Hay clases y clases. Desde el principio de la Operación Puerto quedó claro que dentro de la mal llamada familia ciclista existe un sistema de castas al más puro estilo hindú. Curiosamente, los intocables no son la clase más desfavorecida, al contrario: Piti Valverde, Urco Pereiro y toda la morralla de jóvenes del Liberty campean a sus anchas sin nadie que les chiste. Incluso alguno chulea de que ha sido exculpado (¿?). Sin embargo, hay otros muchos de los que no se acuerda nadie. Son los más veteranos, aquellos que ya no tienen otra salida que la jubilación forzosa, el retiro involuntario, mientras ven que Tyler Hamilton y sus 37 años van a disputar el Giro de Italia.
El núcleo principal lo forman los corredores del Liberty, contratados por Active Bay. Son los cuatro vascos Beloki, los hermanos Osa y Etxebarría, más el alemán y ultradrogado Jorg Jaksche. De estos no se acuerda nadie, pero nadie, especialmente del último. Y han sido ellos los que han tenido que llamar a rebato, con una demanda contra el engendro mercantil de Manolo Saiz. A pesar de esto Benito Urraburu, periodista aguerrido y valiente donde los haya, no ha considerado relevante dejar ni una sola línea en su periódico, aun cuando cumplen dos requisitos básicos para salir en sus páginas: son vascos y están afectados por la Operación Puerto. Ni eso. Van contra Manolón, y eso no se perdona.
De Beloki es bien conocida su trayectoria deportiva. Del Euskadi al Festina de Moreau, Casero y Juan Fernández, donde en una única temporada fue capaz de ganar la crono llana de Romandía (y que diferencias) y hacer tercero en su debut en el Tour, igual que Pantani en 1994. No es el único elemento con el italiano de sangre sólida: han sido los dos únicos corredores desde Indurain que han sido podio en dos grandes en la misma temporada (el calvo en Giro y Tour en 1994 y 1998, el vasco en 2002). Carlos Sastre se ha quedado a la puertas esta año, con la chulería de haber disputado también el Giro: saquen las conclusiones...Se cayó en el Tour de 2003 cuando Manolo Saiz estaba buscando desesperadamente patrocinador y le obligaba a atacar continuamente, en contra de su carácter y sus características -que no es la misma cosa-. Desde entonces ha sido un fantasma errante en La Boulangere, el Saunier Duval y Liberty. En el 2005 llegó a tomar la salida en las tres grandes, y el mejor rendimiento fue en la Vuelta...era porque tenía que coger kms. Claro, claro. Se retira con una Volta a Cataluña como mayor éxito.
Unai Osa es un muñeco roto del dopaje. Sub-23 con el mejor palmarés que se recuerda (su Balenciaga fue antológico) pasó a profesionales con un halo de gran figura. Así que ganó con 23 añitos la Clásica de los Alpes de una manera que el mismísimo Iban Mayo firmaría años después. En 2001 hizo un portentoso Giro de Italia donde hubiese sido segundo de no haberse anulado una etapa de montaña. Fue su canto del cisne. Caídas, una pasada de rosca al más puro estilo Oscar Sevilla y una cierta recuperación en la Vuelta 2004, donde nuestro simpático "1ai" fue noveno sólo superado por sus compañeros de arcón congelador fueron sus últimos hitos. Al igual que el manchego antes citado, con el que comparte generación y un año 2001 nunca igualado, fueron la cobaya para las pruebas de las nuevas drogas: ese año volaban, pero después nunca volvieron ni a parecerse a lo que apuntaban gracias al dopaje. Disputó el Giro 2006 drogado hasta las cejas. No le sirvió ni para entrar entre los diez primeros en ninguna etapa. Caídas si, pero también muchas recaídas. De las otras, se entiende.
Aitor Osa. El hermano paquete. Oscurecido por la eclosión temprana de su joven hermano, el de Itziar dejó el Euskadi donde se dedicaba a atacar a la manera de Txomin Perurena (sin sentido, hacia arriba y a reventar) y fue llevado al iBanesto.com. Por esas cosas de hermanos que bien saben Joseba Zubeldia, o los hermanos paquete de Beloki, Casero, Indurain, Quique Gutiérrez y una larga lista más. Con un palmarés próximo a cero, empieza a espabilar y "gana" la montaña de la Vuelta, una Vuelta al País Vasco que no resiste el paso del tiempo (primer euskaldún desde Gorospe en 1990) pero que fue celebrada como si el Athletic ganase la Champions, hace segundo en la Flecha de Astarloa y otros resultados interesantes, todos gracias al dopaje. Pasa al Liberty donde trabaja su médico y se dedica a obtener buenos puestos para gusto de Manolo Saiz, que lo tenía como comodín para sumar puntos para la clasificación por equipos de la UCI: que si cuarto en el Volta, que plin, que si plan...Los papeles se invierten y es el hermano mayor el que propicia el pase de Unai a Liberty en 2006. Fin de la historia.
David Etxebarría. De Abadiño, toda su carrera deportiva no resiste una mínima aproximación lógica. Con un tamaño más propenso al circo que al deporte de competición, este corredor fue capaz de ganar estando en la ONCE un Tour del Porvenir, etapas en París-Niza o Suiza y dos etapas en un Tour donde acabó bien cerquita de los diez primeros. Cambia al Euskaltel en 2001 y sigue haciendo más o menos lo mismo, pero con menos puntería. Con la caída de Jesús Losa en julio de 2004 desapareció del mapa, como el resto de sus compañeros de equipo. Como sabía de que iba el percal, volvió a casa Manolo, del que había rajado mucho y muy profundamente con su salida. Pero todo se olvida cuando está la droga de por medio, como bien sabe Beloki. Y que regreso, oigan: puestos entre los diez primeros en todas las clásicas de las Ardenas, una vieja obsesión suya, y a tan provecta edad. No se le conoce ninguna declaración ni aparición pública desde su caída en desgracia. Es fácil verlo de copas por Abadiño con su paisano y ex-compañero Zarrabeitia, otro que hay que coger con pinzas.
Jorg Jaksche. "Bella" o "Vains" (por las zapatillas deportivas) para Eufemiano, el alemán es un corredor que debutó jovencísimo en el Polti (estuvo en la etapa de Deux Alps del Tour 1998, esa en la que Pantani dejó bien claro que es lo que hay que tener para ganar) y siempre tuvo el hálito de gran promesa. Fallida, más bien. Ficha por Manolón y empieza a mejorar resultados, pero siempre lejos de la victoria. En 2004 pasa al CSC y encadena París-Niza y Criterium, pero el amigo Rijs no lo lleva al Tour por un asunto nunca aclarado y vuelve al redil Liberty en 2005. Es el único del equipo que rinde en el Tour y creo que acabó el 16º...Especialista en sumar puntos en carreras ProTour o Hors Categorie, la pasada temporada fue segundo en Tirreno, tercero en Romandía y cuarto en Suiza...carrera que disputó cuando ya sabía que la Guardia Civil tenía sangre suya y no se cansaba de repetir "es imposible que tengan grabaciones mías entrando en ninguna clínica".
¡Ah!, que también hay Libertys desheredados muy jóvenes que no han encontrado equipo, al contrario que compañeros de generación y jeringuilla como Rojas, Barredo, Redondo y no se quien más. Sí, muy bien, ¿pero a quién le interesa? ¿Qué han hecho? ¿Qué méritos reúnen para siquiera una línea? Por no hacer, ni siquiera han cantado sobre las cosas que saben, a pesar de quedarse en el paro...
**
Y mira cómo insisten. En que Samuel se retiró del Tour 2003 agotado, cuando el día antes había sido el corredor más joven en pasar con los favoritos el último puerto. Que llegó a Alpe D´Huez fuera de control, porque no quería abandonar, sólo que lo que le habían metido en el cuerpo le había salido rana. Insiste, insiste, y la mentira se hará verdad.
***
Santos Papada González al ataque. Ya en la primera respuesta miente: dice que ha corrido muchas veces la Vuelta a Galicia, carrera que dejó de celebrarse en el año 2000....pues imaginénse el resto. La última respuesta revela que, además de las drogas que han marcado su vida deportiva, también se chuta otro tipo de euforizantes.
26 enero, 2007
24 enero, 2007
Recordando a Marc Lotz
Los muy buenos lectores de este blog, que saben mucho más de ciclismo que el que esto escribe, recordarán el nombre de Marc Lotz. Si hombre, ese gregario de toda la vida del Rabobank que, con 33 años y toda la vida en el conjunto bancario, pasó con armas y bagajes al Quick Step. Fue una cosa extraña. Casi tanto como que Van Petegem, toda una vida batallando contra Lefevre y todas sus encarnaciones, vaya a correr este 2007 con el Quick Step. En fin.
Marc Lotz. Era un corredor que empezaba fuerte las temporadas (de ahí data su última victoria, el Tour de Haut Var de febrero de 2004), con puestos entre los 20 primeros en San Remo y en su querida Amstel (es holandés y encima de Valkenbourg), pero que nunca pasó del puesto 300º en la antigua clasificación UCI. Ficha por el Quick Step y se marca una sensacional Flecha del Brabante, donde solo la presencia de Freire le hizo acabar segundo. En mayo da positivo por EPO, cuando estaba "preparando" el Tour.
Con 33 años, positivo por EPO y cuando cambia a un equipo donde "solo" le tocaba hacer de gregario, lo que había hecho toda su vida. Es uno de los pocos corredores que no lo ha negado, como Camenzind: sí, me chutaba para andar más porque me exigían más. Aprovechó su avanzada edad para retirarse, igual que el suizo. Ahora acaba de fichar por un equipo de cuarta división. En el equipo no dijeron ni mú ni le asistieron en ningún momento. Y resulta que el enésimo escándalo del ciclismo es que el Het Laatste Nieuws, uno de los periódicos que más espacio dedican al ciclismo en ese parque del monocultivo que es Flandes, está publicando una serie de artículos con frases como "Lefevre: 30 años de dopaje".
Hasta ahora, el equipo era intocable. La selección nacional flamenca de manera oficiosa. Ni siquiera cuando un diputado belga dijo tener datos del dopaje de Boonen y otras estrellas nadie movió la ceja. El diputado tuvo que recular. Ahora empiezan los martirios: Museeuw, relaciones públicas del equipo, ha reconocido en una rueda de prensa que hubiese firmado la finada Rocío Jurado (a estos niveles se mueve el ciclismo en Bélgica) que "no jugó limpio" en los últimos años de su carrera. Y todo por quitarle presión a su camello y mentor. Los medios recuerdan como el Mapei se fue en bloque de los 3 Días de la Panne de 1999, tras encontrar la policía un cargamento de anfetas y jeringas. Como Gianni Bugno, ya retirado, dejaba su dirección de Italia para recibir paquetes llenos de droga.
Reconozco que el movimiento me ha dejado perplejo. Que el muy lacayo, servil y racista periódico flamenco sea el propelente del enésimo incendio en el ciclismo es muy raro. Es cierto que Lefevre no tiene muchos amigos, y más desde que ha atacado -como se merece- a El Gordo o Ivan Basso, eso por no hablar de su protagonismo al frente de la Asociación de Equipos, pero si los tiene es precisamente en su patria chica. Y tampoco creo en que los periodistas que llevan el caso se muevan por intereses limpios e inmaculados. Perplejo, ya les digo, pero no tanto por lo que se publica, si no por quien lo publica. Entretanto, el circense Urraburu se alegra muchísimo y habla de "hipocresía en el ciclismo". Un testimonio directo, sin duda.
