Tuesday, December 18, 2007

Marcela Robles presenta HighWay

Editora Mesa Redonda presenta:
HighWay
poemario de Marcela Robles.
La cita es en la librería Crisol del óvalo Gutiérrez
el miércoles 19 de diciembre a las 7:00 pm.
Los comentarios estarán a cargo
de los poetas Luis La Hoz y Diego Otero.



Pueden leer aquí la entrevista hecha a Marcela Robles por Francisco Melgar para el diario El Comercio el día domingo 16 de diciembre del 2007.

Sunday, December 02, 2007

Jorge Piqueras o el artista como escritor

En el suplemento cultural de El Comercio, El Dominical, aparece un artículo escrito por Guillermo Niño de Gúzman acerca de Crónica de un viaje desde en hacia hasta, de Jorge Piqueras.
A fines del año pasado apareció un libro que, desafortunadamente, se perdió entre la marea de publicaciones, quizá por su escasa envergadura (una edición apretada de formato reducido), quizá por la indiferencia de los comentaristas, quienes suelen mirar con desconfianza las incursiones de artistas plásticos en el espacio literario. Nos referimos a Crónica de un viaje desde en hacia hasta (Editora Mesa Redonda, Lima, 2006) de Jorge Piqueras, un texto que escapa a las clasificaciones habituales, proteico y perturbador, cuya fuerza expresiva trasciende el ámbito de la simple curiosidad.
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Conversiones culturales en el Perú - Juan Carlos Vela

La casa editorial Mesa Redonda inicia su serie de Ensayo con el libro de Juan Carlos Vela, Conversiones culturales en el Perú.




El Perú, durante las últimas décadas, ha vivido grandes y profundas transformaciones sociales, políticas, económicas y culturales. El tránsito de una sociedad rural a otra urbana, las distintas oleadas de migración interna que fueron parte de ese proceso, los intentos modernizados desde el Estado y desde el mercado, la guerra interna y la emergencia de nuevos grupos sociales, son algunos de los procesos que se sucedieron en ese tiempo de gran conflictividad y fuerte incertidumbre.
Las ciencias sociales buscaron dar cuenta de las transformaciones resultantes, recurriendo a las estructuras y a los actores para su explicación. Se mantiene pendiente la necesidad de ir más allá de las transformaciones sociales, de preguntarse por los elementos y los procesos subyacentes a los distintos cambios que se sucedieron en el país. Conversiones culturales en el Perú asume el desafío y busca comprender el procesamiento de tales cambios, recurriendo a la deconstrucción derrideana, proponiéndole al lector un enfoque socio cultural abierto acerca de la denominada cultura popular y sus meditaciones.
La conversión cultural, entendida como el proceso que toma una forma o adopta un contenido que lo caracteriza y distingue de su estado anterior, es la herramienta fundamental del autor para dar cuenta de una dinámica de metamorfosis o mudanza desde la subjetividad, ofreciéndonos una lectura audaz e innovadora de la nueva "antropologización de la cultura" en nuestro país, en sus modos de sentir, pensar y vivir.


Eduardo Ballón

Sunday, November 18, 2007

Por favor, no empujen en Letras S5

Una reseña del libro de cuentos de Fernando González Nohra, Por favor, no empujen, escrita por Miguel Ildefonso en la página Letras S5.

«Los cuentos de Fernando González Nohra buscan sorprendernos, y lo logra en base a una naturalidad, no exenta de ironía, para deslizarnos por un mundo lleno de analogías, con un lenguaje a veces sutil, a veces intempestivamente hiriente, con los que toca nuestra vulnerable posición de lectores. Son historias de escritores, en que la realidad se cruza con lo literario, en que los roles actanciales de los personajes saltan a jugar en diferentes planos, desconcertándonos por veces, pero luego para demostrar que la realidad en que vivimos no es menos inocente que la realidad de la ficción. Y es lo que vemos en "Puta en ciernes". Con ambientes, climas, que nos recuerdan al más fino Julio Ramón Ribeyro, nos vemos inmersos en una ciudad implacable, nos dice: "En Lima abundan esas personas que fuman como si al día siguiente se fuera a acabar el mundo, pero que son absolutamente incapaces de comprar sus propios cigarros"».
Continúa en Letras S5.

Tuesday, November 06, 2007

Sara Morey y "El libro del rinoceronte" el jueves 8 en el restaurante Scena a las 7 p.m.

