Pues si amigos, como es costumbre por estas fechas, las truchas y reos gallegos acuden a su cita anual con la reproducción. Han recorrido largas distancias desde los ríos más grandes y el mar, para llevar a cabo la perpetuación de la especie.
Hace unos días, estando de caza, mi hermano divisó unas truchas enormes en un pequeño curso fluvial y aprovechando la soleada tarde de Navidad, allá nos fuimos para ver si todavía estaban allí o por el contrario ya habían remontado algo más con las últimas lluvias.Los ejemplares de trucha y reo de ahora, no son como los de antaño, pues antes se llegaban a ver ejemplares de 4 ó 5 kilos, con relativa facilidad. Ahora su aparición es más anecdótica, pero los ejemplares de 1 ó 2 kilos, son abundantes.Este excremento es la evidencia de que la garza real anduvo por aquí. Esta ceniza zancuda acude en busca de alimento a las zonas inundadas por las crecidas, los prados y las pozas poco profundas. Precisamente hace un año os contaba esta historia: Truchas, reos y becadas.
Hasta el momento hemos visto un par de garzas reales y un cormorán, lo que indica que el lugar ofrece alimento suficiente a estas especies.Las tablas de grava más fina son los lugares escogidos por los salmónidos, para hacer sus nidos y llevar a cabo la tarea reproductiva. En este pequeño curso fluvial son bastante comunes, por lo que nos será fácil localizar alguna trucha o reo merodeando estos lugares, si bien la luz ambiental es un factor en nuestra contra. Debemos cambiar de orilla a menudo para evitar proyectar nuestra sombra sobre el lecho del río. Esto nos delataría, dando al traste con la maniobra de aproximación.
Aunque ya hemos visto varios ejemplares de entre 500 g y 2 Kg, tan solo los he podido filmar, ya que las turbulencias en la superficie del agua no me ofrecen buena perspectiva para obtener instantáneas de calidad.
Algún que otro reo ha huído como un rayo al percatarse de nuestra presencia, pero aún nos queda un buen trecho por recorrer.El cuerpo inerte de un cormorán pende de la rama de un aliso, seguramente abatido por un disparo. Estoy seguro que los cazadores que a su vez pescan, no ven con buenos ojos que estas aves se instalen en zonas tan distantes a la costa. Se trata de un tema bastante peliagudo, pero desconozco la legislación en cuanto a especies cinegéticas se refiere.Si mal no recuerdo, en algunas comunidades del interior, se permite su caza, aunque realmente se trate de una medida para controlar su población, ya que no goza de interés culinario.Un escuálido cadáver de garza yace en el suelo delante nuestra. El frío lo conserva bastante intacto, ya que no permite la descomposición.
Seguramente su muerte se produjo por la misma causa que la del cormorán, ya que no le falta parte alguna, que implique a algún depredador.Este es el único salmónido que he podido fotografiar de una manera aceptable y aún así ha sido de manera parcial. Por suerte, el vídeo os revelará que la jornada fue bastante fructífera en cuanto a imágenes se refiere.
Hemos visto como una pareja de salmónidos ejecutaban la ceremonia de la puesta. El macho golpeando a la hembra, etc.
Siento que el vídeo pierda calidad al subirlo.
Música: Patrick Cassidy and Hans Zimmer - Vide Cor Meum
Desde este espacio os deseo Feliz Navidad y un 2011 cargado de buenos momentos.
Hasta el momento hemos visto un par de garzas reales y un cormorán, lo que indica que el lugar ofrece alimento suficiente a estas especies.Las tablas de grava más fina son los lugares escogidos por los salmónidos, para hacer sus nidos y llevar a cabo la tarea reproductiva. En este pequeño curso fluvial son bastante comunes, por lo que nos será fácil localizar alguna trucha o reo merodeando estos lugares, si bien la luz ambiental es un factor en nuestra contra. Debemos cambiar de orilla a menudo para evitar proyectar nuestra sombra sobre el lecho del río. Esto nos delataría, dando al traste con la maniobra de aproximación.
Aunque ya hemos visto varios ejemplares de entre 500 g y 2 Kg, tan solo los he podido filmar, ya que las turbulencias en la superficie del agua no me ofrecen buena perspectiva para obtener instantáneas de calidad.
Algún que otro reo ha huído como un rayo al percatarse de nuestra presencia, pero aún nos queda un buen trecho por recorrer.El cuerpo inerte de un cormorán pende de la rama de un aliso, seguramente abatido por un disparo. Estoy seguro que los cazadores que a su vez pescan, no ven con buenos ojos que estas aves se instalen en zonas tan distantes a la costa. Se trata de un tema bastante peliagudo, pero desconozco la legislación en cuanto a especies cinegéticas se refiere.Si mal no recuerdo, en algunas comunidades del interior, se permite su caza, aunque realmente se trate de una medida para controlar su población, ya que no goza de interés culinario.Un escuálido cadáver de garza yace en el suelo delante nuestra. El frío lo conserva bastante intacto, ya que no permite la descomposición.
Seguramente su muerte se produjo por la misma causa que la del cormorán, ya que no le falta parte alguna, que implique a algún depredador.Este es el único salmónido que he podido fotografiar de una manera aceptable y aún así ha sido de manera parcial. Por suerte, el vídeo os revelará que la jornada fue bastante fructífera en cuanto a imágenes se refiere.
Hemos visto como una pareja de salmónidos ejecutaban la ceremonia de la puesta. El macho golpeando a la hembra, etc.
Siento que el vídeo pierda calidad al subirlo.
Música: Patrick Cassidy and Hans Zimmer - Vide Cor Meum
Desde este espacio os deseo Feliz Navidad y un 2011 cargado de buenos momentos.