Título: Breviario para políticos
Autor: Cardenal Mazarino
Páginas: 152
Editorial: Debolsillo
Precio: 7,95 euros
Año de Edición: 2007
Su título no engaña -puede
que sea uno de los pocos contenidos honestos del libro-, se trata de un breviario sobre lo que todo buen
político debe tener en cuenta para ejercer su oficio con éxito, un compendio de
máximas y consejos que pueden ser consideradas tanto como una reflexión cínica
y descarnada del arte de la política, como una serie de enseñanzas sobre cómo
aprovecharse para beneficio propio de las mezquindades y debilidades del alma
humana.
Con ello quiero indicar las dos aproximaciones, no excluyentes, con las
que acercarse a este texto: con una sonrisa maliciosa, pensando en la habilidad
de las artimañas que se plantean para la manipulación de quienes rodean al poderoso, o
con una expresión de tristeza habitual, reconociendo esas artes como las
habituales en los derroteros políticos actuales.
Para muestra un
botón:
«Ten
siempre presentes estos cinco preceptos:
1.
Simula
2. Disimula.
3. No te fíes de nadie
4. Di cosas buenas de todo el mundo
5. Prevé antes de actuar»
2. Disimula.
3. No te fíes de nadie
4. Di cosas buenas de todo el mundo
5. Prevé antes de actuar»
Esta edición depara,
además, una agradable sorpresa: un prefacio de Umberto Eco. No está
claro que el todopoderoso cardenal sea el autor, sólo se sabe que fue publicado
en vida suya y es innegable que intenta describir la conocida y retorcida habilidad
política del personaje. Eco aclara lo fundamental del libro y da un aviso para
navegantes: aprenderemos lo que los hombres de poder ya saben, pero seguramente
no nos podremos beneficiar de ello, ya que esas habilidades surgen del
instinto, no de las enseñanzas.
Lo dicho. De lectura
rápida, que no tiene porque ser secuencial, nos hará pasar un buen rato si
tenemos el día de cara o nos enemistará con nuestros dirigentes si hemos
amanecido alicaidos. No todo es pura maldad, hay reflexiones sensatas e incluso
bienintencionadas pero... no me puedo contener, tengo que citar otro párrafo:
«Induce a las
personas a que te cuenten su vida, sin ser conscientes de ello. La mejor manera
de lograrlo es hacer ver que cuentas la tuya. Te confiarán cómo han conseguido
engañar a los demás, cosa que te será muy útil para interpretar su conducta
actual. Ahora bien, de tu vida, naturalmente, procura no desvelar nada.»
Retrato del cardenal Mazarino pintado por Pierre Louis Bouchart
Al cardenal Mazarino, nacido Giulio Mazarino (1602-1661), se
le recuerda como primer ministro de Luis XIV bajo la regencia de Ana deAustria. Político y diplomático, fue un hábil negociador formado en las
Universidades Complutense y de Salamanca. En su haber está el poner fin a la Guerra de
los Treinta Años consiguiendo la hegemonía en Europa para Francia. Logró
una gran concentración de poder, lo que le granjeó no pocos enemigos. Superó
varios complots de asesinato de los nobles e incluso tuvo que exiliarse
durante un par de años, aunque consiguió mantener las riendas del poder gracias a un
grupo de leales y la colaboración de la reina.