Entre tanto, el goteo propio de un periódico sensacionalista y para consumo de un público racista y viscoso nos deja confirmaciones de algo que ya dije por aquí cuando salieron los primeros papeles de la Operación Puerto: los ciclistas son tontos. Si, muy tontos. Entonces era porque gran parte de los mejores ciclistas del mundo confiaban su preparación al mismo médico, que podía manejar a su antojo quien ganaba y quien perdía, como hizo con Casero/Sevilla en la Vuelta 2001. Ahora es por este impresionante testimonio de Marc Lotz: aceptaba el dopaje de Lefevre, pero en el contrato que firmó había una claúsula que dejaba en papel mojado el documento en caso de dopaje. ¿Y en que se diferencia de Heras? Bueno, pues que Heras nunca lo ha confesado. Le despidieron por la misma claúsula, pero si reconoces que te dopas...¡denúncialo todo! ¡150 años de movimiento obrero para esto!
***
Guipúzcoa no es el País Vasco, pero el que paga manda. Guipúzcoa es el País Vasco, en el sentido que cualquier alavés o bilbaino entiende. Especialmente la Guipúzcoa interior. Y que conste que estoy hablando de ciclismo. En la peor época de todos los tiempos para el ciclismo de este territorio foral, la Diputación mete 1,8 millones de euros. Un pastón. Preparense a ver guipuzcoanos-paquete en el buque de Madariaga. Quiero decir: aún más paquetes que el usurbiltarra hermanísimo de Haimar Zubeldia. O el propio Haimar. Impagable esta última frase. No se la pierdan, por favor.
Marc Lotz. Era un corredor que empezaba fuerte las temporadas (de ahí data su última victoria, el Tour de Haut Var de febrero de 2004), con puestos entre los 20 primeros en San Remo y en su querida Amstel (es holandés y encima de Valkenbourg), pero que nunca pasó del puesto 300º en la antigua clasificación UCI. Ficha por el Quick Step y se marca una sensacional Flecha del Brabante, donde solo la presencia de Freire le hizo acabar segundo. En mayo da positivo por EPO, cuando estaba "preparando" el Tour.
Con 33 años, positivo por EPO y cuando cambia a un equipo donde "solo" le tocaba hacer de gregario, lo que había hecho toda su vida. Es uno de los pocos corredores que no lo ha negado, como Camenzind: sí, me chutaba para andar más porque me exigían más. Aprovechó su avanzada edad para retirarse, igual que el suizo. Ahora acaba de fichar por un equipo de cuarta división. En el equipo no dijeron ni mú ni le asistieron en ningún momento. Y resulta que el enésimo escándalo del ciclismo es que el Het Laatste Nieuws, uno de los periódicos que más espacio dedican al ciclismo en ese parque del monocultivo que es Flandes, está publicando una serie de artículos con frases como "Lefevre: 30 años de dopaje".
Hasta ahora, el equipo era intocable. La selección nacional flamenca de manera oficiosa. Ni siquiera cuando un diputado belga dijo tener datos del dopaje de Boonen y otras estrellas nadie movió la ceja. El diputado tuvo que recular. Ahora empiezan los martirios: Museeuw, relaciones públicas del equipo, ha reconocido en una rueda de prensa que hubiese firmado la finada Rocío Jurado (a estos niveles se mueve el ciclismo en Bélgica) que "no jugó limpio" en los últimos años de su carrera. Y todo por quitarle presión a su camello y mentor. Los medios recuerdan como el Mapei se fue en bloque de los 3 Días de la Panne de 1999, tras encontrar la policía un cargamento de anfetas y jeringas. Como Gianni Bugno, ya retirado, dejaba su dirección de Italia para recibir paquetes llenos de droga.
Reconozco que el movimiento me ha dejado perplejo. Que el muy lacayo, servil y racista periódico flamenco sea el propelente del enésimo incendio en el ciclismo es muy raro. Es cierto que Lefevre no tiene muchos amigos, y más desde que ha atacado -como se merece- a El Gordo o Ivan Basso, eso por no hablar de su protagonismo al frente de la Asociación de Equipos, pero si los tiene es precisamente en su patria chica. Y tampoco creo en que los periodistas que llevan el caso se muevan por intereses limpios e inmaculados. Perplejo, ya les digo, pero no tanto por lo que se publica, si no por quien lo publica. Entretanto, el circense Urraburu se alegra muchísimo y habla de "hipocresía en el ciclismo". Un testimonio directo, sin duda.
Entre tanto, el goteo propio de un periódico sensacionalista y para consumo de un público racista y viscoso nos deja confirmaciones de algo que ya dije por aquí cuando salieron los primeros papeles de la Operación Puerto: los ciclistas son tontos. Si, muy tontos. Entonces era porque gran parte de los mejores ciclistas del mundo confiaban su preparación al mismo médico, que podía manejar a su antojo quien ganaba y quien perdía, como hizo con Casero/Sevilla en la Vuelta 2001. Ahora es por este impresionante testimonio de Marc Lotz: aceptaba el dopaje de Lefevre, pero en el contrato que firmó había una claúsula que dejaba en papel mojado el documento en caso de dopaje. ¿Y en que se diferencia de Heras? Bueno, pues que Heras nunca lo ha confesado. Le despidieron por la misma claúsula, pero si reconoces que te dopas...¡denúncialo todo! ¡150 años de movimiento obrero para esto!
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Guipúzcoa no es el País Vasco, pero el que paga manda. Guipúzcoa es el País Vasco, en el sentido que cualquier alavés o bilbaino entiende. Especialmente la Guipúzcoa interior. Y que conste que estoy hablando de ciclismo. En la peor época de todos los tiempos para el ciclismo de este territorio foral, la Diputación mete 1,8 millones de euros. Un pastón. Preparense a ver guipuzcoanos-paquete en el buque de Madariaga. Quiero decir: aún más paquetes que el usurbiltarra hermanísimo de Haimar Zubeldia. O el propio Haimar. Impagable esta última frase. No se la pierdan, por favor.
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22 enero, 2007
Cachondeo generalizado
Lo siento. Al escribir este titular me he sentido como lo que un lector me reprochaba hace unos meses: ser un Jaime Capmany, un Ussia del insulto y el chascarrillo. Pero ¿qué se les ocurre poner a ustedes después de leer la inclasificable pieza que hoy despacha Arribas? Confieso que, de entrada, me voy a guardar el titular para usos personales ("Hay que ganar credibilidad, pero ¿cómo?"), que vale tanto para el periodista como para los dos protagonistas, Pereiro y Valverde.
Comenta Arribas que, tras la presentación del Caisse d´Epargne en París el pasado martes, le gastaron una broma. Incauto antes de coger el cebo, llegó a considerar la opción de que le esperaban porque "se siente halagado; en el fondo, le valoran; es importante, patatín, patatán...". Ya ven. Qué grandes desastres ha traído para el mundo del periodismo -en cualquier ámbito- cuando los periodistas confraternizan y francachalean con los protagonistas. En fin, ese es otro discurso, pero ya se quedan con la tónica del artículo, ¿verdad?. "Hay que ganar credibilidad". ¿Cómo? Pues diciendo que te sientes halagado porque los ciclistas te esperen, como si fueses de la familia. Brillante. ¡Cúanta credibilidad ganada!.
La verdad es casi imposible extractar lo dicho por Pereiro&Valverde: cada frase hace subir el precio del pan. El gallego diciendo que "no fue un Tour tan loco" (su escapada de media hora, el día de DisneyLandis, que perdiese en los Pirineos 28´, Gontchar ganando las dos cronos, ocho -creo- cambios de líder), Valverde diciendo "aunque parezca un veterano" tiene mucho que aprender (ya se vió el día de Granada o su adecuada elección de piñón para el sprint de Salzburgo: la veteranía es un grado) o esta lindeza: "la Amstel, en la que he estado bien, pero no he tenido oportunidades de ganarla". ¿Se referirá a su extraña crisis de hambre de la pasada edición o a como se riló en 2005 cuando llegaba con los favoritos?
Esas son las respuestas a la primera pregunta, genérica y espartana tal que "El Tour. La gran cita anual". Agarrense bien, que la segunda pregunta es "Cómo seguir como si nada hubiese pasado", que en boca de Valverde es como Julio Iglesias cantando "Me va, me va, me va": un testimonio personal. Y Arribas sabe bien de que habla, porque se puede aplicar la frase perfectamente. Como epitafio de credibilidad. Miren como lo de cachondeo generalizado no va tan desencaminado. Pereiro: "El problema del ciclismo no es el dopaje. El problema del ciclismo es la guerra que tienen entre todo el mundo (...) se están aprovechando de cualquier problemilla que hay para sacarlo a la luz y hacerle daño al otro", pero lo mejor lo suelta Valverde hablando de sí mismo: "en las reuniones de afectados por la Operación Puerto se diga que por qué no estoy yo en las listas" o esta perla inclasificable "hay que seguir preparándose y que se vaya arreglando todo lo mejor posible". Ya. ¿Pero qué tipo de preparación? "nosotros seguimos entrenándonos igual que se hacía antiguamente, seguimos trabajando igual". Claro.
Y la última pregunta es "¿Hay vida fuera del Caisse d´Epargne?": según Valverde, una de las razones por las que se ha quedado es "el tema de los compañeros, que con todos me ha ido muy bien. Con todos, todos...". Qué insistencia. Que le pregunten a Jaimerena la tibia reacción de los integrantes que disputaron la Paris-Tours, la última carrera en el equipo de su amiguísimo Jose Cayetano Juliá. Y el clima de fiesta y despedida con el que le agraciaron. Se lleva tan bien con "todos, todos..." que le han tenido que traer a los murcianicos L.L Sánchez y J.J. Rojas para que se encuentre más arropado, habida cuenta del despido de Juliá y el ostracismo del arcón congelador de Tino Zaballa, "su mejor amigo en el pelotón". Qué hipocresía. Que gran mentira.
Me reservo para el final una transcripción íntegra de una respuesta de Valverde. Aquí va. "Y a mí, últimamente me están sacando como si estuviera implicado en la Operación Puerto. No hacen más que repetir lo mismo. Que si Eufemiano [Fuentes] había escrito "Valverde" en una tarjeta de visita junto a otros nombres... Yo he tenido relación con Eufemiano cuando estaba en el Comunidad Valenciana y él era el médico del equipo. Y nada más. En 2005, cuando me vine al Caisse d'Épargne, dejé de verle. Así de claro."
Cristo Bendito, si hasta le llama "Eufemiano" y el periodista tiene que acotar con lo de "(Fuentes)"....
***
Si sale rana, nadie se acordará de el. Si sale bueno, todo el mundo alabará a Matxín y su intuición y audacia. Ojito: el año pasado, con 19 años, hizo 58 días de competición, incluyendo París-Niza y Ardenas. ¿Que hacía Pozzato con esa edad? Corría la Vuelta a Rodas, el Circuito de Minas francés y esas cosas. Arkaitz Durán. Quédense con el nombre. A lo mejor lo vemos en las noticias de ciclismo o en las de sucesos.
***
"Había firmado cuatro y me equivoqué". Coño Contador, que vas a matar a disgustos a Manolón.
***
"Saunier Duval es un equipo parido a la italiana". ¡Que me de tiempo a confesarme!
