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miércoles, 22 de septiembre de 2010

no es país para triatletas

A tenor de los comentarios en la anterior entrada puede que moleste darse cuenta de que como personas no servimos para nada, pero aún así nos creemos el centro del universo y no hacemos más que buscar el disfrute y el gozo, y para allá partimos…

La tercera cúpula más grande de Europa tras el Vaticano y Londres...
¿dónde estamos? Esta es Santa María, en Mosta. Se ve desde toda la isla.


intentando seguir la dieta viendo templos de hace cinco mil años. No pagamos entrada,
se pueden ver perfecamente desde detrás de la valla.


El país de Malta es el más densamente poblado de Europa, consta de tres islas; Malta, Gozo y la pequeña Comino. Han pasado por muchas manos, hace cuatrocientos años la Corona de Castilla se las cedió a los Caballeros de Malta por el precio de un halcón vivo anual.

perdiéndonos por las calles dentro de la muralla, imaginando caballeros y ataques.

Pequeñas ventanas hacia fuera pero amplios patios en el interior.

Unas de otras están a una distancia perfectamente nadable, aunque sea atrevido por la gran cantidad de ferrys y barquitos que las unen. Malta tiene pocas playas de arena como tales, aunque se puede extender la toalla en cualquier plataforma de roca y desde ahí saltar a las aguas transparentes del Mediterráneo, paraíso de los buceadores, se pasa de una profundidad de pocos metros a más de cincuenta en un par de brazadas.

saltando a St Peter's Pool

las olas se van apaciguando según pasan el túnel en Dwejra, pero a la mitad la oscilación puede llegar a más de metro y medio, pudiéndote quedar agarrado a un saliente de la roca y luego tirarte.

Las dos ruedas lo tienen peor. Las carreteras son malas y atestadas de coches que apenas respetan las normas que en su día aprendimos en la autoescuela. Las rotondas o incorporaciones a la circulación se hacen por la ley de a ver quién lo tiene más grande. Las luces en los túneles y los intermitentes deben ser para los días de fiestas. Hay dobles vías pero algunas están tan perfectamente bacheadas como las calificadas de secundarias. Si U2 cantaban a la ciudad de las calles sin nombre aquí podrían hacerlo a la isla de las carreteras sin indicadores. Quizás ir de un lado a otro no sólo sea más rápido a nado, sino también a pie.

recomendable el gps, excepto para caminar..

haciendo amigos, aunque lo que abundan en las calles son los gatos gordos.

Hablan un inglés muy rápido y maltés, que suena más a árabe que a italiano. Muy devotos católicos, llenan las iglesias y muchísimas casas tienen una imagen de la Virgen o un santo en el portal. Casi todas las construcciones, de dos alturas, son del mismo color que la isla, una gran piedra plana de 27 por 14km, la mitad de las medidas, aproximadamente, para Gozo. Un poco más de vegetación en ésta que en Malta, ambas con múltiples cuevas naturales donde se cobijaron ilustres visitantes, tales como San Pablo tras su naufragio o Ulises los siete años que tonteó con Calipso.

imagen de postal de Marsaxlokk, fuera de encuadre dos enormes chimeneas y feos edificios. Muy cerca la segunda fábrica de Playmobil más grande de Europa y al lado un campo de refugiados subsaharianos. Las coloreadas barcas son los luzzus, diseño fenicio.

bahía de St Julian's desde la piscina del hotel...

Bonito lugar para bucear y nadar, perdiéndose por la tarde en estrechas callejuelas flanqueadas por palacios que conocieron otros tiempos de esplendor y para volver a casa por la noche conduciendo, pasando de una población a otra sin darse cuenta y con pocas posibilidades de desandar lo andado. Pero al contrario de otras islas visitadas recientemente, en donde no me importaría acabar mis días, ésta ha sido de paso y ha quedado perfectamente explorada.

posando delante de la Azure Window antes de que se caiga

como siempre, más en triviajeros

viernes, 27 de febrero de 2009

volar

Me gusta viajar, pero no tanto desplazarme. Cuando lo hago me gusta hacerlo en nuestro coche, unas veces conduzco yo, otras misstake. A nuestro ritmo, a nuestra velocidad, con nuestras pausas, en nuestro espacio. Ese espacio es muy importante cuando se trata de transporte público.

