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Superando sin pala el primer escalón. |
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La corriente lateral es muy fuerte y te lleva contra la pared. Mantener el equilibrio sin pala es del todo imposible.
(Luis nos demostró que no). |
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Afrontando el último salto. |
En la vida, pocas veces uno puede contemplar espectáculos como el que los 6 afortunados que fuimos al río Alberche, pudimos comtemplar.
El bello marco paisajístico en el que nos encontrábamos, quedo totalmente eclipsado por la gesta de uno de nuestros compañeros, la cual en nuestros anales alcanzará el rango de epopeya.
LUIS MACIAS, dos palabras que son más que un nombre y un apellido para el grupo de aguas bravas de Madrid. Dos palabras que distinguen a un héroe a la altura de los griegos: Akiles, Hércules, Ulises o incluso el mismísimo rey espartano Leonidas.
LUIS está hecho de otra pasta, su molde fue roto cuando nació, porque es irrepetible.
Ante todo, de él podemos decir que es gran amigo y mejor persona, pero como deportista consumado que es, las palabras que mejor le definen son: perseverancia, valentía, y pundonor.
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A por el último salto...y abajo rebufo. |
Nunca da la lucha por perdida, lo da todo, hasta su último aliento planta batalla a la adversidad.
Has sobrevivido a accidentes en ala delta, escalada, en kayak...
Y lejos de tomar el camino fácil que hubiera sido abandonarlo todo, te has levantado y te has enfrentado a ti mismo, superándote cada día.
Llegaste al kayak y a las aguas bravas, a una edad a la que muchos hace ya años que se han retirado, y eso no te ha impedido progresar pese a lo que te dijeran unos y otros. Demostrándonos a todos que querer es poder, y que los límites no los marca ni la edad ni la condición física sino la determinación de uno mismo.
LUIS no tengo palabras para describirte el aprecio y admiración que tus amigos sentimos hacia ti.
Tuviste un vuelco tonto (todos cometemos errores) , y tras perder la pala, no cejaste en tu empeño por salvar la situación, pese a que sabías que te encontrabas en el tramo más delicado del río, con tus manos desnudas, enfrentándote a piedras, ramas y la implacable fuerza del torrente de agua.
Lo fácil hubiera sido salir del kayak cuando aún tenías la orilla a tu alcance. Al menos es lo que hubiera hecho yo.
Pero así NO, así NO se comportan los HÉROES y tu sin duda lo eres.
Tomaste el toro por los cuernos y en una zona de corriente y agua aireada donde el apoyo y la capacidad de sustentación son mínimos, conseguiste esquimotar sin la pala. Afrontaste dos saltos, donde las corrientes laterales son muy fuertes y desvían los kayaks de su trayectoria.
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Todo está decidido. |
¡Y lo superaste con creces!
El último salto ya era imposible de salvar, porque solo eres un
HÉROE, de haberlo logrado hubieras entrado en el Olimpo de los
DIOSES.
Algo que la cámara no pudo captar es la gelidez del ambiente y el agua. Las manos nos dolían al más mínimo contacto con la misma, y no quiero imaginar que debiste sentir al tener tu cabeza bajo su superficie.
En esas condiciones uno queda aterido, e incapaz de articular movimiento o palabra alguna.
La respiración se te corta, y te ves incapaz de llevar aire a tus pulmones. Tu lo sufriste, pues nos lo comentaste, y aún con todo, te sobrepusiste.
Humildemente te doy gracias y te pido perdón por esas risas, que sabes que son fruto del nerviosismo del momento. (A unos les da por llorar y a mi por reir en situaciones así)
LUIS, tanto en el río, escalando como con los esquís de travesía eres todo un referente para mi y para tus compañeros nos transmites confianza, seguridad y saber estar.
NO hay palabras para elogiarte, compañero.
¡Mi respeto y admiración, AMIGO!
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Sumergiéndose en el rebufo. |