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Esta tarde he entrenado 4 horas y media, desde la primera hora he tenido que luchar contra el impulso de volverme a mi casa. Cuando tu estado de ánimo es bajo, el esfuerzo se hace insoportable. He aguantado a base de endurecer el entreno, no tenía pensado hacer dunas y me he metido en ellas, el viento del norte complicaba las cosas. He tenido que obligarme de nuevo en un cruce que me llevaba directamente a mi casa...he tirado para un cerro y me he puesto a hacer cuestas,; los cinco kilos y medio de peso se me antojaban 10.
Esta mañana he recibido la noticia de que un amigo, muy buen corredor dejará de serlo, me dijo hace una semanas que se había caído y que se habia hecho daño en la rodilla. En realidad le habían hecho una biopsia, lo operaron hace dos días, le han quitado la rodilla y le han puesto una prótesis. Me ha afectado mucho la noticia; un chaval fantástico, con treinta y pocos años. He hablado con él, el tío está fuerte de cabeza, estaba más animado que yo.
A veces nos golpea el mazo, sólo queda aguantar...
Sed felices o, al menos, intentadlo...