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Restaurante Scena y Editora Mesa Redonda presentan El libro del Rinoceronte, de Sara Morey

El libro del rinoceronte está compuesto por cuentos que recogen la cotidianeidad para, poco a poco, trastocarla con el devenir de la historia, dando paso a una serie de elementos fantásticos que se convierten en factores determinantes para el desenlace de cada una de las historias.

Sara Morey nos brinda en El libro del rinoceronte diez cuentos que han sido trabajados de manera minuciosa a fin de crear situaciones que nos sorprendan como lectores una vez que nos demos cuenta de la realidad paralela en la que nos ha logrado sumir.

La presentación se llevará a cabo el día 08 de noviembre de 2007 a las 7:00 p.m. en el restaurante Scena, Francisco de Paula Camino 280, Miraflores.

Sandra López Vallejos y la autora agradecen su gentil asistencia.

Informes al (511) 275 9081

Thursday, October 18, 2007

La soñada coherencia - Luis Hernández - Viernes 19 de octubre.


El día viernes 19 de octubre de 2007 se llevará a cabo la presentación del libro La soñada coherencia, de Luis Hernández, en la librería Crisol del óvalo Gutiérrez - San Isidro a las 7:30 de la noche.
Los comentarios estarán a cargo de Edgar O'Hara, compilador y prologador del libro, y del poeta Luis Fernando Chueca.
Esperamos contar con su gentil asistencia.

Presentación de la Serie Narrativa de Mesa Redonda

Con El libro del rinoceronte, de Sara Morey, y Por favor, no empujen, de Fernando González, Mesa Redonda inaugura su nueva serie de narrativa, con un formato diferente al que se había venido manejando años atrás.
La presentación de ambos libros se realizó el día sábado 13 de octubre en el local del Jazz Zone en miraflores y los comentarios referidos a las obras estuvieron a cargo de José Güich y Giomar Silva.

El libro del rinoceronte, de Sara Morey (Mesa Redonda, 2007).

Por favor, no empujen, de Fernando González Nohra (Mesa Redonda, 2007).

Foto: Giomar Silva, Fernando González, Sara Morey, José Güich y Juan Miguel Marthans B.

Monday, August 27, 2007

Luces, de Edurado Lores - Presentación el miércoles 29 de agosto en Dédalo.


La casa editorial Mesa Redonda tiene el agrado de invitarlo a la presentación del libro Luces de Eduardo Lores, la cual se llevará a cabo en Dédalo, arte y artesanía,el miércoles 29 de agosto a las 7:30 p.m. Saénz Peña 295, Barranco.
Los comentarios estarán a cargo de la escritora Marcela Robles y el reconocido escritor Alonso Cueto.
Esta obra es una recopilación de las crónicas elaboradas por el autor para su columna Doxa del diario El Comercio entre los años 1990 y 2000. Luces nos muestra, con una mirada crítica, la diversidad cultural peruana y los problemas que esta conlleva.

El autor y la casa editorial Mesa Redonda agradecen su asistencia.

Wednesday, August 22, 2007

Presentación: Las falsas actitudes del agua - Andrea Cabel. Jueves 23 de agosto. 7: 30 p.m.


Editora Mesa Redonda y librería Crisol tienen el agrado de invitarlo a la presentación del poemario Las falsas actitudes del agua, de Andrea Cabel, a realizarse el día jueves 23 de agosto a las 7:30 p.m. en la librería Crisol del óvalo Gutiérrez.

Los comentarios estarán a cargo de Alonso Rabí y José Carlos Yrigoyen.

Andrea Cabel, Editora Mesa Redonda y librería Crisol agradecen su gentil asistencia.

Monday, July 30, 2007

Decimosegunda Feria Internacional del Libro, Lima- 2007

La Decimosegunda Feria Internacional del Libro, Lima 2007, fue sede de las presentaciones que Editora Mesa Redonda hizo por ocasión de esta, logrando una muy buena acogida por parte del público. Las obras Las falsas actitudes del agua de Andrea Cabel, que en esta edición cuenta con poemas inéditos que afianzan la estructura de la obra, y Arte de Nariz, de Miguel Ángel Malpartida, ambas publicaciones pertenecientes a la serie de poesía Taquicardia; Camuflaje de Dante Oliva León, libro de cuentos que logró la atención del público con su peculiar tratamiento de los personajes; y finalmente Luces de Eduardo Lores, que nos vuelve a sumergir en su mirada crítica con este compendio de sus crónicas, hechas para el diario El Comercio.