Hoy no es el caso, pero en alguna ocasión hemos ido en autobús a la capital. No siempre ocupamos los asientos desde los que mejor se ve la película, que nunca escojemos, y que más lejos están de esa pareja que no calla. Si no fueramos juntos quizás el sitio que hace el par con el nuestro podría ocuparlo cualquiera, charlatán, maloliente, dormilón, ruidoso, cabeceador hacia nuestro lado. Antes iba en tren a Ainhoa-Gasteiz, me gusta la amplitud, el traqueteo, imaginar historias sobre la gente que ocupa sucesivamente los sitios libres y luego los abandona, espiarlos en el andén desde la ventanilla. No he probado los de alta velocidad, creo que no dejan llevar bicis. Me gusta ver el paisaje pasar, aunque no en sentido contrario.


Al compás del chacachá, del chacachá del tren: ¡qué gusto da viajar cuando se va en exprés!

Pongamos que el autobús ha llegado a la capital. Antes la compañía que tenía la concesión SA-M tenía estación propia, había gente pero no demasiada. Ahora nos juntamos con el resto de autocarviajeros, una fauna peculiar. Abundan cajas de cartón, gente más rural, muchos mochileros, algunos ciclistas vestidos como tal con sus monturas, y los que no viajan y buscan una limosna, calor humano, un asiento cómodo o una cartera distraída. Barullo. Ruido. Ruido de frenazos, ruido sin sentido, ruido de arañazos, ruido, ruido, ruido.


ése es mi autobus, el auto-res, y mejor el exprés, directo y tres asientos por fila


Luego cojemos el metro. Una aventura movilizar todo el equipaje por las escaleras y los tornos, la gente pasa y nadie mira, caminan deprisa, gente variada, muchos nuevos residentes, estudiantes. Aglomeración a según qué horas y líneas. Lucha no ya por un asiento sino por un sitio lo más lejos posible de las emanaciones de un extraño. La gente evita mirarse a los ojos, pero mira de reojo. Unos leen, libros y diarios gratuitos, muchos llevan cascos de música, algunas se oyen.

¿cuántos metros mide el metro (de Madrid)? doscientos ochenta y un mil quinientos ochenta

Y llegamos al aeropuerto, últimamente la t4mible. Traslado desde el parking de larga estancia o desde la estación de metro. Largos pasillos. Gente deambulando, a veces durmiendo. Gente variopinta. A veces imagino los asentamientos en el planeta Tatooine y todos los seres que los frecuentan. Se ve de todo, algún famoso, con o sin comillas, grupos perdidos de estudiantes, fashionvictims y moda las cuatro estaciones metereológicas, gente en sandalias y en botas de alta montaña, mochilas enormes, maletas con ruedas, sin ruedas, envueltas como un bocadillo, material deportivo de todos los tamaños. Miles de personas, todos a merced de las compañías aéreas. Eso paga suplemento, eso también. No te garantizo que llegue, y que si lo hace, llegue como me lo confías, ni aunque pagues suplemento. No te libras. Salgo a la hora que quiero, pero tienes que estar aquí mucho antes. Y cuando llegues, y hayas estirado bien las piernas te dejaré reposar antes de que salgan tus bultos. Si pagas lo mismo que el de dos filas más atrás es casualidad, y si dos personas han pagado por el mismo asiento es legal. No te sientes delante de la cortina aunque los asientos te parezcan más anchos, también lo es el importe del billete. Y no te quejes si no puedes llevar más de 20kgrs, que los de cien pagan lo mismo que tú. Si el viaje es corto ya no se come, a menos que pagues un dineral, y si el viaje es largo te daré comida internacional, y la comerás porque tienes hambre. Aunque se ha perdido un poco el glamour de los aviones y la gente carga con todo tipo de alimentos, como en un mal cine y los portaequipajes y los huecos rebosan de los más diversos objetos. El periódico que quieres nunca llega a tu asiento, ni los bocatas de jamón. Si andas mal del tránsito intestinal, nada mejor que el aeropuerto para que te hagan una colonoscopia como poco.

al descargar el garmin de alguno que comenta por aquí sale esto...

Deberíamos haber empezado la aventura a las 16:30 del viernes, sobre las ocho estaremos todavía con energía en Londres y después partiremos hacia oriente, pararemos en Hong-Kong a repostar y de ahí a Auckland, donde nuestros restos llegarán a las once hora local del domingo, que va doce adelantada a la que dejamos atrás. Pasaremos muchas fronteras y veremos ríos, mares, montes y ciudades cuyos nombres no siempre acertaremos.



siempre en las nubes... duodécima ventanilla por la derecha.



