Muchas veces relacionamos pizza con comida basura, pero no tiene por qué serlo si la preparamos en casa. Es verdad que lleva su trabajo prepararla, pero el resultado merece la pena, ya que queda mucha más ricas que las compradas y desde luego es mil veces más sana. Si además optamos por ponerle verduras en vez de carnes, y no abusamos del queso, tendremos una comida bien equilibrada y completa.
DIFICULTAD: media
TIEMPO: 20 minutos + 2 horas para que crezca la masa + 10 minutos de estirado
INGREDIENTES (para 1 pizza para 2-3 personas)
- 350 g de harina
- 1 sobrecito de levadura
- 225 ml de agua tibia
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharadita de sal
- 1 pizca de azúcar
- 1 trozo de papel de horno, aproximadamente del tamaño de la bandeja que vayamos a usar
PREPARACIÓN
En un cuenco grande ponemos la harina y la mezclamos con la levadura. Por otro lado disolvemos la sal y el azúcar en el agua. Ahora hacemos un huequito en el medio de la harina y
ahí ponemos el agua y el aceite. Mezclamos con las manos y
amasamos durante 15 minutos hasta obtener una bola homogénea y elástica. Dejamos la bola en
el cuenco, cubrimos con un trapo húmedo y dejamos reposar durante 2 horas en
un sitio cálido y sin corrientes.
Pasadas las 2 horas la bola habrá doblado su volumen. Ahora la amasamos
un poco y la colocamos encima del trozo de papel de horno, sobre el que
habremos esparcido un poco de harina. Aplastamos la bola y estiramos
primero con los dedos, intentando hacer una torta. Con ayuda del rodillo
terminamos de estirarla y aplanarla. Dejamos reposar unos 5 minutos antes de poner el resto de ingredientes encima, para que suba un poco y quede más esponjosa.
Los tiempos de horno dependerán un poco de los ingredientes que usemos y del propio horno, pero por lo general podremos poner la pizza unos 12 minutos a 220°C con calor por arriba y por abajo, y otros 5 minutos con ventilador y calor por abajo.
ALGUNAS PIZZAS