***
Me gusta su lenguaje directo, muy madrileño. Me gusta lo de "los ciclistas somos todos unos envidiosos". No me gusta tanto que haya aprovechado para dejar bien claro como se llama su perro.
***
(Actualización de la 09:53) No se entiende muy bien lo que dice. Contribuye bastante fórmulas de periodismo rancio tipo "una de las voces" y el constreñimiento de trabajar para un medio serio. Al menos el primer párrafo se desmarca la tendencia generalizada. Carabias tiene mucho más que ganar como voz disonante que apagada entre el coro monotemático. Pero por si acaso lo dice con la voz muy baja y sin decir nada. Sin entenderse nada. "¡Que viene el lobo!", que si el viento cambia de dirección...hay más metáforas que en un diálogo filosófico griego. ¿Será que todos están encadenados de cara a la pared de la caverna y sólo ven las sombras de los esclavos?
Comenta Arribas que, tras la presentación del Caisse d´Epargne en París el pasado martes, le gastaron una broma. Incauto antes de coger el cebo, llegó a considerar la opción de que le esperaban porque "se siente halagado; en el fondo, le valoran; es importante, patatín, patatán...". Ya ven. Qué grandes desastres ha traído para el mundo del periodismo -en cualquier ámbito- cuando los periodistas confraternizan y francachalean con los protagonistas. En fin, ese es otro discurso, pero ya se quedan con la tónica del artículo, ¿verdad?. "Hay que ganar credibilidad". ¿Cómo? Pues diciendo que te sientes halagado porque los ciclistas te esperen, como si fueses de la familia. Brillante. ¡Cúanta credibilidad ganada!.
La verdad es casi imposible extractar lo dicho por Pereiro&Valverde: cada frase hace subir el precio del pan. El gallego diciendo que "no fue un Tour tan loco" (su escapada de media hora, el día de DisneyLandis, que perdiese en los Pirineos 28´, Gontchar ganando las dos cronos, ocho -creo- cambios de líder), Valverde diciendo "aunque parezca un veterano" tiene mucho que aprender (ya se vió el día de Granada o su adecuada elección de piñón para el sprint de Salzburgo: la veteranía es un grado) o esta lindeza: "la Amstel, en la que he estado bien, pero no he tenido oportunidades de ganarla". ¿Se referirá a su extraña crisis de hambre de la pasada edición o a como se riló en 2005 cuando llegaba con los favoritos?
Esas son las respuestas a la primera pregunta, genérica y espartana tal que "El Tour. La gran cita anual". Agarrense bien, que la segunda pregunta es "Cómo seguir como si nada hubiese pasado", que en boca de Valverde es como Julio Iglesias cantando "Me va, me va, me va": un testimonio personal. Y Arribas sabe bien de que habla, porque se puede aplicar la frase perfectamente. Como epitafio de credibilidad. Miren como lo de cachondeo generalizado no va tan desencaminado. Pereiro: "El problema del ciclismo no es el dopaje. El problema del ciclismo es la guerra que tienen entre todo el mundo (...) se están aprovechando de cualquier problemilla que hay para sacarlo a la luz y hacerle daño al otro", pero lo mejor lo suelta Valverde hablando de sí mismo: "en las reuniones de afectados por la Operación Puerto se diga que por qué no estoy yo en las listas" o esta perla inclasificable "hay que seguir preparándose y que se vaya arreglando todo lo mejor posible". Ya. ¿Pero qué tipo de preparación? "nosotros seguimos entrenándonos igual que se hacía antiguamente, seguimos trabajando igual". Claro.
Y la última pregunta es "¿Hay vida fuera del Caisse d´Epargne?": según Valverde, una de las razones por las que se ha quedado es "el tema de los compañeros, que con todos me ha ido muy bien. Con todos, todos...". Qué insistencia. Que le pregunten a Jaimerena la tibia reacción de los integrantes que disputaron la Paris-Tours, la última carrera en el equipo de su amiguísimo Jose Cayetano Juliá. Y el clima de fiesta y despedida con el que le agraciaron. Se lleva tan bien con "todos, todos..." que le han tenido que traer a los murcianicos L.L Sánchez y J.J. Rojas para que se encuentre más arropado, habida cuenta del despido de Juliá y el ostracismo del arcón congelador de Tino Zaballa, "su mejor amigo en el pelotón". Qué hipocresía. Que gran mentira.
Me reservo para el final una transcripción íntegra de una respuesta de Valverde. Aquí va. "Y a mí, últimamente me están sacando como si estuviera implicado en la Operación Puerto. No hacen más que repetir lo mismo. Que si Eufemiano [Fuentes] había escrito "Valverde" en una tarjeta de visita junto a otros nombres... Yo he tenido relación con Eufemiano cuando estaba en el Comunidad Valenciana y él era el médico del equipo. Y nada más. En 2005, cuando me vine al Caisse d'Épargne, dejé de verle. Así de claro."
Cristo Bendito, si hasta le llama "Eufemiano" y el periodista tiene que acotar con lo de "(Fuentes)"....
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Si sale rana, nadie se acordará de el. Si sale bueno, todo el mundo alabará a Matxín y su intuición y audacia. Ojito: el año pasado, con 19 años, hizo 58 días de competición, incluyendo París-Niza y Ardenas. ¿Que hacía Pozzato con esa edad? Corría la Vuelta a Rodas, el Circuito de Minas francés y esas cosas. Arkaitz Durán. Quédense con el nombre. A lo mejor lo vemos en las noticias de ciclismo o en las de sucesos.
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"Había firmado cuatro y me equivoqué". Coño Contador, que vas a matar a disgustos a Manolón.
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"Saunier Duval es un equipo parido a la italiana". ¡Que me de tiempo a confesarme!
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Me gusta su lenguaje directo, muy madrileño. Me gusta lo de "los ciclistas somos todos unos envidiosos". No me gusta tanto que haya aprovechado para dejar bien claro como se llama su perro.
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(Actualización de la 09:53) No se entiende muy bien lo que dice. Contribuye bastante fórmulas de periodismo rancio tipo "una de las voces" y el constreñimiento de trabajar para un medio serio. Al menos el primer párrafo se desmarca la tendencia generalizada. Carabias tiene mucho más que ganar como voz disonante que apagada entre el coro monotemático. Pero por si acaso lo dice con la voz muy baja y sin decir nada. Sin entenderse nada. "¡Que viene el lobo!", que si el viento cambia de dirección...hay más metáforas que en un diálogo filosófico griego. ¿Será que todos están encadenados de cara a la pared de la caverna y sólo ven las sombras de los esclavos?
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19 enero, 2007
Otro asmático en el pelotón
Cada uno tiene su teoría. El Bizco(nde) de la Medianoche, que el Tour no quiere pagar el premio y por eso está buscando desesperadamente dejar en blanco la edición 2006. Como si J-M Leblanc aflojase la güita de su propio bolsillo y no fuese Credit Lyonnais quien pagase; el interfecto, que tiene asma y que la dosis es bajísima; el que esto escribe, que Pereiro iba, va e irá tan puesto como los que más.
¿De que estoy hablando? Ayer Le Monde, otrora prestigioso periódico, publicaba a media tarde que Pereiro "había resultado dos veces positivo" en la pasado Tour de Francia. La sustancia es el muy común Salbutamol, un broncodilatador. Un enmascarador. Igual que Perico Delgado o Igor González de Galdeano, otros dos españoles que han lucido el amarillo, el gallego ha dado positivo.
No lo niega. Dice que tenía permiso médico de la UCI para usarlo porque, pásmense, es asmático. Como el 40% del pelotón, cifra creciente. Lo de los permisos médicos de la UCI es de coña: ¿sabían ustedes que Cunego tiene, de "forma natural" 53% de hematocrito y le permiten competir así? ¿pero no habíamos quedado que por encima del 50% existen riesgos para la salud? ¿Y cómo dejan competir a gente que es asmática? ¡Qué desalmados estos de la UCI! "El 60% de las justificaciones teraupéticas son para enmascarar dopaje".
Mientras los medios nacionales han dictado un cierren filas en torno a Pereiro (me niego a hacer una revista de prensa, ya saben de que va el percal. Ojo, hay una excepción), nadie cree importante señalar que la Agencia Francesa comunicó a Pereiro hasta en tres ocasiones que le faltaba el certificado médico. Y el gallego hizo de gallego: no sabe, no contesta, "eche cousa do demo". Se hizo el longuis, vamos. Quizás ahora entendamos porque Echávarri no fue a la rueda de prensa en la que Pereiro se autoproclamó ganador del Tour, alegando que "no le había dado tiempo". O el silencio informativo en torno a la evidencia epatante de que Pereiro es Urco, así registrado en el arcón congelador de Eufemiano Fuentes el 4/5/2004.
Miren como guarda la ropa y al mismo tiempo sigue braceando el ínclito Carlos Arribas, que hoy nos deja un suelto de corte médico, donde ni dice ni deja de decir. Muy gallego, vamos. Carabias aprovecha para recordar su exclusiva de Valverde, mientras dice y no dice. Conviene recordar, pues, como trató el periodista de El País la suspensión por dopaje de Aitor González, en fecha tan reciente como el 23 de diciembre de 2006. En un artículo brillante, expuso los hechos y acabó copiando la justificación del TAS, que venía a decir algo así como: un ciclista profesional se expone a riesgos cuando toma sustancias sin prescripción médica; más cuando estas sustancias se llaman Animal Pack; es una falta imperdonable. Pues con la misma espada, se puede decir: un ciclista profesional se expone a riesgos cuando no justifica (y hasta tres veces le fue requerido) un medicamento prescrito; más cuando este medicamento es el Salbutamol; es una falta imperdonable.
¿Se creen ustedes que algún medio español recordará que Pereiro se hizo ciclista compartiendo equipo con Hamilton, Botero, Quique Gutiérrez, Santos González y Santi Pérez? Pues no.
17 enero, 2007
Una atención especial para...
Con casi todos los equipos que cuentan presentados, las concentraciones y todas sus prácticas inconfensables en desarrollo y los últimos fichajes descartados (a no ser que Manolón coloque el bus+2 corredores por ahí), la temporada está a punto de comenzar. Va a ser una temporada clave, no sólo por la futura vigencia del ProTour, francamente en entredicho, sino también por las consecuencias de la Operación Puerto y la reaparición de gran parte de la banda de Eufemiano en otros equipos. Unos continentales, otros ProTour, porque siempre ha habido clases. Y en el ciclismo, más. El único deporte donde todavía se llama al jefe "patrón". Pero vayamos con los auténticos protagonistas, los ciclistas que a su vez también afrontan una temporada clave:
Frank Schleck: el año puede acabar perfectamente como "El año de Schleck". El talento luxemburgués abrió su cuenta el año pasado con una soberbia victoria en la Amstel y no una no menos fantástica victoria en Alpe D´Huez. En 2005 hizo un final de temporada antológico que le valió para auparse al segundo puesto del ProTour y en 2006 ha sido tercero. Hoy por hoy, junto con Piti, es el único corredor que puede combinar con éxito vueltas por etapas y temporada de clásicas. De ahí sus fantásticos dos últimos años. A Bjarne Rijs se le llena la boca hablando de Sastre como líder único (o máximo), pero ya en el Tour del año pasado dejó volar a su pupilo el día de Alpe D´Huez, dejando a Sastre de solanas. Y no les digo en Morzine, donde el del Benelux no dió ni un solo relevo en la farsa de persecución del CSC. Galones de capitán. Ojo con él.
