Aún sueño...
El sueño que yo soñé tiene alas de cóndor, mora en las cumbres que acarician las nubes en eterno silencio. Al cerrar los ojos el alma se abre, nace la fantasía, un manojo de ilusiones y el cóndor levanta vuelo abarcando la eternidad. El sueño que yo soñé viaja en mis pupilas por los anchos mares, en profundas simas, donde se oculta el amor que permanece puro, sin amargas amarguras ni dolores no llorados, sin mentiras ni falacias, oculto del mundo permanece el sueño que yo soñé... Que el amor existe! Que el amor es bello! Que amar es vivir! Ninfa Duarte