Fecha:29-06-2013
Participantes: Xon, Silvia, Toño y Fernando
Tiempo: 4 horas, 15 minutos
Distancia:16,7 km
Dificultad: Baja
Recorrido: Peñíscola (desvío del camino del Pebret)-Torre Badum-Playa del Pebret-Cala Argilaga-Faro y Cala Mundina-Alcocebre
Recomendaciones: llevar calzado
de montaña y agua. El GPS puede resultar útil si se quiere seguir
la misma ruta, pero no hay ningún problema de pérdida.
Comenzamos la ruta en el
cruce de la carretera de asfalto que se adentra por la sierra, con el
inicio de la pista de tierra que va hacia la Torre Badum y la Playa
del Pebret. Una vez llegamos a la Torre Badum, podemos ver un paisaje
espectacular con la población de Peñíscola hacia el Norte.
Se trata de un Torreón
de piedra, de esos que en otra época cumplían funciones de vigilancia,
era muy frecuente indicar el peligro encendiendo hogueras si era por
la noche. Estos torreones, estaban por la costa principalmente, y
siempre se divisaban los más cercanos. En la fachada hay un escudo
labrado en piedra.
Descendiendo hacia la
costa, a no mucha distancia nos encontramos con la Playa del Russo,
lugar tranquilo e idílico que invita a tomar el baño, al igual que
la continua Playa del Pebret, donde podemos también ver una pequeña
construcción que en otras épocas sirvió como punto de control y
vigilancia en la zona.
En pocos metros, podemos
seguir una senda entarimada, que también va acompañada de las
señales características del Parque Natural.
A pesar de los incendios
sufridos en el pasado, la naturaleza se recupera al mismo tiempo que
vuelve a apoderarse de las antiguas tierras de cultivo que le
pertenecen. La especie predominante el el pino carrasco o Pinus
alepensis, que va acompañado de toda la variedad y riqueza de
especies características del mediterráneo, coscoja, romero,
lentisco, olivilla, palmito,madreselva, brezo, zarzaparrilla,..., así
como también olivos, almendros y algarrobos que se han ido
asilvestrando con el abandono.
Siguiendo la senda, en un
tramo decidimos tomar una pista de tierrra, para luego abandonarla y
volver cerca del agua. En varios tramos nos encontramos con marcas de
los senderos PR y GR.
Es impresionante la
cantidad de calas de gran belleza que nos podemos encontrar, con
aguas transparentes que nos incitan a un chapuzón refrescante.
Destaca la Cala de la
Argilaga por su aspecto de playa virgen, que todavía no ha sido
atacada por los monstruos de hormigón.
Siguiendo la ruta, tras
varios kilómetros nos encontramos con la Cala Mundina, lugar donde
también está ubicado el moderno faro de Alcocebre.
A partir de aquí, la
ruta ya sigue por un paseo, que nos acercará hasta el nucleo urbano,
pasando por la playa de Les Fontetes.
No podemos olvidar la
presencia en este enclave de la gaviota de audouin.