Yaroslav Popovych: el ucraniano tuvo el Tour del año pasado para presentarse como figura y únicamente se llevó una etapa regalada por Freire y el Rabobank. Una etapa donde iba con gasolina súper, como demuestran sus ocho latigazos bajo 40º. Después se fundió. Anteriormente había entrado en una pelea de gallos con el Liberty en la nauseabunda edición de la Vuelta a Castilla-León, en la época pre-O.P, esa en la que L.L Sánchez subía Navacerrada nevando como si fuese un escalador. En el equipo no se deben fiar mucho de él, porque han fichado a Contador, Leipheimer y a Basso. A ver que lugar le queda. A ver en qué corredor se convierte el que llamaban "el Eddy Merckx del Siglo XXI".
Filippo Pozzato: un habitual. El año pasado ganó de una manera inolvidable la San-Remo, casi hace lo propio en Wegelwen y después...hombre, fue tercero en Hamburgo, una etapa en Inglaterra y un km. final de Mundial muy fino, pero siempre por debajo de las expectativas. La renovación de Bettini en Quick Step le ha cerrado el paso a su progresión y emigra como jefe de filas (ya era hora) al Liquigas, un equipo escaldado de la experiencia en 2006 con Paolini en ese rol. Veremos que tal responde. De Pozzato siempre se puede esperar lo mejor y lo peor.
Schumacher: el año pasado debutaba en un equipo grande y, aunque falló en las Ardenas, después ganó como un maestro sendas etapas en el Giro, en la primera y en la tercera semana. Y en agosto-septiembre encadenó EnecoTour y Vuelta a Polonia, dos carreras ProTour. Con todas las salvedades que se quieran, pero dos carreras ProTour. Se le espera en Bélgica, que afrontará con 26 años y en calidad de líder: sería un suicidio que desde Gerolsteiner apostasen por los 35 años de Rebellin, en franca decadencia ya la temporada pasada.
Sinkewitz: el alemán es quizás el corredor más solvente y joven que le ha quedado al T-Mobile. Dispondrá de un equipazo a su disposición. El año pasado hizo muy bien todas las clásicas valonas y después un decente Tour, quizás más recordado por ser el último que aguantó el día de DisneyLandis. Tiene motor, edad (27 años) y entorno para dar un giro a su carrera, demasiado estancada desde su precoz triunfo en la Vuelta a Alemania de 2004.
Nibali/Visconti: los dos jovencísimos italianos ya dieron grandes muestras de su evolución el año pasado. El primero ha dejado el Millran, donde tenía gran recorrido, por el Quick Step. El segundo, con la salida de Garzelli del Liquigas, obtendrá más espacio en el Giro. Temporada clave para saber que tipo de corredores van a ser: si el típico italiano todo promesas, besitos y rosas o un futuro campeón.
J.A Flecha: quizás a muchos le sorprenda este nombre en esta lista de promesas. Quizás no tanto si tenemos en cuenta que el insufrible catalán lleva sin ganar desde marzo de 2005, en una etapa de la Vuelta a Valencia de 50 kms. El año pasado, el de su debut en Rabobank, se estancó en su querido 12º puesto en Flandes, fue 4º en Roubaix (7º en meta) y después colocó a Freire en algún sprint del Tour, que es algo muy distinto a lanzar. En agosto fue 2º en Plouay y, como dice el poema, "todo en tí fue naufragio". O hace algo gordo este año o en el Rabobank buscan otro corredor para las clásicas de pavé.
Gómez Marchante: el año pasado ganó de manera soberbia País Vasco, desapareció en Suiza cuando más lo necesitaba Koldo Gil y en la Vuelta estuvo siempre delante para ser 5º final. Este año tiene que obtener alguna victoria internacional, pero su calendario parece apuntar a la Vuelta y el Tour lo hará de trámite. Vamos, como este año. Veremos si saca algún conejo de su desconocida chistera, esa que le hace ganar cronos.
Menchov: Parecía que llegaba bien al Tour (soberbio triunfo en el Ventoux durante la Dauphiné), ganó la etapa reina de los Pirineos, todos le daban como favorito...y se acabó diluyendo en un sexto puesto, no obstante todo. En la Vuelta salió por salir y se fue para casa en cuanto pasaron cerca de Pamplona. Aún así, renovado por el Rabobank. A ver que hace este año, tras vendernos Arribas (uno de sus más entusiastas vendedores) que es poco menos que un vegano de la preparación y que le dijo un pimpinelesco "no" a Cecchini.
Nick Nuyens: el eterno gregario, amigo y compañero de borrachera de Boonen se hace mayor y emigra con un supercontrato al Cofidis. Será superjefe en el equipo galo, pero no todo el mundo vale para ser jefe de filas. Miren el caso de Bertagnolli. Y más en un corredor que debe gran parte de sus éxitos al hecho de militar en un superequipo: el año pasado mojó en Kuurne y una etapa en la Vuelta a Suiza. Toda una incógnita para el 2007.
Leif Hoste: el belga fue segundo en la crono de Tirreno, segundo en Flandes y segundo oficioso en Roubaix. Un malentendido con Hincapié en Flandes desató la chispa y desde abril se fue a buscar otro equipo. No recuerdo cual, pero habrá que ver que tal rinde fuera del superambiente y las supertécnicas del Discovery. Y si no, a recordar quien narices era Leif Hoste antes de pasar por los programas de mejora del rendimiento deportivo de los americanos.
Benjamin Noval: ¿alguien se acuerda de él? Si hombre, el asturianín que en su primer Tour subía puertos de primera a 24 km/h, poniendo en fila india al pelotón. Algo le debió sentar mal de la Operación Puerto: abandonó en el Tour (en los siete años anteriores ningún corredor del UsPostal/Discovery había abandonado por causas no traumáticas) y desde entonces anda desaparecido, suponemos que en su Riosa natal. O en alguna clínica. A saber. No se ni por qué lo pongo aquí. Supongo que intuyo que, de una u otra forma, acabará siendo noticia.
Y bueno, ya va un post kilométrico. Por supuesto que hay muchos otros corredores: ese Stijn Devolver que hizo 11º en la Vuelta, a ver si Phillipe Gilbert da la campanada de una vez, Samuel Sánchez (en general, todo el Eukaltel), mi querido Ballan...pero, habida cuenta del título del post y la trayectoria del blog, mi atención especial, como no, irá dedicada a todos los implicados en la Operación Puerto. Ellos si que tienen que demostrar de que pasta están hechos: Valverde, Pereiro-Urco, Contador, Basso, el mudo Zaballa, Caruso en el Lampre (junto con Baldato, que tiene 38 años en cada pierna: el fichaje más sorprendente del año), el ultradopado Kashechkin...en fin. ¡Vaya añito!.
Frank Schleck: el año puede acabar perfectamente como "El año de Schleck". El talento luxemburgués abrió su cuenta el año pasado con una soberbia victoria en la Amstel y no una no menos fantástica victoria en Alpe D´Huez. En 2005 hizo un final de temporada antológico que le valió para auparse al segundo puesto del ProTour y en 2006 ha sido tercero. Hoy por hoy, junto con Piti, es el único corredor que puede combinar con éxito vueltas por etapas y temporada de clásicas. De ahí sus fantásticos dos últimos años. A Bjarne Rijs se le llena la boca hablando de Sastre como líder único (o máximo), pero ya en el Tour del año pasado dejó volar a su pupilo el día de Alpe D´Huez, dejando a Sastre de solanas. Y no les digo en Morzine, donde el del Benelux no dió ni un solo relevo en la farsa de persecución del CSC. Galones de capitán. Ojo con él.
Yaroslav Popovych: el ucraniano tuvo el Tour del año pasado para presentarse como figura y únicamente se llevó una etapa regalada por Freire y el Rabobank. Una etapa donde iba con gasolina súper, como demuestran sus ocho latigazos bajo 40º. Después se fundió. Anteriormente había entrado en una pelea de gallos con el Liberty en la nauseabunda edición de la Vuelta a Castilla-León, en la época pre-O.P, esa en la que L.L Sánchez subía Navacerrada nevando como si fuese un escalador. En el equipo no se deben fiar mucho de él, porque han fichado a Contador, Leipheimer y a Basso. A ver que lugar le queda. A ver en qué corredor se convierte el que llamaban "el Eddy Merckx del Siglo XXI".
Filippo Pozzato: un habitual. El año pasado ganó de una manera inolvidable la San-Remo, casi hace lo propio en Wegelwen y después...hombre, fue tercero en Hamburgo, una etapa en Inglaterra y un km. final de Mundial muy fino, pero siempre por debajo de las expectativas. La renovación de Bettini en Quick Step le ha cerrado el paso a su progresión y emigra como jefe de filas (ya era hora) al Liquigas, un equipo escaldado de la experiencia en 2006 con Paolini en ese rol. Veremos que tal responde. De Pozzato siempre se puede esperar lo mejor y lo peor.
Schumacher: el año pasado debutaba en un equipo grande y, aunque falló en las Ardenas, después ganó como un maestro sendas etapas en el Giro, en la primera y en la tercera semana. Y en agosto-septiembre encadenó EnecoTour y Vuelta a Polonia, dos carreras ProTour. Con todas las salvedades que se quieran, pero dos carreras ProTour. Se le espera en Bélgica, que afrontará con 26 años y en calidad de líder: sería un suicidio que desde Gerolsteiner apostasen por los 35 años de Rebellin, en franca decadencia ya la temporada pasada.
Sinkewitz: el alemán es quizás el corredor más solvente y joven que le ha quedado al T-Mobile. Dispondrá de un equipazo a su disposición. El año pasado hizo muy bien todas las clásicas valonas y después un decente Tour, quizás más recordado por ser el último que aguantó el día de DisneyLandis. Tiene motor, edad (27 años) y entorno para dar un giro a su carrera, demasiado estancada desde su precoz triunfo en la Vuelta a Alemania de 2004.
Nibali/Visconti: los dos jovencísimos italianos ya dieron grandes muestras de su evolución el año pasado. El primero ha dejado el Millran, donde tenía gran recorrido, por el Quick Step. El segundo, con la salida de Garzelli del Liquigas, obtendrá más espacio en el Giro. Temporada clave para saber que tipo de corredores van a ser: si el típico italiano todo promesas, besitos y rosas o un futuro campeón.
J.A Flecha: quizás a muchos le sorprenda este nombre en esta lista de promesas. Quizás no tanto si tenemos en cuenta que el insufrible catalán lleva sin ganar desde marzo de 2005, en una etapa de la Vuelta a Valencia de 50 kms. El año pasado, el de su debut en Rabobank, se estancó en su querido 12º puesto en Flandes, fue 4º en Roubaix (7º en meta) y después colocó a Freire en algún sprint del Tour, que es algo muy distinto a lanzar. En agosto fue 2º en Plouay y, como dice el poema, "todo en tí fue naufragio". O hace algo gordo este año o en el Rabobank buscan otro corredor para las clásicas de pavé.
Gómez Marchante: el año pasado ganó de manera soberbia País Vasco, desapareció en Suiza cuando más lo necesitaba Koldo Gil y en la Vuelta estuvo siempre delante para ser 5º final. Este año tiene que obtener alguna victoria internacional, pero su calendario parece apuntar a la Vuelta y el Tour lo hará de trámite. Vamos, como este año. Veremos si saca algún conejo de su desconocida chistera, esa que le hace ganar cronos.