Tuvimos el agrado de compartir con nuestros autores los nervios, las risas y los comentarios que se suscitaron durante sus presentaciones. Siendo la primera de todas ellas el lanzamiento de la serie de poesía Taquicardia que se inició con Las falsas actitudes del agua, de Andrea Cabel, y Arte de nariz, de Miguel Ángel Malpartida.





Las falsas actitudes del agua es una estructura de poemas que sorprende precisamente por la unidad de los temas en los que va hondando y que nos remiten a un mundo donde su voz, sus gritos, nos sumerge en su angustia, en su certeza, en su ser, en la vida como Raul Zurita comenta de esta obra: "Su desgarro es conmovedor precisamente porque ha sido capaz de encontrar e inventar las modalidades de su "explosión de gritos", de su angustia, de su certeza. Los nuevos grandes poetas latinoamericanos que han venido surgiendo en los últimos años en Perú, en Chile, en Nicaragua, en México, tienen ahora en Andrea Cabel a uno de sus nuevos estandartes."






Arte de nariz nos inagura en el gobierno de las imágenes que se van creando a partir de las palabras, exalta nuestros sentidos por medio de las evocaciones que el autor conjura, llenándonos de esta manera de la realidad, del juego con la muerte y del mundo. Por estas razones Marco Martos comenta:


"El mundo es condensación y contraste y la palabra del poeta sirve para cristalizar esos momentos intensos de realidad. Miguel Ángel Malpartida es un poeta que conoce el oficio y que es un orífice de la palabra."


Saliendonos de la serie de poesía Taquicardia, la Editora Mesa Redonda también contribuyó en la feria con la presentacion de Camuflaje, de Dante Oliva León.





Camuflaje nos lleva a traves de las diferentes concepciones de la vida y del mundo a través de sus personajes, ya que el autor mediante el uso de diferentes dialectos logra esta diferenciación gracias al lenguaje. Es también mediante este que logra capturar nuestra atención y nos hace viajar a través de tiempos y espacios que remiten a las culturas y cosmovisiones de cada uno de los seres, que en estos cuentos cobran vida. Esta obra conto con la presentación de los periodistas Giancarlo Stagnaro y Juan Carlos Méndez, quienes lograron desentrañar las verdades ocultas que la obra contiene.





Luces nos presenta en esta ocasion el compendio de todas las crónicas que Eduardo Lores publicó durante los años 1999 y 2000 en el diario El Comercio. En Luces logramos vislumbrar la mirada reflexiva y filosófica del autor que sustentanda en una experiencia profesional multiforme hace de él una de las personas que mejor conoce la problemática cultural de nuestro país, problemática que se vio multiplicada por la coyuntura de la época.





Foto 1: Marco Martos, Miguel Ángel Malpartida, Andrea Cabel, Arturo Corcuera y, en representación de Editora Mesa Redonda, Mauricio Lombardi.

Foto 2: El autor, Eduardo Lores, luego de la presentación de su obra Luces. Los comentarios estuvieron a cargo de Carla Colona y Augusto del Valle

Thursday, July 19, 2007

Editora Mesa Redonda en la 12ª FIL de Lima - 2007

Dentro del marco de la 12ª Feria Internacional del Libro de Lima, Editora Mesa Redonda presentara cuatro títulos que recién saldrán al mercado.

En primer lugar, se presenta la serie de poesía Taquicardia, el día martes 24 de julio a las 8:30 p.m. en la Sala César Vallejo. Esta serie se inicia con dos poemarios: la publicación de la segunda edición de Las falsas actitudes del agua, de Andrea Cabel, obra a la que se suma nuevos poemas, que buscan darle más fuerza al poemario que publicó en un primer momento; y Arte de nariz, de Miguel Ángel Malpartida. Esa noche los comentarios estarán a cargo de los poetas Arturo Corcuera y Marco Martos.

El viernes 27 de julio, en la Sala José María Arguedas, a las 4:00 p.m. se presentará el libro de cuentos Camuflaje, de Dante Oliva León. La presentación estará a cargo de los periodistas Giancarlo Stagnaro y Juan Carlos Méndez.


Además de los tres títulos antes mencionados, se llevará a cabo la presentación del libro Luces, de Eduardo Lores, en el que se recoge una selección de crónicas culturales que fueron publicadas en el diario El Comercio durante los años 1999 y 2000 en la columna "Doxa". Los comentarios estarán a cargo de Augusto del Valle y Carla Colona. Esta presentación será el día domingo 29 de julio a las 7:00 p.m.
Esperamos poder contar con su asistencia en cada una de las presentaciones.

