Actos de graduación del alumnado de Segundo de Bachillerato de Las Cumbres
El Director, Antonio Macías, con los tres excelentes estudiantes que han conseguido
Matrícula de Honor: Diego Alberto Carrasco, Pablo Martínez y Talia Salguero
Por Esperanza
Cabello
En nuestro blog todo se va volviendo
cíclico; después de doce años publicando nos hemos dado cuenta de que
cada año se repiten algunas cosas, las más importantes, las más
curiosas, las más sentidas...
Y también nos damos cuenta de que a veces
se mezcla el lado personal con el lado profesional, y eso que procuramos
mantenerlos separados, que para eso cada uno tiene su blog
correspondiente, pero es que a veces es muy difícil, porque parte del
trabajo se convierte en familia y las aficiones y la historia se
entremezclan.
Y este es el caso de la Graduación de
Segundo de Bachillerato. El momento más importante para todos los
centros de enseñanza en los que se cursa bachillerato. Y para nosotros,
en Las Cumbres, es, junto con la Graduación de los Ciclos Formativos, lo
más importante de cada año.
Porque en nuestra pequeña-gran familia en
la que padres, madres, profesoras, profesores y todo el personal del
centro nos afanamos para "sacar adelante" a nuestros "niños", días como
este se convierten en la mayor alegría posible.
Todos nuestros mayores graduados, con su
título de bachillerato en el bolsillo y dispuestos a abandonar el nido
en unos meses. Hasta llegar aquí ha habido miles de momentos
maravillosos y otros difíciles; años de estudio, de desvelos, de trabajo
de día y de noche. Muchas clases complicadas, muchas tutorías a
deshora, muchas lágrimas y muchas risas. Para ellos los primeros miedos,
los primeros amores, los primeros viajes. Para nosotros seis años de
constante presencia, de mostrar el camino tranquilamente haciéndoles
ver que esfuerzo, disciplina y felicidad son una especie de fórmula
mágica.
¡Pero hemos llegado! Algunos se nos han
quedado en el camino y ahora los vemos trabajando o con otros estudios.
Hasta la graduación han llegado todos estos muchachos y muchachas
felices que a continuación conoceremos.
La tarde comenzó con la entrega de notas.
Mientras padres y madres se reunían con los tutores y tutoras para
recoger las calificaciones, ellos y ellas, guapísimos y resplandecientes
se reunían para hacerse fotografías de recuerdo.
Nuestros chicos y chicas de Humanidades,
los futuros traductores y lingüistas, que han formado durante todo el
año un grupo especial, fueron los primeros en reunirse.
Pero si alguien faltaba en la fotografía
era Candelaria, su tutora, que lleva dos años pendiente de "sus niños";
tantos han sido sus desvelos que se ha convertido en parte fundamental
del grupo. Su trabajo como tutora nos maravilla, esa cercanía y esa
profesionalidad hacen de ella una profesora excepcional.
Nuestros niños de Ciencias, los futuros
médicos y arquitectos, también fueron reuniéndose poco a poco. Grandes
compañeros, brillantes estudiantes, personas únicas. Nuestra enhorabuena
a todos.
¿Y ellos? Algunos de nuestros niños de
Sociales. Han hecho un esfuerzo tremendo para llegar hasta aquí, y nos
sentimos profundamente orgullosos de ellos. Cada uno a su manera ha
conseguido llegar al final de esta meta que se nos antojaba tan difícil
hace dos años. También echamos de menos a algunos compañeros que han
continuado sus estudios en otras ciudades, pero tuvimos la suerte de
saludarlos ayer.
Finalmente, en la panoplia de estudiantes
destacados, algunos de los componentes del grupo de Artes (los demás se
incorporarían un poco más tarde), como siempre acompañados por su
profesor y tutor, José Antonio Martel, sin el que este bachillerato no
sería nunca igual.
La fotografía justo delante del fantástico mural que comenzaron ellos mismos durante este curso.
Todo estaba preparado para la celebración,
que comenzaría a las nueve. Todos han hecho un grandísimo trabajo para
que no faltara ni un solo detalle esta gran noche. Este año tenemos
estrado y pantalla fijos, todo limpio y preparado gracias,
fundamentalmente, a Javier y a Pepi, que se han afanado para conseguir
un resultado magnífico.
Por fin, rodeados de padres, abuelos,
hermanos, sobrinos y amigos, comenzamos esta Fiesta de Graduación. El
nuevo director, Antonio Macías, dio la bienvenida a todos los presentes y
después de unas breves explicaciones dio la palabra a la vicedirectora,
Mariola Pérez, que actuó como maestra de ceremonias.
La mesa estaba formada por el Director y
los tutores de los grupos, Juan Mancilla, Candelaria Fernández, Marisol
Lozano y José Antonio Martel.
Los primeros en recoger sus orlas y
diplomas fueron los alumnos y alumnas de Ciencia y Tecnología (ahora sí
están todos) con su tutor Juan Mancilla.