Me gusta viajar, pero no desplazarme. Estarme quieto. Compartir espacio. Buscar la postura. Encontrar entretenimiento. Descansar. Estirar. Que el jet-lag se porte bien, sé que Ramón lo hará, pero, ¿y el otro?

jueves, 13 de noviembre de 2008

B/SS 9/11/2008

Basta con cargar con todo tipo de protección textil contra el clima adverso para que salga un tiempo espléndido, en este caso en una ciudad del Norte.

Así que hemos paseado, por el paseo y por la playa. Y hemos comido en una terracita mirando al mar mientras el Sol nos miraba a nosotros. Y hemos callejeado por ese barrio lleno de pintxos y gente. Y hemos ido de tiendas, para vestir el cuerpo y la mente. Saqueamos la FNAC, incluso cargamos con un ordenador que espero elimine las taquicardias que me provoca la lentitud del actual. Y hemos descubierto un hotelito, reservado un mes antes de la inscripción, muy bien situado, bien de precio y bien de instalaciones. Permitid que me guarde el secreto.

¿a qué huelen los libros sin abrir?

Ainhoa ha sacado preciosas fotos que podéis ver en su blog. Incluso se ha comprado otra minicámara para llevar siempre encima y que ningún instante se le escape.

Llevo cuatro años corriendo esta mítica prueba. Cuatro años con la tradición de comer en La Pasta Gansa y pintarrajear en sus manteles. Espero iniciar una nueva costumbre este año cenando la noche anterior en un japonés, porque el maki es de las cosas que hacen feliz a A. y en este caso las vistas al Kursaal y la situación en el paseo de Salamanca señalaban estupendas coincidencias.


el mar se rinde a los pies de A.

Este año la Behobia-San Sebastian cumplía 44 años. La feria del corredor inaguraba localización en el Kursaal y, entre otros, había stands de ropa Ironman. Cada vez se ven, o por lo menos reconozco, más triatletas en la línea de salida.

Desayuno en una pastelería-cafetería donde ofrecen 4 napolitanas de crema al precio de tres. Hay acentos de toda españa apurando sus cafés. Ojeo el periódico, las páginas centrales contienen decenas de anécdotas de la carrera.

Un tren azul, con salidas cada 15', traslada en sus vagones repletos a cientos de corredores que en el trayecto cuentan sus experiencias, aspiraciones y miran con recelo a los que llevan pegatinas para el guardarropa de colores que denotan salida en los puestos delanteros.


billete a la fama...


Al llegar a Behobia un autobús te recoge en la estación de tren y te lleva hasta la misma salida. Por el camino se ve una serpiente de atletas con sus mochilas y distintos hábitos con los que combatir el fresco de la mañana la media hora larga que toca esperar desde que cierra el camión que recoge la ropa hasta que dan la salida, escalonada por dorsales. Café caliente, música alta, gente muy animada, visto de lejos podría parecer una rave en los Monegros.

let's party


El primer año salì con dorsal blanco, igual que otros diez mil corredores. Parecida a una salida de natación donde todo el mundo sale a muerte y te tienes que abrir paso con los brazos. Los siguientes tres años he salido con dorsal verde, lo cual me aseguraba la salida a la vez y justo detrás que los amarillos, los pros y pro-pulares.

cola en los komunak

Cinq minutes, cinco minutos, bost minutu y decenas de camisetas viejas y gigantescas bolsas de basura vuelan por encima de nuestras cabezas. Quince minutos antes han salido los que corren sobre ruedas, que tardarán 15' que el mejor Chema Martínez, pero éste va sin casco aero ni ropa de lycra.

El recorrido es un continuo sube y baja flanqueado continuamente por público. No pasan 10mts sin que haya nadie animando (excepto en el puerto de Pasajes) y en ocasiones hay hasta triple fila. Reconozco algunos fieles de la carrera, como la heavy familia con la furgoneta con música rock a todo trapo y su largo mástil con Ikurriña y bandera pirata gritando aupas y ánimos mientras el padre ofrece gajos de naranja. Los simpatizantes de los presos siempre ocupan la misma curva antes de entrar en Pasaia. Seguro que hay muchos más, sobre todo niños que no paran de chocar tu mano soñando con correr algún día. Yo choqué todas las que pude y este año, por primera vez, me animaban por mi nombre.