Menchov: Parecía que llegaba bien al Tour (soberbio triunfo en el Ventoux durante la Dauphiné), ganó la etapa reina de los Pirineos, todos le daban como favorito...y se acabó diluyendo en un sexto puesto, no obstante todo. En la Vuelta salió por salir y se fue para casa en cuanto pasaron cerca de Pamplona. Aún así, renovado por el Rabobank. A ver que hace este año, tras vendernos Arribas (uno de sus más entusiastas vendedores) que es poco menos que un vegano de la preparación y que le dijo un pimpinelesco "no" a Cecchini.
Nick Nuyens: el eterno gregario, amigo y compañero de borrachera de Boonen se hace mayor y emigra con un supercontrato al Cofidis. Será superjefe en el equipo galo, pero no todo el mundo vale para ser jefe de filas. Miren el caso de Bertagnolli. Y más en un corredor que debe gran parte de sus éxitos al hecho de militar en un superequipo: el año pasado mojó en Kuurne y una etapa en la Vuelta a Suiza. Toda una incógnita para el 2007.
Leif Hoste: el belga fue segundo en la crono de Tirreno, segundo en Flandes y segundo oficioso en Roubaix. Un malentendido con Hincapié en Flandes desató la chispa y desde abril se fue a buscar otro equipo. No recuerdo cual, pero habrá que ver que tal rinde fuera del superambiente y las supertécnicas del Discovery. Y si no, a recordar quien narices era Leif Hoste antes de pasar por los programas de mejora del rendimiento deportivo de los americanos.
Benjamin Noval: ¿alguien se acuerda de él? Si hombre, el asturianín que en su primer Tour subía puertos de primera a 24 km/h, poniendo en fila india al pelotón. Algo le debió sentar mal de la Operación Puerto: abandonó en el Tour (en los siete años anteriores ningún corredor del UsPostal/Discovery había abandonado por causas no traumáticas) y desde entonces anda desaparecido, suponemos que en su Riosa natal. O en alguna clínica. A saber. No se ni por qué lo pongo aquí. Supongo que intuyo que, de una u otra forma, acabará siendo noticia.
Y bueno, ya va un post kilométrico. Por supuesto que hay muchos otros corredores: ese Stijn Devolver que hizo 11º en la Vuelta, a ver si Phillipe Gilbert da la campanada de una vez, Samuel Sánchez (en general, todo el Eukaltel), mi querido Ballan...pero, habida cuenta del título del post y la trayectoria del blog, mi atención especial, como no, irá dedicada a todos los implicados en la Operación Puerto. Ellos si que tienen que demostrar de que pasta están hechos: Valverde, Pereiro-Urco, Contador, Basso, el mudo Zaballa, Caruso en el Lampre (junto con Baldato, que tiene 38 años en cada pierna: el fichaje más sorprendente del año), el ultradopado Kashechkin...en fin. ¡Vaya añito!.
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ciclismo
16 enero, 2007
Encantado de conocerse
Que sepan ustedes que el Euskaltel, al igual que el resto de equipos de su categoría, se encuentra desde hace varios días concentrado. En concreto en Alfax del Pi, recoleta localidad alicantina. Las fanfarrias y los clarinetes suenan en la prensa propia, ávida de esperanza al mismo tiempo que citan el elenco de médicos. Hablan incluso de "nueva piel", como si el equipo fuese un reptil venenoso que muda de indumentaria. Que malas son las metáforas cuando se cojen al vuelo.
Sirva de ejemplo al entrevista al líder in pectore de la formación, el encantado de conocerse Samuel Sánchez. Es cierto que está más comedido que en otras ocasiones, pero tampoco sin exagerar, ¡eh!. Ya ven. Pasó de rumiar su decepción en El Larguero del día del Mundial ("creo que Valverde se equivocó") a besarse a sí mismo: "les dejé el Campeonato en bandeja a los tres que venían detrás. Llegué supersatisfecho a casa.". Empero, lo mejor está por llegar. Urruburu le pregunta: "Es un corredor al que no le gusta el Tour, ¿por qué?". Y Samuel Sánchez no lo niega. Le podría decir que la última vez que disputó el Tour, con 25 primaveras, fue en 2003, cuando todo su equipo iba con sangre de varios mamíferos en el cuerpo. Y ya se sabe (Basso y el Stelvio lo recuerdan), cuando no llevas una sangre tuya, a veces el cuerpo se rebela: el asturianín pasó con los mejores (y era el más joven) el puerto antes de meta de la última etapa que acabó, para después entrar fuera de control en Alpe D´Huez, el día de su compañero Mayo.
Al final de la entrevista se va calentando, porque es un personaje al que se le calienta la boca. Más si tiene al otro lado a un periodista pelota, que le pregunta por la sempiterna madre muerta y esas cosas tan del gusto. "Nadie me ha regalado nada, como a casi todos. Las cosas cuestan. Mis victorias han sido siempre trabajadas, emocionantes. Se ve en la forma de ganar."Lo dice un corredor que, a falta de victoria en profesionales hacía las cuentas de la vieja y se autoadjudicaba como victoria la Subida a Montjuic y una victoria en su querida Oviedo en la que casi aplasta contra las vallas a Ángel Edo. Justamente descalificado, todavía tiene un recuerdo para el evento: "Para mí, mi primer triunfo sigue siendo la etapa de la Vuelta a Asturias que gané y en la que luego me descalificaron". Miren que personaje. Miren que caradura.
-¿Se ve como ganador de una Vuelta a España?
- Me veo luchando por ganarla.
Amén.
***
Una chapuza más en la Operación Puerto. Tiene su lógica, ya que una de las principales pruebas está escrita en una tarjeta de "Marisquerías Rafa".
Sirva de ejemplo al entrevista al líder in pectore de la formación, el encantado de conocerse Samuel Sánchez. Es cierto que está más comedido que en otras ocasiones, pero tampoco sin exagerar, ¡eh!. Ya ven. Pasó de rumiar su decepción en El Larguero del día del Mundial ("creo que Valverde se equivocó") a besarse a sí mismo: "les dejé el Campeonato en bandeja a los tres que venían detrás. Llegué supersatisfecho a casa.". Empero, lo mejor está por llegar. Urruburu le pregunta: "Es un corredor al que no le gusta el Tour, ¿por qué?". Y Samuel Sánchez no lo niega. Le podría decir que la última vez que disputó el Tour, con 25 primaveras, fue en 2003, cuando todo su equipo iba con sangre de varios mamíferos en el cuerpo. Y ya se sabe (Basso y el Stelvio lo recuerdan), cuando no llevas una sangre tuya, a veces el cuerpo se rebela: el asturianín pasó con los mejores (y era el más joven) el puerto antes de meta de la última etapa que acabó, para después entrar fuera de control en Alpe D´Huez, el día de su compañero Mayo.
Al final de la entrevista se va calentando, porque es un personaje al que se le calienta la boca. Más si tiene al otro lado a un periodista pelota, que le pregunta por la sempiterna madre muerta y esas cosas tan del gusto. "Nadie me ha regalado nada, como a casi todos. Las cosas cuestan. Mis victorias han sido siempre trabajadas, emocionantes. Se ve en la forma de ganar."Lo dice un corredor que, a falta de victoria en profesionales hacía las cuentas de la vieja y se autoadjudicaba como victoria la Subida a Montjuic y una victoria en su querida Oviedo en la que casi aplasta contra las vallas a Ángel Edo. Justamente descalificado, todavía tiene un recuerdo para el evento: "Para mí, mi primer triunfo sigue siendo la etapa de la Vuelta a Asturias que gané y en la que luego me descalificaron". Miren que personaje. Miren que caradura.
-¿Se ve como ganador de una Vuelta a España?
- Me veo luchando por ganarla.
Amén.
***
Una chapuza más en la Operación Puerto. Tiene su lógica, ya que una de las principales pruebas está escrita en una tarjeta de "Marisquerías Rafa".
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dopaje
15 enero, 2007
Los amigos de Contador
Cuenta hoy Arribas que Bruyneel, el testaferro de Lance Armstrong, ya ha fichado a Contador. Valiente tontería, como si en algún momento hubiese existido otra opción. Sin ir más lejos, en el número de diciembre de Bicisport ya lo incluían como seguro escudero de su gran Basso, a la par que Allan Davis. Lo importante no es el hecho en sí, sino como lo cuenta el otrora prestigioso periodista.
Arribas, del que todos hemos sido fans en algún momento, vivió la pasada temporada su mayor éxito profesional al mismo tiempo que minaba toda su credibilidad. Vayamos por partes, porque son procesos paralelos. Tuvo la gran valentía de llamar "hipócratas" a todos los ciclistas en el impás entre el 23 de mayo y la semana previa al Tour, casi un mes donde todo el colectivo - o la familia, como se llamaba antes- se hicieron el longuis ante la detención de su médico. Ese Sevilla ganando en Asturias, ese Ullrich, Koldo Gil y Würth en Suiza y...¡que más les voy a contar!. Después destapó en una exclusiva mundial -si, como suena- los primeros papeles de la Operación Puerto.
Por lo que sabemos ahora, fue una filtración selectiva. Señaló con el dedo a los muy implicados o ya sancionados (Hamilton y Heras) y dejó al libre albur a gran parte del resto. Se supone que habrá recibido amenazas. O el desdén de sus compañeros y colegas. Sinceramente, me cuesta imaginar a Xabier G. Luque o Garai simpatizando con Arribas. O ya no. En todo caso, su credibilidad como periodista se ha visto muy seriamente comprometida por su negativa a ver a Valverde, y por su cerrazón en defender a otro apestado como Contador, un diminuto corredor que rivaliza, en cuanto a amigos poderosos, con el mismísimo Intocable.
Fíjense bien en la redacción del artículo de hoy. Que Bruyneel ya le seguía desde junio. Si, ya se dijo cuando la famosa carta del pinteño, esa que olvida Arribas y donde el ciclista no niega que se haya dopado, sólo pide "paz, piedad y perdón". Insiste con lo de el Perico Delgado del Siglo XXI, una definición-boomerang cuya patente exclusiva le pertenece y de dudosa catadura moral. Y nos regala un último párrafo que no me resisto a reproducir íntegramente:
"En las primeras horas de la revelación de los papeles de la Operación Puerto, el nombre de Contador figuró en la lista de implicados, al igual que el de la mayoría de sus compañeros en el Liberty-Astana. Sin embargo, rápidamente, Eufemiano Fuentes, el médico acusado en persona, anunció públicamente que Contador no era uno de sus pacientes. La declaración de Fuentes liberó al madrileño, que pudo seguir corriendo sin problemas legales, negociar con Bruyneel a la espera de que se deshiciera el equipo de Saiz y seguir pensando como ciclista profesional. Y así fue hasta mediados de agosto, cuando sufrió un ataque epiléptico -pequeño recordatorio de una operación cerebral a la que se sometió hace unos años- cuando volvía en bicicleta a su autobús después de una etapa de la Vuelta a Burgos. Desde entonces no compite, pero no ha parado de entrenarse."
¿A qué da pavor este cuento de Caperucita Roja exculpada por el lobo feroz? Sabe perfectamente que Contador estaba tan el ajo como el resto de los Libertys. El mismo publicó un documento, en la previa del Tour, donde se planificaba el dopaje de su héroe y Luis León para el Tour 2005 en función a la droga de Igor González de Galdeano. Y si no, aquí está el informe de la Guardia Civil. Contador aparece en el documento 3 y el interesantísimo documento 31, titulado significativamente "Individualización". Aparece la clave de Contador (AC) y la lista de droga que va a tomar durante ese año, en otro documento de los contenidos entre el 53 al 61 y del 72 a 75. Todo eso no existe. Sólo un pobre chaval al que le dan tiritonas epilépticas y un médico embaucador que en antena dijo "que no conocía a Alberto", pero que después lo tenía en los papeles.
