…Los glaciares
de caracola,
resucitaban
soles reñidos
de poniente.
Tundras dormidas
besando la mañana
y enarbolando
agujas del verdal,
cavaban rampas
enmarañadas de mares.
Apergaminados
murmullos abisales,
de peces preñados.
La olvidada diana,
marina del gallo
al amanecer.
Chorreando carabelas
de canastillas,
hechas costilla
con promesas
tuyas y mias.
Nieve ardiendo
tinieblas,
entre maizales naranja.
Centelleando
su cresta,
al explosionar
la cima.
Quietos sístoles
de erizo
recauchitando
la tarde
vomitada con azúcar.
Y cefalópodos
disfrazados, huyendo
en el yerbal
humeante.
Mojando jamón
del timón,
con tripas del viento.
La caries aborrascada,
de piratas
espantados
al abordaje.
Besos tiernos
bruñidos del tiburón,
con sabor a ropa seca.
Mi sinai del mar
claro de luna,
y sus ojos prestados
leyendo arrecifes
calientes de hielo.
La ilusionada ola,
del tártaro siroco
hecha cautiva por tí.
Hoy perla negra,
al resguardarse
encaracolado.
Balancín de uva
sin habitar,
huecos ecos
mudos del corazón.
La concha,
del silencio
al revés.
Atalayada oreja, contigo
y el deseo proa por morderte…
PINCELADA Nº4 THÉODORE GÉRICAULT
…El rio
llevaba
el limo
de mi serenidad,
aliviada
por las ocas
alborotadas.
Y como baño
de lana
seca, me secabas
con la toalla
del alma.
Lagrimas
con llamas,
y sin fuego
al oir
la tempestad…
VERSOS POEMA JOSE RAMON
PINTURA: THÉODORE GÉRICAULT