- Una base de hojaldre
- Un tetrabrick pequeño de nata
- Media cuña de queso roquefort
- Jamón de york en taquitos
- Un puñado de nueces picadas
- Un huevo
- Aceite
Preparación:
Precalentamos el horno a 150ºC. Extendemos la base de hojaldre sobre un molde engrasado o sobre el que colocaremos un papel de hornear. Pinchamos el hojaldre con un tenedor por varios sitios para evitar que se hinche demasiado al cocinarse y reservamos.
En una sartén con un poco de aceite rehogamos el jamón en taquitos hasta que tome un poco de color. Añadimos la nata y el roquefort desmenuzado. Vamos removiendo a fuego lento hasta que el queso se funda y se disuelva en la nata. Añadimos las nueces picadas y el huevo batido. Volvemos a remover todo para que reduzca un poco y se espese.
Vertemos el contenido de la sartén en el molde con el hojaldre y metemos al horno unos 15 - 20 minutos hasta que el hojaldre esté dorado y pinchemos el relleno con una aguja o similar y salga limpia.
Sacamos del horno y lo dejamos enfriar un poco para servirlo templado.
Espero que os guste.