Piso para dos   I   Beth O'Leary   I   Libro autoconclusivo
Suma de Letras  I   Junio 2019   I   496 páginas
Goodreads   I   Extras

★★★★☆

“Tiffy Moore necesita un piso barato, y con urgencia. Leon Twomey trabaja de noche y anda escaso de dinero. Sus amigos piensan que están locos pero es la solución ideal: Leon usa la cama mientras Tiffy está en la oficina durante el día y ella dispone del apartamento el resto del tiempo. Y su modo de comunicarse mediante notas es divertido y parece funcionar de maravilla para resolver las vitales cuestiones de quién se ha acabado la mantequilla y si la tapa del váter debería estar subida o bajada.

Claro que si a eso se añaden exnovios obsesivos, clientes exigentes, hermanos encarcelados por error y, lo más importante, el hecho de que aún no se conocen, Tiffy y Leon están a punto de descubrir que lograr la convivencia perfecta no es fácil. Y que convertirse en amigos puede ser solo el principio...”

¿Sabéis de esos libros mágicos que llegan a ti de casualidad y endulzan tu día, tu semana y tu año? ¿esos libros plagados de fantasía, aventura o romance que, aun teniendo sus tópicos, están tan bellamente escritos que es innegable su magia y se quedan en tu corazón durante mucho tiempo? Si habéis respondido que sí, ya sabéis de lo que os vengo a hablar: de una novela romántica maravillosa, tierna y necesaria en vuestras estanterías. Y en vuestras vidas.

Cuando empecé Piso para dos, tenía unas expectativas respecto a la historia, pero tampoco quería hacerme ilusiones: la sinopsis me había llamado y tenía claro que iba a ser una novela distendida, con escenas graciosas y un romance un tanto previsible pero no por ello aburrido. Pero encontré mucho más, mucho más.

Para empezar, tanto Tiffy como Leon me parecieron unos personajes muy divertidos y cercanos, bien definidos en cuanto a sus caracteres y manías, con una soltura especial a la hora de contar el relato. O'Leary ofrece los dos puntos de vista de los protagonistas, todo en primera persona, y vamos hilando la trama mediante sus voces, humor y muchos, muchos pósits. Y es que ambos personajes no llegan a conocerse físicamente hasta bien entrada la historia, por lo que se van conociendo mediante notas y platos guardados en la nevera. Esta manera tan peculiar y original de conocerse hace que nos sintamos cómplices de la trama, que seamos un compañero de piso más, de esta amistad que se va cociendo a fuego lento, y vayamos leyendo con ganas para saber del siguiente pósit o postre en la encimera. 

Por ende, la relación de los dos es totalmente encantadora y adictiva, donde poco a poco vemos que van haciéndose amigos y se cogen confianza, para después albergar otro tipo de sentimientos. En esta parte, claro, es donde encontramos la novela romántica con ciertas escenas manidas y previsibles, pero los protagonistas llegan a calarte tan hondo que lees estas partes con cariño y sientes que cada capítulo es especial.

Debo destacar también que Piso para dos ha sido una novela muy bonita que, además de mucho humor y escenas del día a día, nos advierte de las relaciones tóxicas y de la importancia de la confianza en nuestra pareja. Prueba de ello es que tanto Tiffy como Leon huyen de las mentiras y empiezan como buenos amigos: como debería empezar todos los romances sanos. Solo por eso, Piso para dos ya destaca entre el resto de las novelas románticas que he devorado este año. Y solo por eso, ya merece que le deis una oportunidad.

Si buscáis una comedia romántica a rebosar de amor y humor, con personajes entrañables, un dúo protagonista encantador, escenas conmovedoras y un final de los que te dejan la sonrisa puesta para siempre: Piso para dos es vuestra novela.