Colofón: no hay nadie ahí fuera. Olvidénse de encontrar un sólo periodista de prensa escrita y "seria" que trate el dopaje en su justa medida. No hay nadie. Estamos solos.
***
No se pierdan el subtítulo. He visto pocas veces unas cuentas de la lechera tan descaradas como estas. Urraburu en estado máximo.
***
Una buena medida de presión para reducir la impunidad del doping. La radiotelevisión alemana, un ente público mucho menos endeudado y mucho más profesional que TVE, ha decidido que no retransmitirá la Vuelta a Alemania si participa uno solo de los corredores implicados en la Operación Puerto. Ya saben: si no hay tele, no hay patrocinadores. Si no hay patrocinadores, no hay equipos ni dinero para grandes contratos capaces de pagar 50.000 euros al año al hemodruida. En todo caso, no hay que olvidar que la medida también funciona para olvidar el gran -y ocultado- escándalo de que la ARD pagase a Ullrich en función de sus resultados. Con dinero público.
***
Algo grotesco.
Arribas, del que todos hemos sido fans en algún momento, vivió la pasada temporada su mayor éxito profesional al mismo tiempo que minaba toda su credibilidad. Vayamos por partes, porque son procesos paralelos. Tuvo la gran valentía de llamar "hipócratas" a todos los ciclistas en el impás entre el 23 de mayo y la semana previa al Tour, casi un mes donde todo el colectivo - o la familia, como se llamaba antes- se hicieron el longuis ante la detención de su médico. Ese Sevilla ganando en Asturias, ese Ullrich, Koldo Gil y Würth en Suiza y...¡que más les voy a contar!. Después destapó en una exclusiva mundial -si, como suena- los primeros papeles de la Operación Puerto.
Por lo que sabemos ahora, fue una filtración selectiva. Señaló con el dedo a los muy implicados o ya sancionados (Hamilton y Heras) y dejó al libre albur a gran parte del resto. Se supone que habrá recibido amenazas. O el desdén de sus compañeros y colegas. Sinceramente, me cuesta imaginar a Xabier G. Luque o Garai simpatizando con Arribas. O ya no. En todo caso, su credibilidad como periodista se ha visto muy seriamente comprometida por su negativa a ver a Valverde, y por su cerrazón en defender a otro apestado como Contador, un diminuto corredor que rivaliza, en cuanto a amigos poderosos, con el mismísimo Intocable.
Fíjense bien en la redacción del artículo de hoy. Que Bruyneel ya le seguía desde junio. Si, ya se dijo cuando la famosa carta del pinteño, esa que olvida Arribas y donde el ciclista no niega que se haya dopado, sólo pide "paz, piedad y perdón". Insiste con lo de el Perico Delgado del Siglo XXI, una definición-boomerang cuya patente exclusiva le pertenece y de dudosa catadura moral. Y nos regala un último párrafo que no me resisto a reproducir íntegramente:
"En las primeras horas de la revelación de los papeles de la Operación Puerto, el nombre de Contador figuró en la lista de implicados, al igual que el de la mayoría de sus compañeros en el Liberty-Astana. Sin embargo, rápidamente, Eufemiano Fuentes, el médico acusado en persona, anunció públicamente que Contador no era uno de sus pacientes. La declaración de Fuentes liberó al madrileño, que pudo seguir corriendo sin problemas legales, negociar con Bruyneel a la espera de que se deshiciera el equipo de Saiz y seguir pensando como ciclista profesional. Y así fue hasta mediados de agosto, cuando sufrió un ataque epiléptico -pequeño recordatorio de una operación cerebral a la que se sometió hace unos años- cuando volvía en bicicleta a su autobús después de una etapa de la Vuelta a Burgos. Desde entonces no compite, pero no ha parado de entrenarse."
¿A qué da pavor este cuento de Caperucita Roja exculpada por el lobo feroz? Sabe perfectamente que Contador estaba tan el ajo como el resto de los Libertys. El mismo publicó un documento, en la previa del Tour, donde se planificaba el dopaje de su héroe y Luis León para el Tour 2005 en función a la droga de Igor González de Galdeano. Y si no, aquí está el informe de la Guardia Civil. Contador aparece en el documento 3 y el interesantísimo documento 31, titulado significativamente "Individualización". Aparece la clave de Contador (AC) y la lista de droga que va a tomar durante ese año, en otro documento de los contenidos entre el 53 al 61 y del 72 a 75. Todo eso no existe. Sólo un pobre chaval al que le dan tiritonas epilépticas y un médico embaucador que en antena dijo "que no conocía a Alberto", pero que después lo tenía en los papeles.
Colofón: no hay nadie ahí fuera. Olvidénse de encontrar un sólo periodista de prensa escrita y "seria" que trate el dopaje en su justa medida. No hay nadie. Estamos solos.
***
No se pierdan el subtítulo. He visto pocas veces unas cuentas de la lechera tan descaradas como estas. Urraburu en estado máximo.
***
Una buena medida de presión para reducir la impunidad del doping. La radiotelevisión alemana, un ente público mucho menos endeudado y mucho más profesional que TVE, ha decidido que no retransmitirá la Vuelta a Alemania si participa uno solo de los corredores implicados en la Operación Puerto. Ya saben: si no hay tele, no hay patrocinadores. Si no hay patrocinadores, no hay equipos ni dinero para grandes contratos capaces de pagar 50.000 euros al año al hemodruida. En todo caso, no hay que olvidar que la medida también funciona para olvidar el gran -y ocultado- escándalo de que la ARD pagase a Ullrich en función de sus resultados. Con dinero público.
***
Algo grotesco.
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Alberto Contador,
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dopaje,
Manolo Saiz
12 enero, 2007
Valverde sigue. Cuestión de genética.
Albricias. Alejandro El Intocable Valverde seguirá en el Caisse d´Epargne. Así lo dice hoy Carlos Arribas, que siempre ha tenido hilo directo con la triada de directores navarros que no se han bajado del coche en los últimos 25 años. Bueno, una vez sí: esta misma semana para ir de rodillas a Murcia a suplicar a su ídolo a la fuga.
Todas las razones que apunta el periodista de El País tienen su peso, desde luego. Principalmente lo de su entorno, y la perspectiva de pasarse un año en un ambiente donde su poco internacional murciano (le llamaban el Torrente en sus años mozos) es de poca utilidad. Sus buenos informes le habrá pasado Oscar Sevilla, el gran amigo que le condujo hasta el altar conduciendo un potente coche en diciembre de 2005. El manchego al menos emigró acompañado del sputnik Paco Lara (¿Qué fue de él? ¿Por qué nadie se lo pregunta?), Valverde ni siquiera eso.
Como era de esperar, la crónica de Arribas presenta la noticia como un triunfo (con las debidas cautelas hasta el próximo martes, día oficial de presentación de la formación navarrofrancesa), sin citar la noticia de ABC ni de pasada. ¡Ay!. Yo les voy a contar el último elemento que ha marrado el posible fichaje de Valverde por los alemanes, fichaje que -no olvidemos- fue promovido por el propio Valverde en fecha tan lejana y conflictiva como final de agosto. Insisto: fue Valverde el que se ofreció, y así salió publicado en El Correo.
El T-Mobile hizo una limpia impresionante tras la Operación Puerto y la desastrosa táctica durante el Tour. Ullrich y Sevilla fuera por méritos propios; Kessler, Klöden, Wesseman y Mazzoleni por su dependencia médica de los hemodruidas italianos; y Ludwig, Valerio Piva y demás gente autodenominada "directores de equipo" por su nula capacidad en la etapa de Montelimar y en Morzine. Y para no volver a caer en lo mismo, fue el primer equipo que dijo que iba a aplicar el control de ADN a todos sus corredores.
Si, el mismo control de ADN al que se opone Alejandro Piti Valverde, porque "sería como salir con los pantalones bajados antes de la carrera". Ya ven. Miedo a la prueba que incrimina a los culpables y exime a los inocentes. Con su negativa Valverde irá a intentar acabar su primer Tour de Francia con un equipo que el año pasado sólo tenía a dos corredores para apoyar a su líder en montaña, Arroyo y Zandio, descartando el ejército de Sinkewitz, Kirchen, Rogers, Guerini o Gontchar o el equipazo para clásicas con Klier y la nueva hornada de alemanes. Ha preferido a Rojas, L.L Sánchez y la veteranía de Chente, además de la bicefalía con Pereiro. Veremos si el tiempo le da la razón o se la quita. De momento en los puros Caisse d´Epargne no hay prueba de ADN ni nada que se le parezca: será que Zaballa no corría en su equipo, ni Mancebo, ni Joaquín Rodríguez, ni Toni Colom...
***
(Actualización de las 12:00). He leído el Marca. Garai dedica su columnilla a cuatro asuntos diferentes y una foto. Este hombre es capaz de amargar la mañana a cualquiera. De entrada, se felicita por el fin del "caso Manzano", y le vuelva a llamar pesetero por "cobrar tres millones de pesetas" de su paso por la máquina de la verdad. Al parecer, le sirvió para pagar a su abogado. No ha habido ningún condenado, pero se olvida que Manzano también va en la acusación particular de la causa abierta contra la banda del hematocrito; después, foto sin pie ni explicación ni nada de la presentación del Millram; los corredores "ceden" su ADN al juez de la Operación Puerto, si se lo pide; la AICP no expulsa al Discovery; y otra tontería más que no me acuerdo.
El Marca. Cada día en su quiosco.
Todas las razones que apunta el periodista de El País tienen su peso, desde luego. Principalmente lo de su entorno, y la perspectiva de pasarse un año en un ambiente donde su poco internacional murciano (le llamaban el Torrente en sus años mozos) es de poca utilidad. Sus buenos informes le habrá pasado Oscar Sevilla, el gran amigo que le condujo hasta el altar conduciendo un potente coche en diciembre de 2005. El manchego al menos emigró acompañado del sputnik Paco Lara (¿Qué fue de él? ¿Por qué nadie se lo pregunta?), Valverde ni siquiera eso.
Como era de esperar, la crónica de Arribas presenta la noticia como un triunfo (con las debidas cautelas hasta el próximo martes, día oficial de presentación de la formación navarrofrancesa), sin citar la noticia de ABC ni de pasada. ¡Ay!. Yo les voy a contar el último elemento que ha marrado el posible fichaje de Valverde por los alemanes, fichaje que -no olvidemos- fue promovido por el propio Valverde en fecha tan lejana y conflictiva como final de agosto. Insisto: fue Valverde el que se ofreció, y así salió publicado en El Correo.
El T-Mobile hizo una limpia impresionante tras la Operación Puerto y la desastrosa táctica durante el Tour. Ullrich y Sevilla fuera por méritos propios; Kessler, Klöden, Wesseman y Mazzoleni por su dependencia médica de los hemodruidas italianos; y Ludwig, Valerio Piva y demás gente autodenominada "directores de equipo" por su nula capacidad en la etapa de Montelimar y en Morzine. Y para no volver a caer en lo mismo, fue el primer equipo que dijo que iba a aplicar el control de ADN a todos sus corredores.
