: 447
Editorial: SM
Precio: 14,21
Encuadernación: Rústica
Viana, la única hija del duque de Rocagrís, está prometida al joven Robian de Castelmar desde que ambos eran niños. Los dos se aman y se casarán en primavera. Sin embargo, durante los festejos del solsticio de invierno, un arisco montaraz advierte al rey de Nortia y sus caballeros de la amenaza de los bárbaros de las estepas... y tanto Robian como el duque se ven obligados a marchar a la guerra. En tales circunstancias, una doncella como Viana no puede hacer otra cosa que esperar su regreso... y, tal vez, prestar atención a las leyendas que se cuentan sobre el Gran Bosque... el lugar donde los árboles cantan.
Viana es la típica doncella dulce, bella y enamorada. Robian es el apuesto príncipe romántico que es el prometido de Viana. La vida de Viana cambia por completo cuando les avisan que los bárbaros se acercan hacia Rocagrís. Lo que significa que Robian tendrá que irse a la guerra y a partir de ese momento Viana dejara de ser una princesa y se convertirá en una chica con fuerza, aprenderá a luchar y a defenderse de los demás y serefugiará dentro del Gran Bosque, el lugar donde los árboles cantan y allí, conocerá a una persona muy especial, Uri.
Quise leerlo porque las críticas eran muy buenas y Laura Galego, que es una escritora que me encanta, había ganado un premio con él. No me decepcionó. Hay demasiados hechos y situaciones que no te las esperas pero que quieres que aparezcan. Te mantiene enganchado a la trama del libro porque es muy interesante. Hay personajes distintos con mucho cáracter y personalidad. Me emocionó el personaje de Uri y me decepcionó el personaje de Robian, porque al principio de la novela es encantador, pero a lo largo de la historia te vas dando cuenta de que es un cobarde. Me sorpendió Viana, la protagonista, ya que cambia mucho a lo largo de la historia.
Sin duda, recomiendo leerlo, está lleno de aventuras y de amor. Un ade las mejores novelas de Laura Gallego.
-Yo no puedo estar contigo para siempre-dijo Uri- no de esta manera. Pero prometo que te amaré...siempre...Siempre
Es una perfecta combinación de aventuras y amor.