Por Jerry Seinfeld
Los hombres queremos hacer felices a las mujeres. Realmente queremos. Pero no sabemos cómo hacerlo. A veces lo hacemos y no sabemos cómo lo hicimos. No podemos preguntar cómo lo hicimos porque parecería como si no supiéramos lo que hacemos. Pero tampoco podemos quedarnos sin hacer nada. Si no hacemos nada ella nos recrimina: "No puedo creer lo que estás haciendo". A lo que nosotros respondemos: "Pero si no estoy haciendo nada". Ella empieza a llorar. Nosotros insistimos: "No hice nada". "Exacto", dice ella.