Si, el mismo control de ADN al que se opone Alejandro Piti Valverde, porque "sería como salir con los pantalones bajados antes de la carrera". Ya ven. Miedo a la prueba que incrimina a los culpables y exime a los inocentes. Con su negativa Valverde irá a intentar acabar su primer Tour de Francia con un equipo que el año pasado sólo tenía a dos corredores para apoyar a su líder en montaña, Arroyo y Zandio, descartando el ejército de Sinkewitz, Kirchen, Rogers, Guerini o Gontchar o el equipazo para clásicas con Klier y la nueva hornada de alemanes. Ha preferido a Rojas, L.L Sánchez y la veteranía de Chente, además de la bicefalía con Pereiro. Veremos si el tiempo le da la razón o se la quita. De momento en los puros Caisse d´Epargne no hay prueba de ADN ni nada que se le parezca: será que Zaballa no corría en su equipo, ni Mancebo, ni Joaquín Rodríguez, ni Toni Colom...
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(Actualización de las 12:00). He leído el Marca. Garai dedica su columnilla a cuatro asuntos diferentes y una foto. Este hombre es capaz de amargar la mañana a cualquiera. De entrada, se felicita por el fin del "caso Manzano", y le vuelva a llamar pesetero por "cobrar tres millones de pesetas" de su paso por la máquina de la verdad. Al parecer, le sirvió para pagar a su abogado. No ha habido ningún condenado, pero se olvida que Manzano también va en la acusación particular de la causa abierta contra la banda del hematocrito; después, foto sin pie ni explicación ni nada de la presentación del Millram; los corredores "ceden" su ADN al juez de la Operación Puerto, si se lo pide; la AICP no expulsa al Discovery; y otra tontería más que no me acuerdo.
El Marca. Cada día en su quiosco.
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11 enero, 2007
El escalador del tesón
Si hay un hombre que encarna un equipo, ese es Laiseka. El getxotarra se retiró hace dos días, entre lágrimas y babas compartidas con Madariaga. En un marco institucional, como el mayor honor a un ciclista que ha estado en la Fundación Euskaltel desde su fundación en 1994, que le dió su primera victoria en una grande en la Vuelta de 1999 y su primera (de sus dos únicas victorias, así de triste es el dato) etapa en el Tour en 2001. Así de fácil es hacer una trayectoria de su vida profesional a través de sus cinco únicos triunfos.
La Vuelta llegaba a Abantos y un dolido Jose María Jimenéz dijo "ha ganado un medio español". Curioso. Fue la primera perla que se le ocurrió a ese corredor excesivo en la vida y en las causas de su muerte (sobredosis de cocaína), a pesar de que habían coincidido mucho tiempo en el calendario vasco amateur. Laiseka tiene fama de gruñón. Pero no se merecía eso en un deporte que, todavía, no se parece al fútbol en eso. En 2001 también aprovechó la última etapa en alto para obtener su mejor victoria, entre el delirio de una afición que jamás imaginaría que sería la única victoria de su equipo en los Pirineos. Otras dos etapas en la Vuelta aprovechando su oportunidad para atacar en el momento justo y la victoria en Arrate 2004, vindicándose tras haber sido excluído injustamente del equipo Tour.
Merece la pena detenerse en este punto. Era cuando el Euskaltel tenía ambiciones imperiales. Ivan May. iba con sangre de varios mamíferos en su cuerpo y apuntaba al Tour después de vencer a las leyes de la física en todas las carreras anteriores. La crono por equipos se veía como el único obstáculo en su camino hacía la tiara de laurel. Y el cuerpo enjuto de Roberto Laiseka fue sacrificado, a pesar de ser el único del Euskaltel que es una garantía de presencia. Así les fue. Cayó Jesús Losa y el único que quedó al mismo nivel fue el bravo vizcaíno, el hombre que si llueve no sale a entrenar, el hombre que no sabe lo que es un pulsómetro.
Dice que si no hubiese sido ciclista hubiese sido albañil. Quizás. Lo que es seguro es que hubiese sido una profesión donde hubiese sido valorado por su mayor cualidad: el tesón.
***
Una de propaganda. Autopistas de ocho carriles, "la segunda ciudad más bella del mundo" y un deporte que agoniza, mientras los buitres se reparten los despojos con los chacales. Aquí, el fino y diplomático testimonio de ese poeta que iba para ingeniero y se quedo en Mister Cuarto Puesto. Aquí, el hombre que hubiese ganado este año dice "a cara de perro". Como la suya, mismamente. Mucha cara.
***
El fin de una época. Y no tiene nada que ver con la Operación Puerto.
La Vuelta llegaba a Abantos y un dolido Jose María Jimenéz dijo "ha ganado un medio español". Curioso. Fue la primera perla que se le ocurrió a ese corredor excesivo en la vida y en las causas de su muerte (sobredosis de cocaína), a pesar de que habían coincidido mucho tiempo en el calendario vasco amateur. Laiseka tiene fama de gruñón. Pero no se merecía eso en un deporte que, todavía, no se parece al fútbol en eso. En 2001 también aprovechó la última etapa en alto para obtener su mejor victoria, entre el delirio de una afición que jamás imaginaría que sería la única victoria de su equipo en los Pirineos. Otras dos etapas en la Vuelta aprovechando su oportunidad para atacar en el momento justo y la victoria en Arrate 2004, vindicándose tras haber sido excluído injustamente del equipo Tour.
Merece la pena detenerse en este punto. Era cuando el Euskaltel tenía ambiciones imperiales. Ivan May. iba con sangre de varios mamíferos en su cuerpo y apuntaba al Tour después de vencer a las leyes de la física en todas las carreras anteriores. La crono por equipos se veía como el único obstáculo en su camino hacía la tiara de laurel. Y el cuerpo enjuto de Roberto Laiseka fue sacrificado, a pesar de ser el único del Euskaltel que es una garantía de presencia. Así les fue. Cayó Jesús Losa y el único que quedó al mismo nivel fue el bravo vizcaíno, el hombre que si llueve no sale a entrenar, el hombre que no sabe lo que es un pulsómetro.
Dice que si no hubiese sido ciclista hubiese sido albañil. Quizás. Lo que es seguro es que hubiese sido una profesión donde hubiese sido valorado por su mayor cualidad: el tesón.
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Una de propaganda. Autopistas de ocho carriles, "la segunda ciudad más bella del mundo" y un deporte que agoniza, mientras los buitres se reparten los despojos con los chacales. Aquí, el fino y diplomático testimonio de ese poeta que iba para ingeniero y se quedo en Mister Cuarto Puesto. Aquí, el hombre que hubiese ganado este año dice "a cara de perro". Como la suya, mismamente. Mucha cara.
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El fin de una época. Y no tiene nada que ver con la Operación Puerto.
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10 enero, 2007
Las cloacas del ciclismo
¡Qué cosas! Cuando parecía que la Operación Puerto se estaba agotando, el asunto ha dado un giro inesperado. Inesperado porque, en contra de lo que piensan muchos de los que leen este -cada vez más- modestísimo blog no padezco paranoia. Ni tengo manía ni al ciclismo ni a los ciclistas como colectivo, sólo a los mentirosos compulsivos. Miren el ejemplo de Mancebo, que desde que dijo su famoso "todo es una farsa" hace seis meses no ha merecido ni una sola línea, más que nada porque tampoco ha hecho de injustamente aseteado como, por ejemplo, Koldo Gil o Ivan Basso.
El giro no es, desde luego, la no-noticia de la implicación de Valverde, como ya ha quedado explicado. El giro es el descenso a las cloacas del ciclismo por parte de una revelación que ayer dejó Carabias sin comentar, como el que no quiere la cosa, y que hoy es secundada por todos los medios que reproducen -citando la fuente, para lavarse las manos- la no-noticia. Ojo al párrafo: "La G.C requiso diversas tarjetas de visita personales y de empresa, con anotaciones y teléfonos a bolígrafo, entre las que destaca la del responsable médico de la UCI, Mario Zorzoli. Aparece su dirección, su teléfono laboral, su móvil, su fax." Las cloacas del ciclismo. Un giro inesperado, porque sólo los paranoicos podrían pensar que un tipo de la calaña de Eufemiano tuviese contactos en la UCI más allá de los proporcionados por Manolo El Gordo Saiz.
Por extrapolar un poco, sería como si Pablo Escobar hubiese sido detenido con una tarjeta de Garzón en su bolsillo. O Urruitikoetxea con una de Mayor Oreja, con dedicatoria. No sigo con más ejemplos, pero ya captan la onda, ¿verdad?: son representantes de colectivos antitéticos. Es sinceramente viscoso y repugnante pensar que puedan tener un contacto regular. Y contacto regular es tener "dirección, su teléfono laboral, su móvil, su fax". Pero también soy consciente de que esas cosas suceden en la vida real, nos guste o no. Son las cloacas de la sociedad, del Estado o, en este caso, del ciclismo.
Lo curioso es que a nadie le ha resultado sorprendente que el mayor gurú del dopaje por número y calidad de sus corredores (y por resultados que les hace conseguir) se pasee por ahí con una tarjeta del que debería ser su mayor enemigo, el responsable médico de la UCI. Como a nadie le resultó sorprendente que el Colegio Oficial de Médicos no expulsase a Merino Batres y Fuentes de la asociación colegial por sus prácticas ajenas a toda praxis médica. O que Hacienda no investigue a un tipejo que factura en dinero negro, como mínimo, 500.000 euros al año. O que las primeras informaciones de El País en junio fuesen adornados con la pátina de "los medicamentos provenían de dos organismos públicos como el Ministerio de Defensa y el servicio sanitario andaluz", más que nada para que el redactor jefe pudiese tragar con una noticia de deporte en primera plana en la edición de domingo. Y que todo eso no fuese investigado. O las toneladas de basura médica que factura la Farmacia de Cuatro Caminos en Madrid, también citada en los primeros compases de la Operación.
Sumemos a todo ello la evidente Operación Encubrimiento en que se ha transformado la Operación Puerto para 18.- Valv. (Piti), operación que implica a Guardia Civil, Federación Española, juez instructor, todos los periodistas del gremio y todos los medios de comunicación. Ya lo tienen. Un coctel pestilente de las cloacas del ciclismo, aderezado con buena dosis líquido de las cañerías de las cloacas del Estado y la sociedad. Insisto: Mario Zorzoli no es un cualquiera. Es el máximo responsable médico de la UCI. El que decide los análisis. Las nuevas técnicas. El responsable último de los laboratorios. Y Eufemiano Fuentes tenía contacto regular con el. Saquen ustedes mismos las conclusiones.
***
Otra noticia que no es noticia. Las primas a Eufemiano por resultados conseguidos ya aparecieron publicadas en Interviú antes de las Navidades. Al menos no escurre el bulto con lo de "Ivan May" y envía un piropo con lo de "según observadores avezados de la O.P". Gracias, hombre.
***
Túnel del viento. Antón, Samuel y Zubeldia. Qué gran mentira es todo. Ahí está el artículo del polígrafo y erudito Alejandro Lucía explicando que el tiempo que Landis sacó a Pereiro en la última crono del Tour se debía a la posición encima de la bici. Claro, claro. Ya verán como para justificar los -intuyo- fabulosos éxitos para esta temporada de estos tres figuras (¿ganará Zubeldia algo? ¿atacará?) Pedro Delgado y Carlos de Andrés nos recordarán machaconamente estas sesiones, que juntas no suman más de ocho horas.
