Tu eres un panal de dulce, fruta fresca, tu tienes una mirada demasiado pintoresca, una mirada color infinito. Tu me pones el estomago blandito.
Vamos pasito a pasito, siguiendonos las huellas, caminando en una tómbola de estrellas. Un trayecto con clima perfecto, regalame una sonrisita con sabor a viento.
Tu eres mi vitamina de pecho, mi fibra; tu eres todo lo que me equilibra, un balance, lo que me complementa. Un masajito con sabor a menta.
Tu tienes una cosita que brilla, que sobresale, por eso yo quiero que tu me regales treinta carnavales, cuatrocientos mil cuentos y una cajita para guardar los momentos.