La Biblioteca Teatral "Alberto Mediza" y el Taller de Teatro de la Universidad Nacional de La Plata colaboraron con esta producción.
Fecha: 27 de abril de 2011 15:12
Una producción de la Comedia de la Provincia de Buenos Aires
“He visto a Dios”
de Francisco Defilippis Novoa
Estreno en la Sala Armando Discèpolo
El Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires, a través de la Comedia de la Provincia, presenta “He visto a Dios” de Francisco Defilippis Novoa. Con la dirección de Norberto Barruti, esta pieza de un autor nacional se estrena el viernes 29 de abril a las 21 hs. en la Sala Armando Discépolo, en calle 12 entre 62 y 63, La Plata.
Elenco.
Carmelo Salandra: Omar Fanucchi
Victorio: Luis Rende
El charlatán: Javier Guereña
Una vecina: Alejandra Bignasco
El vendedor de Biblias: Diego Aroza
Chicho: Martín Kasem
Zapiolita: Oscar Ferreyra
Gaetano: Emilio Rupérez
Nuncia: Carolina Painceira
Vestuario: Claudio Boccia
Asistente de vestuario: Cecilia Guerriero
Iluminación y musicalización: Luis Viola
Escenografía: Enrique Cáceres
Asistente de Escenografía: María Victoria Weber
Aistencia de dirección: Nelly Otero, Nicolás Prado y Mariela Mirc
Dirección: Norberto Barruti
Agradecimientos:
“Biblioteca Teatral de La Plata Alberto Mediza”
“Taller de Teatro de la Universidad Nacional de La Plata”
Próximas funciones
Sábado 30 de abril – 21 hs.
Viernes y sábados de mayo – 21 hs.
Entrada General $15
Con descuento $10 para todos los afiliados a UPCN, ATE, UTEDYC, SUTEBA, BANCARIOS Y SOCIEDAD ODONTOLOGICA
Se agradece su difusión
Prensa y Difusión
Comedia de la Provincia
La Plata, lunes 25 de abril de 2011
La Obra, según el autor…
"Carmelo, el protagonista de 'He visto a Dios', nunca ha sido perturbado por problemas trascendentes. Ha vivido su vida como él cree que era menester vivir: amontonando dinero para su hijo, única redención de su egoísmo. Pero un día, una circunstancia, la menos esperada, le golpea el cerebro y viene a buscarlo en su refugio de misantropía absurda.
Y empieza la tragicomedia del hombre que no se fijó más que en las cosas palpables del mundo, creyendo místicamente en una farsa que los que le rodean urden para arrebatarle el fruto de sus pillerías en la vida. Carmelo es el creyente de una farsa, como antes era descreído de un misterio espiritual. Y cuando la farsa se descubre, y la rabia y la vergüenza muerden el orgullo del hombre, el misterio ha tocado lo más hondo de sus sentimientos y se impone al problema que un día vino a buscarlo en su rincón de egoísta. La ascendencia mística, reaparece ahora en todo su espíritu. Por eso se ha elegido al protagonista entre la inmigración de países tradicionalmente religiosos, porque, inconscientemente, obra en ellos una herencia mística de siglos."
Francisco Defilippis Novoa
Publicado en “Ultima Hora” el 6 de julio de 1930
Dos días antes del estreno