La banda de música señala el inicio de la última subida, la peor, donde más gente anima, donde más se sufre, donde el premio es la ovación y la larga bajada a meta, en esa recta larguísima donde ya no ves la gente que te aplaude, sólo deseas atravesar el último arco, el que lleva el cronómetro.


Debía hacer 5km a ritmo medio, otros doce un poco más fuertes y los últimos a voluntad, por sensaciones. Difícil contenerse cuando tienes más de diecisesis mil personas detrás y a punto de salir te saludan triatletas canarios que conociste en tierras charras y volviste a encontrar en Holanda. Pero yo a mi ritmo, incluso cuando podía subir una marcha y me adelantan tres compañeros de mi club de atletismo. A mi ritmo a pesar de que por los lados te pase todo tipo de gente. Casi toda la carrera la hice con Nerea, a la postre novena clasificada. A veces ella iba por delante, otras por detrás, al final por detrás, siempre escoltada por su liebre. Esta vez yo iba sin afeitar, por lo que las palabras Aupa neska iban dirigidas a ella (a pesar de mi tamaño y peculiar forma de correr hay gente que me confunde...).




recuperar la mochila me llevó más de 30'...


Al final 1h23'07" (segundo mejor tiempo personal por kilómetro, rebajando mis tiempos más de 7'). Casi a un cuarto de hora del octavo clasificado, Miguel Angel Pinto, también salmantino. Entre ambos, entre esos 900 segundos, se han colado 865 corredores. Correr la Behobia ya es una alegría, pero haber mejorado mis marcas produce un subidón que aún me dura.



Ha sido un fin de semana de esos, que cuando se acaban, se van derechitos al cielo.

viernes, 3 de octubre de 2008

gateando

otra puerta que se abre para que la traspase siendo finisher

Viaje sin contratiempos a esta preciosa sierra. Precioso hotelito cercano a Ronda pero en la carretera que nos llevará a la salida. Pocas luces, cielo estrellado y preciosa luna.
he venido a correr o a perderme por aquí? A 400mts el cuartel de la Legión
Cena en el albergue de la organización. Ensalada vegetal, ensalada de patata, rica pasta y plátano. Este año el acompañante paga 8€ y sólo dan un pastelito por persona. A. dice que es por todos los que me comí el año pasado. Los que comparten mesa con nosotros ríen, Ivan Tejero comenta con su chica el vídeo de Hawaii que junto con las fotos del Titán 2007 proyectan en la gran pantalla. Antes hemos hecho Qi gong, parecido al Tai Chi. Sin que nadie se de cuenta abro un ojo. A. superconcentrada y desconectada del mundo, yo no pillo la postura.


este es Harley, ronroneador y veloz como el rayo

Y vuelta al hotel, a perrear, en este caso a gatear. Cuatro gatos, como la taberna barcelonesa, habitan en los jardines del Molino del Puente. A. ha adoptado a uno, y yo le he bautizado Harley, pues ronronea más que una de estas motos soñadas. Es muy listo. Hasta me ha ayudado a escribir esta entrada. Aunque para eso tampoco hace falta mucho...
a qué carrera nos apuntamos esta vez?

Quizás el sábado a estas horas haya aprendido una lección, o tal vez no. Que hay que venir a estos sitios entrenado. Yo puedo engañar, pero las piernas de los que andan por aquí no.


Si queréis seguir el lance de carrera podéis conectaros a http://www.gescon-chip.com/ Si os queréis morir de envidia no dejéis de visitar la página de la carrera http://www.triatlontitan.es/
el tricatleta y un fan
El sábado a las 9:30. A cazar mariposas con el estómago y sonrisas con el corazón.

on the road

Sigo a la gente que me interesa, porque la única gente que me interesa es la que está loca por vivir, loca por hablar, loca por salvarse, con ganas de todo al mismo tiempo. La gente que nunca bosteza ni habla de lugares comunes, sino que arde como fabulosos cohetes amarillos explotando igual que arañas entre las estrellas. Y entonces se ve estallar una luz azul y todo el mundo suelta un ¡Ohhhhh!. on the road. Kerouac.

esto lo que veremos al principio

Las ruedas en las fundas, la bici en la bolsa, la ropa y el material en la maleta, A. saliente de guardia dormitando en el asiento del copiloto buscando nuevos destinos en sus sueños. La familia triviajera en el coche. Mentalmente hago el repaso de la carga y echo de menos algo. En septiembre me hubiera gustado nadar más que aquel domingo en el lago de Sanabria, para otra vez será. 588km nos separan de Algodonales.