El segundo grupo que recogió sus diplomas y orlas fue el de Ciencias Sociales, con su tutora Marisol Lozano.
En tercer lugar los alumnos de Humanidades
y Arte, que han compartido comunes este año, con sus tutores Candelaria
Fernández y José Antonio Martel.
Después llegó uno de los momentos más
emotivos de la noche. La entrega de las Menciones de Honor, este año han
sido catorce los alumnos y alumnas que han merecido esta distinción por
sus magníficas calificaciones en Bachillerato. Hizo entrega de las
misma el Jefe de Estudios Gustavo Herrera.
¡Enhorabuena!
Por fin llegó el momento más emocionante.
Saber quienes son los acreedores de las Matrículas de Honor. A Las
Cumbres le corresponden tres matrículas según la normativa, y de las
tres la primera ha recaído en Diego Alberto Carrasco, de Ubrique, por su
impresionante expediente.
¡Fantástico!
La segunda matrícula, que también entregó
el Director, Antonio Macías, ha sido para Pablo Martínez, de Benaocaz,
con unas calificaciones impresionantes.
¡Enhorabuena, Pablo!
Y la tercera matrícula Fue para Talia
Salguero, de Grazalema, que también se la ha ganado a pulso. Nuestros
estudiantes de matrícula tienen una característica común, además de una
mente brillante, una capacidad de trabajo y esfuerzo increíbles y una
personalidad humilde y cercana.
Nos sentimos muy orgullosos de ellos, porque más que buenos estudiantes son mejores personas.
Y hemos hecho mención de sus pueblos
porque esa es una de las señas de identidad de Las Cumbres, un instituto
formado por personas de todos los pueblos de la comarca, diversidad con
la que crecemos, que nos enriquece y nos engrandece.
Llegó el momento de los discursos de
agradecimiento. Seis años en Las Cumbres dan para mucho, y los discursos
de nuestros niños fueron sentidos, divertidos, agradecidos...
Por Artes, los encargados fueron Mari Carmen y José Antonio.
Por Humanidades, las encargadas fueron María Y Ana Belén.
Por Sociales, Ainhoa y Rocío.
El discurso de Rocío y Ainhoa lleno de anécdotas y de bonitas palabras.
"Más se perdió en Cuba".
Celia y Marta representaron a los alumnos
de Ciencias, nos encanta lo bien que se expresan todos. Y también que
tienen palabras para quienes hemos compartido con ellos tantas horas de
instituto: Rocío, Maria José, Copete, Beatriz, Mari Ángeles, Carmen,
Mariola, Mariola, Gustavo, Juan Pan, Juan Mancilla, José María, Fran,
Lourdes, Esperanza, Eli, Manolo, Ángeles, Francisco, Ignacio, Pepe,
Antonio, Juan Lorenzo, Ana, Candelaria, Marisol, Isabel Bazán, Rafael,
Pepe Olmedo, Eulalia, Isabel, Paula, Martel, Esperanza, Mari, Carmen,
Javier, Pepi...
Una representante de las madres de
nuestros alumnos, Paqui Reyes (que también fue nuestra alumna hace años)
fue la encargada de dirigirse a todos, pero especialmente a los
alumnos, para agradecer, inspirar, alentar y aconsejar todo lo que
madres y padres queremos siempre para nuestros hijos.
Muchísimas gracias por tus palabras, amiga.
Y ya llegados al final de la noche, fue el
turno de nuestro nuevo Director, Antonio Macías, que se dirigió a todos
los presentes dedicando sus primeras palabras a todos los que habían
trabajado y colaborado con esta promoción y por cualquier razón no
podían estar con nosotros (aquí un recuerdo especial para nuestra
compañera Rocío que siempre está en estos días señalados pero a la que
el duelo por la muerte de su madre le impide acompañarnos).
Antonio Macías se refirió expresamente a
nuestro querido Ignacio Calvo, nuestro Director y compañero de
tantísimos años, a quien tanto echamos de menos y que en fechas
señaladas como hoy tenía un papel tan importante. Le agradeció, en
nombre de todos, su trabajo y sus develos por Las Cumbres y nuestra
pequeña comunidad educativa.
Todos los presentes le dedicamos un gran aplauso.
El discurso de Macías fue breve y muy
intenso, lleno de frases de ánimo y fuerza para los nuevos graduados y
de agradecimiento para padres y profesores.
Después una proyección magnífica, de esas a
las que nuestra compañera Eulalia Ortega nos tiene acostumbrados paro
que no dejan de sorprendernos cada año. Divertida, ilusionante y
sorprendente.
¡Gracias, Eulalia!
Y para finalizar los actos
institucionales, todos pudimos reunirnos informalmente en los patios del
instituto con un refrigerio ofrecido por el centro. El momento de los
besos, las enhorabuenas, las alegrías, las recomendaciones, los regalos,
las flores, las gracias y los hasta siempre.
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