Si mi proyecto de la sirenita no tenía un público claro (se trata de un cuento infantil, que encima se ha asociado a Disney, con dibujo juvenil y contenidos adultos) ahora estoy tratando de hacer algo claramente infantil. He sustituido las atmosferas retorcidas y oscuras por cierta pátina de melancolía que intento dar a través de esta sensación de fotografías antiguas coloreadas, que las bondades del photoshop me proporcionan.