por aquí pasamos
Ese lugar mítico en la sierra de Grazalema donde si conjuramos los miedos y apelamos a la épica nos coronaremos Titanes el sábado. El nombre del pueblo y el cariño con que está organizada la prueba serán lo único suave que encontraremos, para algunos afortunados habrá también un abrazo cuando decidamos parar.
¿de que están llenos los arcos de salida?
Viaje relámpago. Viaje, reunión, cena, dormir, competir, reencuentro con amigos y conocidos, ducha, turisteo, cena, dormir, turisteo, vuelta a casa. Servirá para despedir la temporada y dar comienzo a la nueva. El lunes comienza ya la planificación encaminada a los nuevos retos.

la temporada 2009 está tras la puerta

Descansad o entrenad, pero seguid locos por aquello que os llena. No bostezéis ni cerréis los ojos porque en un suspiro todo cambia. Rodearos de aquellos que os pueden enseñar algo y no os rindáis. Perseverad y haced vuestro el aquí y ahora del Chulo . Nos vemos en la carretera, antes de entrar al agua, o recordando lo pasado y soñando el porvenir.

y esto lo que veremos al final

¡Ohhhhhh!

miércoles, 23 de julio de 2008

Despedida

Trieste
Entramos a Italia sigilosamente, de noche, A. dormida. Al día siguiente madrugaremos para conocer esta ciudad que de finales del sXIV a principios del XX fue el puerto en el Adriático del Imperio Astrohúngaro.

Unos cuantos croissants nos recargan de energía y empezamos subiendo al Castillo, entramos en la Catedral de San Giusto y descubro que entre mosaicos y frescos venecianos y un rosetón gótico está el Escorial Carlista, una pequeña capilla donde están enterrados todos los descendientes a la corona española de esta línea dinástica.. ¿Qué hubiera pasado si hubieran perdido los partidarios de Isabel?

Seguimos los pasos de Joyce y le pregunto a un viejecillo muy simpático que por dónde se va a Hawaii, "entrena con cabeza, descansa, aprende a sufrir y dalo todo en carrera, cuando menos te lo esperes habrás llegado" me dice, yo, lejos de mi patria, vagando en tierras extrañas, comienzo un monólogo interior que aún no ha acabado.. un día de éstos me pongo a hacerle caso. A. me tira de la manga y hace que la invite a un Spriz Aperol (brebaje naranja que todo el mundo bebe) en un terraza en la Piazza de la Unitá.









Camino de Padua pasamos por el palacio de Miramare, ya se hubiera quedado aquí Maximiliano de Habsburgo en vez de buscar la gloria en Méjico, aunque nadie hubiera recordado que murió entre rosas del jardín diseñado por él en vez de fusilado.

Padua
Llegamos ya un poco cansados a esta última parada aunque deseamos aprovecharla al máximo. Se nos hace tarde y no podemos entrar en la Universidad de Medicina y visitar su Sala de Anatomía. Aquí también se graduó la primera mujer en el mundo, allá por el 1678, en Filosofía. Delante de nosotros cierran la Basílica de San Antonio, patrón de los viajeros y al que se le ruega por un buen espos@ y los objetos perdidos (¿estaría mi slot escondido bajo un banco?), nunca lo sabré y no tendré más que seguir buscando.
Delante de la casa de Galileo en Padua, A. le comenta en torno a qué giran nuestros triviajes...

Ciudad medieval que nos acaba de agotar. Sushi en terracita entre gente que no sabemos si es así o vive para aparentar, pero es impresionante cómo se arreglan esto/as italiano/as y cómo les gustan marcas que ni vemos por aquí, con su moreno, sus gafas y sus blackberry, parecemos estar en el suplemento de saber vivir del Vogue italia.

Al día siguiente avión de vuelta. Vistazo a El País, nada ha cambiado, aquel ciclista italiano que arrasaba los días previos en TV5 se dopa, y otro que es de Béjar también, incluso uno de los de toda la vida, a sus 37 años. En el metro observo la portada del Marca, una jeringuilla hinchando una rueda de bici y un titular preguntándose si ese deporte es verdad.

Qué pena.
Hoy Sastre conquista el Alpe d'Huez. Creo en él y en otros muchos, pero no me separo del teléfono por si me necesitan para el UCI Protour, a este paso parece que ninguno parece limpio. Molaría correr una prólogo...