Sunday, March 11, 2007

Con espuma en la boca - Miércoles 14 en Dédalo

Con espuma en la boca
Andrés Emmerich (Mesa Redonda - 2007)

"Marcos está encerrado en su habitación viendo pasar las horas, los días, los recuerdos. La soledad y la depresión hacen presa de él, sin ninguna intención de tomar prisioneros.
Con espuma en la boca es un diario enfermizo que nos lleva a los rincones más sórdidos de la mente, donde no se tiene piedad de nadie y donde nada es sagrado. El autor, en esta novela, ha convertido las actitudes más comunes y triviales en verdaderos ejemplos de patetismo humano.
Su prosa, sin adornos y fuera de todo convencionalismo, se convierte en algo adictivo."





El miércoles 14 de marzo, Editora Mesa Redonda presenta Con espuma en la boca, de Andrés Emmerich. El evento se llevará a cabo en Dédalo - Arte y artesanía (Sáenz Peña 295 - Barranco) a las 7: 30 p.m.
Agradecemos su asistencia.



Thursday, February 01, 2007

Hotel Lima en Letras S5

En la revista de literatura www.letras.s5.com aparece una reseña de Fernando Carrasco de la novela de Miguel Ildefonso, titulada El discurso marginal en Hotel Lima.
“Lo primero que llama la atención al coger la novela de Miguel Ildefonso (Lima, 1970) es lo particular de su edición. En la carátula nos seduce un cuadro de Enrique Polanco y en los interiores, las fotografías tomadas por Herman Schwarz al pintor Víctor Humareda, legendario residente del famoso Hotel Lima, ubicado en una zona marginal del distrito de La Victoria. En este sentido el título designa a un viejo hotel, el cual aparece como un elemento simbólico trascendente dentro de la historia. El hotel es símbolo de soledad, desarraigo, desorden, pobreza, clandestinidad, connotaciones contrarias a todo lo establecido por el sistema oficial”. (continúa en www.letras.s5.com)

Thursday, January 25, 2007

Hotel Lima en la 3ra Feria del Libro de Trujillo

La novela Hotel Lima, de Miguel Ildefonso, se presentará en la 3ra Feria del Libro de Trujillo el 02 de febrero al mediodía en el auditorio 1. Los comentarios estarán a cargo de Jorge Coaguila.

Sunday, December 17, 2006

EL 2007 COMIENZA CON UNA GRAN HISTORIA


Starbucks Coffee, Editora Mesa Redonda y Zeta Bookstore, convoca al público en general al concurso de cuentos “2007 palabras”. Los premios para el primer, segundo y tercer puesto son de US$ 1 000, US$ 500 y US$ 200, además de vales de compra en Zeta Bookstore y canastas con productos del Starbucks Coffee.

Es necesario comenzar el 2007 con una gran historia en la que todos seamos parte importante.
Es por esta razón que Editora Mesa Redonda, Starbucks Coffee y Zeta Bookstore, con el deseo de promover la creación literaria más allá de los niveles del mercado ha decidido organizar el concurso de cuento “2007 palabras”.
Este concurso pretende —con esta, su primera edición—, establecerse como un premio que logre convocar gran cantidad de participantes, es así que se ha determinado para el ganador el primer puesto la suma de US$ 1 000.00, US$ 500.00 para el segundo y, para el tercero, US$ 200.00, además de vales de compra en la cadena de librerías Zeta Bookstore y canastas con productos de Starbucks Coffee.
Siendo conscientes de la importancia de que este concurso quede establecido de aquí en adelante, y demostrar que el proceso de selección será riguroso y transparente, se cuenta con la participación de un Jurado Calificador conformado por escritores de generaciones diferentes, probos y, cada uno de ellos, con una trayectoria literaria relevante dentro de las letras nacionales. Antonio Gálvez Ronceros, Jorge Eslava y Miguel Ildefonso, son las tres personalidades que estarán a cargo de la selección de los cuentos que se adjudicaran cada uno de los premios.
La temática es libre y la extensión máxima de los cuentos entregados no deberá exceder las 2007 palabras. La fecha de entrega de materiales vence el 28 de febrero del 2007, haciéndose público el fallo final el día 30 de marzo del 2007, día en que se llevará a cabo la ceremonia de premiación.La entrega de los cuentos se podrá realizar en los locales de Zeta Bookstore y Starbucks Coffee a nivel nacional. Las bases del concurso estarán a disposición del público en general en las siguientes direcciones: http://www.starbucks.com.pe, http://www.zetabook.com y http://www.2007palabras.blogspot.com, además de poder recogerse material informativo en cada uno de los locales de las empresas patrocinadoras.

