¿dónde estamos? Esta es Santa María, en Mosta. Se ve desde toda la isla.
se pueden ver perfecamente desde detrás de la valla.
perdiéndonos por las calles dentro de la muralla, imaginando caballeros y ataques.
Pequeñas ventanas hacia fuera pero amplios patios en el interior.
Unas de otras están a una distancia perfectamente nadable, aunque sea atrevido por la gran cantidad de ferrys y barquitos que las unen. Malta tiene pocas playas de arena como tales, aunque se puede extender la toalla en cualquier plataforma de roca y desde ahí saltar a las aguas transparentes del Mediterráneo, paraíso de los buceadores, se pasa de una profundidad de pocos metros a más de cincuenta en un par de brazadas.
las olas se van apaciguando según pasan el túnel en Dwejra, pero a la mitad la oscilación puede llegar a más de metro y medio, pudiéndote quedar agarrado a un saliente de la roca y luego tirarte.
Las dos ruedas lo tienen peor. Las carreteras son malas y atestadas de coches que apenas respetan las normas que en su día aprendimos en la autoescuela. Las rotondas o incorporaciones a la circulación se hacen por la ley de a ver quién lo tiene más grande. Las luces en los túneles y los intermitentes deben ser para los días de fiestas. Hay dobles vías pero algunas están tan perfectamente bacheadas como las calificadas de secundarias. Si U2 cantaban a la ciudad de las calles sin nombre aquí podrían hacerlo a la isla de las carreteras sin indicadores. Quizás ir de un lado a otro no sólo sea más rápido a nado, sino también a pie.
recomendable el gps, excepto para caminar..
haciendo amigos, aunque lo que abundan en las calles son los gatos gordos.
Hablan un inglés muy rápido y maltés, que suena más a árabe que a italiano. Muy devotos católicos, llenan las iglesias y muchísimas casas tienen una imagen de la Virgen o un santo en el portal. Casi todas las construcciones, de dos alturas, son del mismo color que la isla, una gran piedra plana de 27 por 14km, la mitad de las medidas, aproximadamente, para Gozo. Un poco más de vegetación en ésta que en Malta, ambas con múltiples cuevas naturales donde se cobijaron ilustres visitantes, tales como San Pablo tras su naufragio o Ulises los siete años que tonteó con Calipso.
imagen de postal de Marsaxlokk, fuera de encuadre dos enormes chimeneas y feos edificios. Muy cerca la segunda fábrica de Playmobil más grande de Europa y al lado un campo de refugiados subsaharianos. Las coloreadas barcas son los luzzus, diseño fenicio.
bahía de St Julian's desde la piscina del hotel...
Bonito lugar para bucear y nadar, perdiéndose por la tarde en estrechas callejuelas flanqueadas por palacios que conocieron otros tiempos de esplendor y para volver a casa por la noche conduciendo, pasando de una población a otra sin darse cuenta y con pocas posibilidades de desandar lo andado. Pero al contrario de otras islas visitadas recientemente, en donde no me importaría acabar mis días, ésta ha sido de paso y ha quedado perfectamente explorada.
posando delante de la Azure Window antes de que se caiga
como siempre, más en triviajeros