A las curiosas costumbres del piloto alemán Sebastian Vettel, entre las que se encuentran desobedecer las ordenes de equipo o el ganar mundiales en el ultimo suspiro aun contando con el mejor coche, debemos sumar una más.
Quizá sea conocida ya por todos, pero a mi me resulto interesante... Resulta que al germano le ha dado por bautizar con un nombre a sus bólidos.
Así, el RB9 de Red Bull con el que esta disputando la temporada, ha recibido el, cómo llamarlo, "ocurrente", nombre de Hungry Heidi (Hambrienta Heidi)
Sin entrar en valoraciones de si el nombre va con algún tipo de doble sentido o simplemente es que somos muy mal pensados, la explicación oficial es que es un nombre consensuado con su equipo de mecánicos tras una cena en Australia (si fue antes o después de los gin-tonic post-cena, eso no lo aclararon) Aseguran que el adjetivo "hambrienta" es reflejo del sentimiento del equipo RB, a pesar de los últimos tres Mundiales consecutivos logrados.
El caso es que no es la primera vez que lo hace, va camino de convertirse en tradición: Vettel ha bautizado todos y cada uno de sus monoplazas en Red Bull. En 2008 fue "Kate" la elegida, pero en 2009 le toco el turno a "La hermana sucia de Kate". Siguiendo esa linea de motes picantes, en 2010 eligió "Lujuriosa Lucy" y "Randy Mandy". No sabemos si en honor de la cantante australiana, pero en 2011 fue el año de «Kinky Kylie», y, finalmente, la triunfante montura de la pasada temporada recibió el mas insípido nombre de "Abbey".
Interesante costumbre, aunque realmente me pregunto que nombre elegiría para su monoplaza Mark Webber...