Friday, December 01, 2006

Ricardo González Vigil acerca de El mascarón de proa (José Güich)

En el diario El Comercio del día 30 de noviembre, Ricardo González Vigil publica un comentario acerca de El mascarón de proa, de José Güich Rodríguez (Mesa Redonda, 2006).

Año sabático (2000) mostró las dotes de José Güich Rodríguez (Lima, 1963) para la literatura fantástica. En mérito a ello lo incluimos en nuestra antología El cuento peruano 1990-2000 (publicada el 2001).

Ahora El mascarón de proa confirma su talento fuera de lo común, y brinda ocho narraciones más admirables que las de su primer libro, en tanto sus tramas son más desarrolladas (la mayoría ostenta complejidad de escenas y tiempos que sobrepasan la brevedad del cuento en la ruta de la novela corta) y con espejeos más originales, a la vez que su prosa ha ganado en riqueza verbal y recursos narrativos, con un acabado que justifica la apreciación de la contracarátula: "su sorprendente imaginación ha encontrado la vía de desarrollo en una laboriosa arquitectura literaria".

Esa "laboriosa arquitectura" hace suya la herencia de los grandes maestros de la narrativa fantástica, comenzando por Poe y el interés romántico por los sueños y los desdoblamientos hasta la lección medular de los argentinos Borges, Bioy Casares y Cortázar. A modo de ejemplo, en el caso de Poe, señalemos el relieve concedido al debate entre la lucidez y la cordura: "estoy seguro que debió existir una frontera, una línea divisoria entre la cordura y el desvarío, una marca invisible para la cual no fui preparado" (pp. 168.169). Empero, la reelaboración más frecuente es la que hace Güich de la predilección de Borges y Bioy Casares por un tiempo que se bifurca en historias paralelas (con diferencias mínimas, pero significativas): los notables "Paisaje con hombre que corre" y "El veterano", y los angustiantes "La bailarina de La Perla" y "Zelote".

Aunque el magisterio más observable sea el de Borges (patente en las frases sentenciosas, particularmente el final de los textos), felizmente la sensibilidad de Güich es menos cerebral y libresca, con lo cual el tono de sus páginas posee matices propios, más cerca en todo caso a la libido y/o el morbo tanático de Poe, Bioy Casares y Cortázar. Las muestras más radicales e intransferibles son "Los días verdes", "Onirolalia" y "El mascarón de proa".

Añadamos que, además de narrador de talento, Güich es un crítico literario relevante. Este año, junto con los poetas Luis Fernando Chueca y Carlos López Degregori, ha plasmado un estudio imprescindible: En la comarca oscura (Lima en la poesía peruana 1950-2000).

Ricardo Gonzáles Vigil

www.elcomercioperu.com.pe/EdicionImpresa/Html/2006-11-30/ImEcLuces0624314.html

Saturday, November 25, 2006

Durante la presentación de Hotel Lima

Con lleno total, el jueves 23 de noviembre, en Dédalo –arte y artesanía–, se llevó a cabo la presentación de la novela Hotel Lima, de Miguel Ildefonso, bajo el sello Mesa Redonda.
Los comentarios estuvieron a cargo del narrador José Güich Rodríguez y del crítico literario Javier Ágreda, quienes rescataron no solo la calidad de la última publicación de Ildefonso sino también su larga trayectoria, siendo considerado una de las voces más importantes de la poesía de la generación del 90.
Al evento se dieron cita amigos del escritor y de la casa editora así como público en general. Cabe destacar la presencia de escritores de la talla de Antonio Gálvez Ronceros (quien le cede unas palabras a Ildefonso en la contratapa del libro), Alonso Cueto, Fernando Ampuero, Guillermo Niño de Guzmán y la del poeta José Pancorvo.
El artista Enrique Polanco, quien con Eros y Tánatos le pone rostro a esta reciente publicación, desde temprano se hizo presente en este evento que también, al igual que la novela Hotel Lima, fue concebido como un homenaje a la obra y a la vida del gran pintor puneño Víctor Humareda.


Hotel Lima estará de venta en las principales librerías de Lima y provincias desde el martes 28 de noviembre del presente año.

Imágenes: 1.- Antonio Gálvez Ronceros y Miguel Ildefonso; 2.- El autor de Hotel Lima acompañado por una de las simpáticas asistentes al evento, Enrique Polanco, Fernando Ampuero y Guillermo Niño de Guzmán; 3.- Ildefonso, Sandra López, Alonso Cueto y Juan Miguel Marthans B.; 4.- Miguel Ildefonso y José Pancorvo.

