jueves, 30 de julio de 2009

ARTESANÍA DE LA TORTURA Vol 2

El proceso consta de tres fases:
Para la primera de ellas utilizamos un caballo montado por un elegante jinete y una pista de futbol sala con el suelo forrado de lija. Desnudamos a la víctima y la amarramos por sus muñecas a la parte trasera del caballo. Durante media hora, el animal trota dibujando círculos mientras arrastra a la víctima.
En la segunda fase, la víctima -cuyo cuerpo ahora se asemeja a una langosta sanguinolenta- es inmovilizada sobre una mesa de trabajo. Un tatuador torpe y despiadado confecciona un tatuaje que cubre por completo el cuerpo de la víctima. Hay mucho relleno, obviamente. El proceso toma unas nueve horas.
Para la tercera y última fase, colocamos a la víctima sobre una especie de torno giratorio que permite envolverla fácilmente con alambre de espino hasta que adquiera el aspecto de una especie de enorme carrete de hilo punzante. Como colofón, dos tipos con brazos como tractores tienden a la víctima moribunda sobre la mesa de trabajo y le propinan una interminable serie de martillazos con dos mazos de madera. Esta última operación podría considerarse como una cuarta fase. La víctima muere.

miércoles, 29 de julio de 2009

ARTESANÍA DE LA TORTURA Vol 1

La víctima se introduce a la fuerza en una esfera transparente de metacrilato que posee un diámetro de dos metros. En la parte superior observamos un boquete circular del tamaño de una hamburguesa que permite la entrada de aire. El horror de la incertidumbre en el rostro de la víctima. Dos tipos encajan la boca de una manguera en el boquete y alguien asiente con la cabeza. Es entonces cuando de la manguera brota un infinito enjambre de abejas que va rellenando la esfera de metacrilato a la vez que se ensaña con la víctima. En el interior de la esfera hay tantas abejas que apenas se pueden mover. Se pierde el contacto visual con la víctima.

viernes, 24 de julio de 2009

COMA

El señor Coma apaga sus puros en la palma de la mano de su hermosa asistenta. Se frota la calva con los diez dedos y ordena que liquiden al mediador. Estudia un padrastro insignificante mientras a su lado un hombre inocente recibe descargas eléctricas. Llora porque hay que sacrificar a uno de sus caballos. El señor Coma asesina a dos policías sin despegarse de su sillón de cuero. Descubre una diminuta mancha en sus pantalones Armani y exige a gritos una solución inmediata. Coma gestiona El Mal a través de un teléfono móvil. Cuando Coma chasquea los dedos, alguien es degollado en un sótano al otro lado del oceano. Y no queda más remedio que besar el suelo por donde Coma pisa.

miércoles, 22 de julio de 2009

REX OCTOPUS Y EL REINO ALPHA NAUTILUS

Las dos parejas de recién casados toman el sol en la cubierta del velero. Ellas miran al cielo en silencio mientras sus maridos, rubios y radiantes, conversan acerca de unas inversiones en bolsa que no acaban de cuajar. De pronto, un buzo emerge de las aguas y sube al barco no sin cierta dificultad. Lleva un par de bombonas de oxígeno amarradas a la espalda.
-¡Dios mío! ¡Tienen que ayudarme! ¡Rex Octopus ha secuestrado a Claudia!
Las mujeres se anudan la parte superior de sus bikinis. Los maridos rodean al buzo con rostros preocupados.
-Necesito que me ayuden. He de volver al Reino Alpha Nautilus antes de que...
El buzo se echa a llorar.
-Tranquilo. Cálmese y explíquenos lo que ha ocurrido.
Observen que el marido que ha tomado la palabra trata de usted al buzo. Es algo que resulta inquietante pero a la vez lógico en este contexto determinado. "Cálmese y explíquenos lo que ha ocurrido". Por algún motivo, el marido considera improcedente tratar de tú al buzo.

jueves, 16 de julio de 2009

SÉMOLA

Tienes un poder, un don. Cada vez que escribes la palabra SÉMOLA sobre un papel, consigues salvar la vida alguien. Puede ser un tipo de Colorado cuya camioneta está a punto de chocar frontalmente contra un camión. Puede ser una niña japonesa que, de no ser por ti, acabaría despedazada por un psicópata y arrojada a un contenedor. No sabes qué vida será salvada, pero sabes que alguien evitará una muerte violenta cada vez que escribes la palabra SÉMOLA con un bolígrafo. En mayúsculas y con acento.
No puedes salvarle la vida a todo el mundo. Aunque pasaras las 24 horas del día destrozándote la muñeca, no alcanzaría para borrar la Muerte de la faz de la tierra. Pero estás en una posición privilegiada para echarle un cable a tus semejantes. Está en tu mano que la niña japonesa regrese a casa sana y salva. Si lo deseas, puedes regalarle al tipo de Colorado el abrazo de los gemelos que le esperan en la puerta de un colegio.
Tienes un don y quizás te veas obligado a gestionarlo. O quizás no. Sólo tú conoces la existencia del superpoder. Olvídate de la humanidad y no dediques ni un solo segundo a convertirte en un héroe anónimo. Porque, ¿te vas a imponer un número determinado de horas diarias dedicadas a esa tarea como si se tratara de un trabajo no remunerado? ¿Fijarás un objetivo? ¿Mil SÉMOLAS al día? ¿Porqué no mil y una? Salvarías a un pobre joven finlandés que está apunto de resbalar sobre el hielo y abrirse el cráneo. Vamos, ¿qué cojones harías?