Ayer se celebró el día mundial de corazón,
un día para poder dar a conocer masivamente las enfermedades cardiovasculares,
su prevención, control y tratamiento. Se viene celebrando desde el año 2000.
Llego tarde, pero quería hablar hoy acerca del corazón, con la excusa del día
mundial pero no sólo de enfermedades, sino del corazón así en general.
Hace poco estuvimos en el cardiólogo con
Xoubiña para hacer un electro y comprobar que no tenía importancia un pequeño
soplo que le habían detectado. Esta visita me tenía francamente preocupada,
aunque pensaba que no era nada y que se trataba de simple rutina me preguntaba
¿Y si le descubren algo? ¿Y si tiene alguna malformación? ¿Y si ha heredado
algo congénito de mi abuela y bisabuela?
Estábamos solos en la sala de espera, casi
al final llegó un bebé que, aparentemente al menos, estaba sano. Pero las
paredes de la sala de espera estaban llenas de fotos de bebés que habían estado
muy enfermos, con cicatrices en el pecho de arriba abajo y una nota
agradeciendo a los doctores su curación, se me llenaban los ojos de lágrimas,
se les veía junto al árbol de navidad o jugando en la playa, un poco pálidos, con
los ojillos un poco morados todavía, jugaban o reían contentos y ajenos al
drama que habían vivido. Y yo pensaba: Pobres niños, pobres padres!
A mi marido le asustaba mucho pensar que
los niños podían tener una cardiopatía cuando estaba embarazada. Yo procuraba
no pensarlo porque ya se preocupaba él, pero uno nunca sabe lo que es eso hasta
que te ocurre, es difícil ponerse en la piel de una madre con un bebé al que le
pase algo en el corazón e imposible pensar que tengan que operar a tu bebé de
algo tan grave como eso.
Dicen que ser madre es aprender a vivir
con el corazón fuera de tu cuerpo, y es cierto. Me consuela pensar que cuando
el corazón de mi madre dejó de latir empezó a latir dentro de mí, aunque no sea
literalmente cierto. Y una de las cosas más bellas que puedo decir de mis hijos
es que tienen un gran corazón.
Ayer había un cartel en el cole de
Parrulín que avisaba de una campaña de recogida de alimentos para África. Lo
leí mientras esperaba que subiera a por la mochila y pensé en comprar unas
latas para contribuir con la campaña. Parrulín salió muy concienciado del cole
y quiso romper su hucha y gastarse todos sus ahorros en comida para los que más
lo necesitan. ¿Pero te lo vas a gastar todo? “Si mamá, ya volveré a ahorrar,
ahora es el momento de ayudar a los que menos tienen” Y pensé qué gran corazón,
qué bonito, qué orgullosa estoy de él!
Y pensé también ¿por qué dibujamos así un
corazón? y me puse a buscar información sobre ello. No hay consenso, unos dicen
que por unos motivos más místicos o artísticos y otros dicen que por otros más
mundanos, pero lo cierto es que en la Edad Media ya se dibujaba así en los
libros de anatomía.
Algunos sostienen que griegos y romanos
usaban el dibujo de una hoja de parra en forma de corazón como símbolo de amor
duradero entre hombre y mujer, y de ahí proviene el símbolo. Casualidad o no,
la hoja que tapaba a Eva también era de parra, qué curioso.
Otros dicen que es por los cisnes, qué
bonitos son los cisnes! Por cómo colocan sus cuellos cuando semejan estar
besándose. Romántica imagen tipo San Valentín de Imágenes y fotos.
Casi prefiero esta, no tiene forma de
corazón pero me resulta mucho más tierna y menos empalagosa. Imagen de Mejores mensajes.
¿Y digo yo que por qué no las libélulas? La postura de aparearse de las
libélulas parece formar un corazón. ¿A que es curioso? ¿Lo sabíais? Imagen de Mendixut.
Y la naturaleza, caprichosa ella, forma en ocasiones preciosos dibujos
de corazón, este incluso se llama el Río Corazón, imagen extraída de Los Corazones Mas Espectaculares del Planeta, preciosos todos.
Por último, para conmover el corazón y el alma entera, esta imagen de
gemelas prematuras con su mamá, qué valentía la suya, y la de la madre, lo he visto en la página de SomosMúltiples. Cómo se acurrucan las pequeñinas, cómo extiende su mano hacia la madre. Leer la historia completa merece la pena, es impresionante, pero termina bien, pincha aquí.
Mamá de Parrulín y Xoubiña.
Otro día más.
Sean buen@s y felices.