(Fotografías: Dalia E.)

Thursday, November 16, 2006

Presentación de la novela Hotel Lima, de Miguel Ildefonso

Este 23 de noviembre a las 7:30 p.m. la Editora Mesa Redonda presentará en la galería Dédalo (Sáenz Peña 295 - Barranco) la novela Hotel Lima, de Miguel Ildefonso.



En la portada: Eros y Tánatos de Enrique Polanco.

Sunday, November 12, 2006

La chica más fea del mundo - Miguel Ildefonso

"La chica más fea del mundo" es un extracto de Hotel Lima, novela de Miguel Ildefonso que será publicada a fines de noviembre del presente año bajo el sello Mesa Redonda.


Me senté en una banca de la avenida Colmena —la avenida del cloro eterno, la llamaba un joven poeta al que conocí y que se mató arrojándose a un tren en Buenos Aires—. Estaba ebrio, sentado en esa banca, tranquilo, deleitándome con el suceder de las cosas entre los noctámbulos, insomnes como yo; quizás muy dentro de mí deseaba caer en ese devenir absurdo (siempre he tenido esa tendencia). Los minutos pasaban tranquilos hasta que una chica hizo su aparición. Primero sentí su presencia detrás de la banca, luego sus pasos en círculo, finalmente se situó frente a mí. Contra todo lo que se dice, yo no soy una persona demasiado huraña, por eso no me molestó que ella me tapase la visión sórdida de la avenida. Levanté la mirada y me sorprendió lo que vi. Era la muchacha más fea que había visto en mi vida. Sin decir nada, lo primero que hizo fue invitarme un cigarrillo. Lo recibí atraído por alguna extraña fuerza, estupefacto. Me lo puse delicadamente en la boca, sin quitarle la mirada a ese rostro verdaderamente grotesco. Luego ella sacó una caja de fósforo y lo encendió. Noté que tenía vellos largos en el dorso de la mano. Temerosa la muchacha, que tendría como unos veintidós años, se sentó a mi lado. Su pelo negro, grueso y sucio, se le caía por la cara. ¿De dónde habría salido esta criatura?, me preguntaba desde el fondo de mi borrachera. ¿Algún demonio, aún desconocido para mí, me la habrá mandado?, pensaba, tratando de buscar una explicación.

Dos gordos y secos labios se movían ante mi absorta mirada. Todo había estado normal aquella noche; aunque aún no veía a las patrullas rondar a las prostitutas ni escuchaba ninguna de aquellas misteriosas explosiones que hacían remecer los edificios. Todo seguía dentro de lo normal para mí, hasta que la muchacha me invitó a su cuarto. Allí tengo un buen trago para ti, me dijo con voz sensual, algo ronquita y susurrante. Entonces caminamos rumbo a la parte más oscura del centro de la ciudad. Era una vieja casona a punto de desplomarse. Efectivamente, en aquel cuarto, que desde afuera parecía pequeño, tenía una botella del mejor anisado. “Toma, ya sé que te gusta esta miel, ¿verdad?”, me dijo con esa inexplicable voz seductora. En las paredes tenía pegados muchos recortes de periódicos con las fotos de los poetas y escritores que había adorado en mi juventud: Baudelaire, Rimbaud, Joyce y muchos más, que se perdían por los rincones más oscuros de aquella habitación; una habitación, en realidad, y pese a su precariedad, acogedora. Tenía también un cuadro colgado justo donde llegaba la luz de la luna llena que entraba por la ventana: un retrato al óleo de Fernando Pessoa.

En un rincón de la habitación se encendió la luz de una lámpara a queroseno. La lámpara estaba sobre una mesa atiborrada de libros viejos y empolvados. Había más libros por el suelo, formando torres vetustas, como una Lima en miniatura. La cama no era más que un colchón tirado en la orilla de esa luz. Sin más miramientos, me senté en el filo del colchón para beber cómodamente. La muchacha, que se había estado desnudando en silencio mientras yo revisaba el lomo de un libro, se tendió a mi lado y, luego de unos sorbos más del pico de la botella, hicimos el amor.

