iba yo paseando
y de repente
¡crack!
ese ruido como de rama
seca
ese sonido que tan bien
conozco
vaya: se me ha roto de nuevo
la vida
y mira que dije que la cuidaría
y mira que me prometí que esta
vez me duraría
más
pero nada;
soy como los niños con sus gafas
en el patio del
colegio;
nada de fiar en lo que a cuidado
respecta
y esta vez no parece que tenga
arreglo;
los trozos, brillantes y
cortantes como cristal,
son demasiado pequeños
para recomponerla
lo estoy viendo venir;
me va a tocar volver a hacer de
diosa todopoderosa,
ay, con lo tedioso que resulta,
para crear y recrear
entre mis
dedos
una vida nueva;
hacerla crecer, embellecerla
y esperar que no se rompa a la
mínima
a veces las vidas que me hago
son un poco Made in China;
no duran ni los dos años de
garantía
europea
y algunas piezas nunca más tienen
recambios