Los amigos son flores plantadas a lo largo de nuestro camino para que sepamos encontrar primavera todo el año.
Y cuando el otoño llega lleno de belleza y melancolía, los amigos están presentes trayéndonos alegría; y cuando el invierno viene frío y oscuro, vienen trayendo añoranzas y noches largas.
Los amigos nos traen calor y luz con el brillo de su presencia.
Y esas flores bellas perfuman nuestra existencia y tomamos conciencia de que no estamos solos.
Sí, los amigos son flores que duran un año, un día… o toda la vida, lo importante son las marcas que dejan siempre en nosotros.
Las horas compartidas, horas de cariño, amor y cuidado.
Un amigo que se entrega sin querer saber si va a tener una respuesta, se entrega por el placer de ver la felicidad del otro... es una flor, que merece cuidados especiales.
Es alguien que consigue llegar hasta nuestra alma… es un presente de Dios.
(de Internet)
Y cuando el otoño llega lleno de belleza y melancolía, los amigos están presentes trayéndonos alegría; y cuando el invierno viene frío y oscuro, vienen trayendo añoranzas y noches largas.
Los amigos nos traen calor y luz con el brillo de su presencia.
Y esas flores bellas perfuman nuestra existencia y tomamos conciencia de que no estamos solos.
Sí, los amigos son flores que duran un año, un día… o toda la vida, lo importante son las marcas que dejan siempre en nosotros.
Las horas compartidas, horas de cariño, amor y cuidado.
Un amigo que se entrega sin querer saber si va a tener una respuesta, se entrega por el placer de ver la felicidad del otro... es una flor, que merece cuidados especiales.
Es alguien que consigue llegar hasta nuestra alma… es un presente de Dios.
(de Internet)