Vi que quedaba la mitad del anisado en la botella. Mientras bebía empecé a odiar esa lámpara que hacía inevitable ver aquel cuerpo desnudo, lleno de granos, pelos y manchas con protuberancias. De pronto ella soltó algo realmente inesperado, que no supe si tomarlo a broma: “Quédate a vivir aquí”, me dijo, felizmente ya no recuerdo con qué voz expulsada de aquel inefable cuerpo. Puedes dedicarte únicamente a escribir, me decía susurrándome al oído, pasando suavemente las yemas de sus dedos sobre mi pecho. Me di cuenta de que lo que estaba haciendo con la mano izquierda era aquello que hacen las parejas que se aman: sí, cariñitos. Y ella recostada entre mi brazo y mi pecho. No, ella no estaba borracha. Yo sí. Aunque tal vez sí lo estaba, porque siguió hablando: “Yo me encargaré de que estés tranquilo. No te quejarás por nada. No te faltará nada”, seguía diciéndome la fea más fea del mundo, de la Vía Láctea y de todo el Universo.

Después de un breve silencio, el cual creí que había venido más bien por mi indiferencia, Rosa (así me dijo que se llamaba la desdichada) empezó a contarme de su organización. Una organización secreta de poetas que, entre sus actividades clandestinas, estaba la de hacer detonar bombas por diferentes sitios de la ciudad en horas de la madrugada. Efectivamente, aquellas misteriosas explosiones, ni más ni menos. Digo misteriosas porque se sabe que los que las hacían no dejaban lemas políticos pintados en las paredes ni arrojaban volantes sino, como todos conocemos, dejaban escrito en la vereda unos versos de origen desconocido. Con la mayor naturalidad y convicción me dio una serie confusa de argumentos y teorías en que se apoyaba la llamada No-Propuesta Poética de su organización. Me dijo que estaban llevando a cabo un plan infalible. Llena de emoción, decía que el movimiento (era el otro término que utilizó) había crecido en poco tiempo, que ya había empezado a cruzar las fronteras del país y que, al ritmo que iba, para el inicio del nuevo milenio ya tendría miles de integrantes, adherentes y aliados repartidos en todo el mundo. Por supuesto, no le creí nada.

Para mi desgracia, ya no quedaba ni una gota de licor en la botella. Después de recalcarme que lo que ella me pedía no era pertenecer a su grupo ni que era necesario adherirme a la NPP, o sea a la No-Propuesta Poética, sino que tan sólo me quedara a vivir en su cuarto, Rosa se quedó dormida con la boca abierta, panza arriba, roncando. ¿Me voy?, pensé en ese momento. Es mi oportunidad de abandonar a la bestia. ¿Qué demonio infeliz me la habría puesto en el camino? Me vestí y salí tranquilamente. No sé si el chillido de la puerta la habría despertado. Era fea, pero no estaría tan loca como para creer que me quedaría. Nunca había conocido a alguien semejante, pero tenía un aire que la hacía familiar. De alguna manera —pensé, busqué una explicación—, Rosa era una de las manifestaciones absurdas de mis pesadillas que se daban cada cierto tiempo en la realidad. Afuera, la noche era clara y silenciosa como un cristal que daba miedo que en cualquier momento se pudiera romper. Aún borracho, caminé varias calles bajo la luz de los postes. De Rosa ya apenas quedaba un ligero olor entre rancio y flores muertas que desapareció finalmente al llegar a la torre más alta de Lima. En verdad estaba más que cansado cuando llegué allí, bajo esa enorme mole de concreto, cansado de seguir escribiendo por impulsos ciegos, cansado de beber licores baratos, cansado de mí. Me acurruqué en la puerta metálica de un banco, sobre unos cartones que alguien había dejado. No sé cuánto tiempo faltaba para que amanezca, no quería caminar más. Sólo quería dormir, aunque sea un rato.

Al día siguiente de aquel suceso, cuando el sol rojo caía en el horizonte de mi ventana, me encontraba buscando entre mis papeles viejos unos textos que durante años tenía guardados en unos cajones. Eran textos que escribí en una juventud sana y llena de esperanzas, cuando era el escritor joven y prometedor, con dos primeros libros galardonados que me catapultaron inmediatamente al parnaso literario. No los pude encontrar por ninguna parte. Me di cuenta también de que habían desaparecido unos papeles que guardaba en el baúl heredado de mi padre. Eran poemas, relatos y novelas inéditas o inconclusas, proyectos truncos o ampliamente desarrollados, corregidos, pero todos rechazados por los editores que, ya antes de entrar en esta larga etapa solitaria y disipada de mi vida, se habían vuelto en mi contra. Mis ex lectores y ahora críticos, al tratar de explicarse mi leyenda, se dividen entre los que creen que todo se debe a mi dipsomanía, a la que llegué más por mis convicciones morales o, mejor dicho, amorales, y los otros, los que piensan que simplemente mi genio se acabó.