Delante de S. Giusto, sobre ruinas romanas pienso en el próximo...

Mikez y Jukez, campaneros, no ayudan. Hay tantos que me vuelvo loco..

martes, 22 de julio de 2008

recuerdos

Despedida de las luminosas calles de la capital eslovena. Tienen una fuente que recuerda a la de la plaza Navona, pues sus caños evocan tres fuentes de vida en Eslovenia (los rios Ljubljana, Krka y Sava). Dejamos atrás cientos de terrazas apetecibles, gente agradable y un dragón que vigila el primer puente de hormigón de Europa.

Cogemos el coche y le damos de comer, más barato que en Austria, que a su vez es más barato que Italia pero todos son más caros que España, a pesar de todas las quejas.

Parada en las cueva de Postojna. Recorrido de 5km en un trenecito y otros mil metros andando, 8 grados en su interior. Cometemos falta sacando fotos, burlando a un guardian albino e invidente, el proteus: pez con forma de lagartija que respira por branquias y que habita más de cien años en las grietas húmedas de estas cuevas, no tiene ojos, se le atrofian en la oscuridad, ¡así que sigo con los míos bien abiertos para que esto no suceda!

La siguiente parada es el Castillo de Predjama, construido a la entrada del segundo sistema de grutas más grande de Eslovenia. Tras un largo asedio (al que resistía su población entrando y saliendo por las grutas secretas) no habría sucumbido si no hubiera sido por un traidor que señaló el lugar donde su señor liberaba sus intestinos, esta vez un aluvión de piedras de cañón cayó sobre él..

Con estos castillos y sus mil escalones aún no se me ocurre cerrar los ojos.. hay cámara de torturas dentro para quén se atreva.


Esto es Piran, su visita ha de durar menos de una hora, so pena de que tengas que empeñar un riñón para pagar el parking. Está en una minipenínsula y tiene un castillo en lo más alto. Palacios venecianos. Nos despedimos del Sol tarareando la melodía como si estuvíeramos en el Café del Mar pero esto es mucho más bonito. Cerca está la ciudad de Koper, que nos obsequió con dos cervezas, rico plato de pasta, pizza y ensalada por trece euros (lo que tres botellas de agua austriacas!).

Cogemos el bravo Fiat y enfilamos a su tierra natal, Trieste nos espera.

martes, 15 de julio de 2008

Have a nice day!

Austria ya quedó atrás, ya están incluso todas las plazas vendidas para el año que viene. Nos vamos contentos del hotel, del restaurante que había abajo, de la ciudad, del entorno, de su gente, de la gente de Alcobendas... hemos atravesado los Alpes Julianos y estamos en Eslovenia, un país nuevo, que nos ha recibido con una sonrisa en la cara.

La gente es encantadora, hasta ahora se esfuerzan por entendernos en inglés (algunos hasta en castellano, y el recepcionista de nuestro hotel en la capital nos ha recordado a doña Urraca al comprobar el dni de A.), y al despedirnos: "have a nice day!", me parece más bonito decir "qué usted tenga un buen día!" al genérico "buenos días!".
el castillo de Bled, su lago y la princesa encantada

Camino de Ljubljana hemos hecho parada en Bled, ciudad de postal con lago, entorno verde y castillo en el risco, y en Skofja Loka, con su casco medieval diminuto donde hemos disfrutado de sus terrazas.Luna llena sobre Ljubljana desde la piscina del Grand Hotel Union

Y hemos llegado a uno de los hoteles más clásicos de esta elegante ciudad. Data de 1905 y su edificio no desentona con los monumentos que le rodean. La piscina en su último piso nos ha permitido relajarnos. Hemos hecho una primera toma de contacto con esta bonita ciudad que gira alrededor de su río. Cientos de cafés rivalizan con tentadoras terrazas y casi todas llenas. La gente vive relajada, las tiendas ya no cierran a las 18h, aún hay gente por la calle, familias, turistas, músicos...

Dicen que esta ciudad nació al derrotar Jasón (el del vellocino de oro) a un dragón que atemorizaba la zona. Lo hemos encontrado, y le hemos dado recuerdos de su primo de Klagenfurt.
El símbolo de Ljubljana

Con esta crónica entro en el terreno los cuadernos de viajes, que os recomiendo leer si tenéis más curiosidad que la triatlética, pero espero que A. no se enfade.

Entre tanto se me ha aparecido Obi-Wan Kenobi, y me ha dicho: "hay que correr más el año que viene.."