Pese a todo, curtido por la fatalidad, ya acostumbrado a ir perdiéndolo todo de a pocos, o a veces de un porrazo, ¡un asalto en alguna esquina!, yo seguía mi vida como hace tanto tiempo la venía haciendo: solitario, embriagándome, ajeno a estas pérdidas, alimentando con todo tipo de licores, en el mundillo literario —y desde lejos “marginal”, como dicen—, mi vieja leyenda de gran escritor maldito. Día tras día, al volver al cuartucho del Hotel donde vivía desde hacía décadas, constataba, sin apasionamientos, sin rencor, con dignidad, las desapariciones de mis manuscritos. Hasta las pocas cosas que estaba escribiendo en los últimos tiempos empezaron a desaparecer. Se había convertido en algo cotidiano. Sucedían de noche, cuando yo salía más. Poco a poco se fue haciendo tan “normal” que ya me había acostumbrado. En realidad no me importaba, porque desde hacía tiempo ya no me importaba lo que escribía ni el para qué. No sé si sólo por inercia lo hacía, o por un viejo instinto irracional educado por un inútil talento. Es verdad, aunque parezca algo lejano a mi naturaleza de escritor, ya no me preocupaba el destino de mis papeles. Es por eso que si me encuentro en un bar —el Cordano, el Queirolo, el Pizzelli o el Superba— y me viene algo a la mente, lo escribo en la servilleta que tengo a la mano. Si el mozo, al recoger mi taza, se lo lleva, es mejor para mí, así no tengo nada qué cargar, y es mucho mejor aún si lo arroja al tacho.

Por ahí, en una plaza, en la puerta de los bares, en plena calle, aparecen a veces algunos jóvenes periodistas que, luego de haberse enterado de que todavía no he muerto, tratan de entrevistarme, o bien se trata de algún joven poeta que ha estado siguiéndome con timidez y que quiere pedirme algún consejo. Yo los rechazo, les digo amablemente que hace tiempo no escribo nada y que si, por favor, me pueden dejar en paz. No leo las páginas culturales de los periódicos, no me interesa las novedades literarias del país o de afuera.

Entonces, como les cuento, yo seguía mi vida, así como ustedes juzgarán, y con estas desapariciones que no me afectaban para nada, hasta que hace unos días, deteniéndome en un puesto de periódicos, como suelo hacer cuando me llama la atención la foto de alguna vedette desnuda en la portada o en la contraportada, vi en un diario la fotografía de Rosa ¿Cómo podía olvidar aquel rostro magullado por la adversidad? Bajo ese cruel retrato estaba escrita la noticia de su muerte efectuada por las fuerzas del orden en medio de un enfrentamiento armado ocurrido a primeras horas de la noche anterior.

¡Qué locura!, ¿no creen?, hasta ahora no me entra a la cabeza; pero, claro, es lógico para ustedes, pero para mí no: por unos viejos papeles míos que habían estado desapareciendo de mi cuarto, que ahora han encontrado ustedes entre las pertenencias de aquella desdichada muchacha, ¡creer que yo soy el líder de esa secta de fanáticos! Por favor, no jodan. Con esto pongo punto final a mi intervención en esta historia tan disparatada. Me quita tiempo. Ando buscando en estos días el punto preciso del sabor de un pollo al curry con toques de páprika, ají amarillo y chirimoya. Como podrán advertir, ando muy ocupado. Por favor, déjenme tranquilo. Ya no me jodan, ¡carajo!


(Fotos: Dalia E.)

Friday, November 10, 2006

Revista Mesa Redonda


El octavo número de esta revista de distribución gratuita viene recargado. Por un lado tenemos un coloquio sobre el casi mítico bar Palermo, donde participan Oswaldo Reynoso, Evalina Gayoso, Esperanza Ruiz y Manuel Velázquez Rojas. También hay un texto de Jaime Higa sobre el post punk ochentero, y un cuento de Miguel Ildefonso, que forma parte de su próximo libro, Hotel Lima.
En poesía encontramos algo interesante: un texto del poeta y periodista Diego Otero; mientras que en la sección de reseñas José Güich, Carlos Maza, Carlos Wertheman y Jorge Eslava examinan las publicaciones más recientes. Mención especial para las caricatura de mi pata Cherman, a quien no veo hace un kulo de años (para entrar en el estilo Cherman). Buen número.

Nota tomada de www.luzdelimbo.blogspot.com (Víctor Coral)