El giro no es, desde luego, la no-noticia de la implicación de Valverde, como ya ha quedado explicado. El giro es el descenso a las cloacas del ciclismo por parte de una revelación que ayer dejó Carabias sin comentar, como el que no quiere la cosa, y que hoy es secundada por todos los medios que reproducen -citando la fuente, para lavarse las manos- la no-noticia. Ojo al párrafo: "La G.C requiso diversas tarjetas de visita personales y de empresa, con anotaciones y teléfonos a bolígrafo, entre las que destaca la del responsable médico de la UCI, Mario Zorzoli. Aparece su dirección, su teléfono laboral, su móvil, su fax." Las cloacas del ciclismo. Un giro inesperado, porque sólo los paranoicos podrían pensar que un tipo de la calaña de Eufemiano tuviese contactos en la UCI más allá de los proporcionados por Manolo El Gordo Saiz.
Por extrapolar un poco, sería como si Pablo Escobar hubiese sido detenido con una tarjeta de Garzón en su bolsillo. O Urruitikoetxea con una de Mayor Oreja, con dedicatoria. No sigo con más ejemplos, pero ya captan la onda, ¿verdad?: son representantes de colectivos antitéticos. Es sinceramente viscoso y repugnante pensar que puedan tener un contacto regular. Y contacto regular es tener "dirección, su teléfono laboral, su móvil, su fax". Pero también soy consciente de que esas cosas suceden en la vida real, nos guste o no. Son las cloacas de la sociedad, del Estado o, en este caso, del ciclismo.
Lo curioso es que a nadie le ha resultado sorprendente que el mayor gurú del dopaje por número y calidad de sus corredores (y por resultados que les hace conseguir) se pasee por ahí con una tarjeta del que debería ser su mayor enemigo, el responsable médico de la UCI. Como a nadie le resultó sorprendente que el Colegio Oficial de Médicos no expulsase a Merino Batres y Fuentes de la asociación colegial por sus prácticas ajenas a toda praxis médica. O que Hacienda no investigue a un tipejo que factura en dinero negro, como mínimo, 500.000 euros al año. O que las primeras informaciones de El País en junio fuesen adornados con la pátina de "los medicamentos provenían de dos organismos públicos como el Ministerio de Defensa y el servicio sanitario andaluz", más que nada para que el redactor jefe pudiese tragar con una noticia de deporte en primera plana en la edición de domingo. Y que todo eso no fuese investigado. O las toneladas de basura médica que factura la Farmacia de Cuatro Caminos en Madrid, también citada en los primeros compases de la Operación.
Sumemos a todo ello la evidente Operación Encubrimiento en que se ha transformado la Operación Puerto para 18.- Valv. (Piti), operación que implica a Guardia Civil, Federación Española, juez instructor, todos los periodistas del gremio y todos los medios de comunicación. Ya lo tienen. Un coctel pestilente de las cloacas del ciclismo, aderezado con buena dosis líquido de las cañerías de las cloacas del Estado y la sociedad. Insisto: Mario Zorzoli no es un cualquiera. Es el máximo responsable médico de la UCI. El que decide los análisis. Las nuevas técnicas. El responsable último de los laboratorios. Y Eufemiano Fuentes tenía contacto regular con el. Saquen ustedes mismos las conclusiones.
***
Otra noticia que no es noticia. Las primas a Eufemiano por resultados conseguidos ya aparecieron publicadas en Interviú antes de las Navidades. Al menos no escurre el bulto con lo de "Ivan May" y envía un piropo con lo de "según observadores avezados de la O.P". Gracias, hombre.
***
Túnel del viento. Antón, Samuel y Zubeldia. Qué gran mentira es todo. Ahí está el artículo del polígrafo y erudito Alejandro Lucía explicando que el tiempo que Landis sacó a Pereiro en la última crono del Tour se debía a la posición encima de la bici. Claro, claro. Ya verán como para justificar los -intuyo- fabulosos éxitos para esta temporada de estos tres figuras (¿ganará Zubeldia algo? ¿atacará?) Pedro Delgado y Carlos de Andrés nos recordarán machaconamente estas sesiones, que juntas no suman más de ocho horas.
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09 enero, 2007
Una noticia que no es noticia
Publica hoy Carabias en ABC un titular digno de Pulitzer: "Valverde aparece en los papeles de Eufemiano". Ya. Como si el documento 114, el famoso de 18.- Valv. (Piti) y que ya tiene seis meses no hubiese merecido ese titular. El periodista, retornado de su exilio en EE.UU, ha accedido a un nuevo documento. Se trata del acta levantada por la Guardia Civil sobre los objetos personales que llevaba el hemodruida en el momento de su detención. Entre ellos, además de 10 teléfonos móviles (¿no serán tarjetas? Lo digo por el volumen), una tarjeta de uno de los hoteles donde se practicaban las transfusiones con estos nombres escritos: "Ale, Manc, Vino, Popo y Valverde". Clarito, ¿verdad?.
Tampoco es cuestión de cargar las tintas sobre un periodista que, al menos, es el único que ha llamado a las cosas por su nombre. Lo que cabe preguntarse es porque ahora que Valverde tiene pie y medio en Alemania salen estas cosas. El titular no era ese, querido Carabias, sino: "La Guardia Civil sabe desde mayo que Valverde era llevado por Fuentes". A lo que cabe preguntarse por la intrincada red de amiguismos y coberturas que ha amparado a El Intocable. Arribas fue el primero que se descargó con el pestilente "fuentes de la investigación afirman que están todas las figuras del pelotón nacional, menos Valverde", que es su momento califiqué de "escalofríante". Muy bien. ¿Pero cómo se explica el Santiago y Cierra España en torno a la evidencia de 18.- Valv.(Piti)? ¿Hay que esperar a que aparezca escrito "Valverde" con todas las letras y vocales? ¿Qué gran mentira es esta?
Están todos metidos, todos. El presidente de la Federación, murcianito él, salió gallardamente en defensa de su paisano en una esperpéntica rueda de prensa en plenos mundiales de Salzburgo. Todo el estamento periodista, que no ha dudado en insultar a blogs como este amparándose en una dudosa superioridad moral. Todos los ciclistas, que saben de la extraña mutación de Valverde como ciclista, sólo explicable con el dopaje. La Guardia Civil y el juzgado, que han ocultado desde el principio las evidentes pruebas de la implicación de Piti. Y ahora Carabias, el único que ha hablado del extraño abandono de Valverde en el Tour 2005, nos presenta como noticia algo que no es noticia. Valverde estaba en los papeles de Eufemiano. Tu lo deberías saber bien, que cuando quieres copias patrones y bordados de este blog. Por supuesto, sobre los nombres "Vino y Popo" no dice nada.
Todo esto coincide con la huida como alma que lleva el diablo de Valverde hacia Alemania. Se puede llevar a sus amiguitos murcianos y el montañés Zaballa. Ha cambiado de representante este noviembre -murciano, claro- y este querrá su tajada. En España el dopaje es delito y en Alemania no. Urraburu utiliza la fórmula y esto es riguramente cierto para sustituir verdad por veracidad y afirmar que los contactos empezaron a finales de agosto, cuando Valverde disfrutaba de su momento dulce en la Vuelta y su paloma mensajera le visitaba en Ponferrada, lejos del nidito de amor. Extraño, ¿verdad? ¿Qué interés puede tener un periodista lacayo y pro-Eufemiano como Urraburu en incidir en ese dato? ¿Por qué El Correo dice que los contactos los inició el propio Valverde?.
Valverde se irá al T-Mobile. Se le ha acabado la cobertura que le ha permitido competir el resto de la temporada. Se producirá así un intercambio de cromos que hará que las reticencias hacia Basso en el Discovery sean compensadas. De Armstrong/Ullrich a Basso/Valverde, en los mismo equipos. Ha sido el propio murciano el que ha forzado su salida, igual que hizo en Kelme. Y ya lo buscó en agosto, después de su caída en medio del pelotón en el Tour de Francia. Yo ya no me creo nada. Valverde huye hacia delante, como ha hecho desde el 23 de mayo. Ahora se entiende el saludo que le hizo Basso cuando se acercó a La Toussuire en pleno Dauphiné. Están todos en el mismo barco. Y las ratas son las primeras que abandonan el barco cuando se está hundiendo.
Tampoco es cuestión de cargar las tintas sobre un periodista que, al menos, es el único que ha llamado a las cosas por su nombre. Lo que cabe preguntarse es porque ahora que Valverde tiene pie y medio en Alemania salen estas cosas. El titular no era ese, querido Carabias, sino: "La Guardia Civil sabe desde mayo que Valverde era llevado por Fuentes". A lo que cabe preguntarse por la intrincada red de amiguismos y coberturas que ha amparado a El Intocable. Arribas fue el primero que se descargó con el pestilente "fuentes de la investigación afirman que están todas las figuras del pelotón nacional, menos Valverde", que es su momento califiqué de "escalofríante". Muy bien. ¿Pero cómo se explica el Santiago y Cierra España en torno a la evidencia de 18.- Valv.(Piti)? ¿Hay que esperar a que aparezca escrito "Valverde" con todas las letras y vocales? ¿Qué gran mentira es esta?
Están todos metidos, todos. El presidente de la Federación, murcianito él, salió gallardamente en defensa de su paisano en una esperpéntica rueda de prensa en plenos mundiales de Salzburgo. Todo el estamento periodista, que no ha dudado en insultar a blogs como este amparándose en una dudosa superioridad moral. Todos los ciclistas, que saben de la extraña mutación de Valverde como ciclista, sólo explicable con el dopaje. La Guardia Civil y el juzgado, que han ocultado desde el principio las evidentes pruebas de la implicación de Piti. Y ahora Carabias, el único que ha hablado del extraño abandono de Valverde en el Tour 2005, nos presenta como noticia algo que no es noticia. Valverde estaba en los papeles de Eufemiano. Tu lo deberías saber bien, que cuando quieres copias patrones y bordados de este blog. Por supuesto, sobre los nombres "Vino y Popo" no dice nada.
Todo esto coincide con la huida como alma que lleva el diablo de Valverde hacia Alemania. Se puede llevar a sus amiguitos murcianos y el montañés Zaballa. Ha cambiado de representante este noviembre -murciano, claro- y este querrá su tajada. En España el dopaje es delito y en Alemania no. Urraburu utiliza la fórmula y esto es riguramente cierto para sustituir verdad por veracidad y afirmar que los contactos empezaron a finales de agosto, cuando Valverde disfrutaba de su momento dulce en la Vuelta y su paloma mensajera le visitaba en Ponferrada, lejos del nidito de amor. Extraño, ¿verdad? ¿Qué interés puede tener un periodista lacayo y pro-Eufemiano como Urraburu en incidir en ese dato? ¿Por qué El Correo dice que los contactos los inició el propio Valverde?.
Valverde se irá al T-Mobile. Se le ha acabado la cobertura que le ha permitido competir el resto de la temporada. Se producirá así un intercambio de cromos que hará que las reticencias hacia Basso en el Discovery sean compensadas. De Armstrong/Ullrich a Basso/Valverde, en los mismo equipos. Ha sido el propio murciano el que ha forzado su salida, igual que hizo en Kelme. Y ya lo buscó en agosto, después de su caída en medio del pelotón en el Tour de Francia. Yo ya no me creo nada. Valverde huye hacia delante, como ha hecho desde el 23 de mayo. Ahora se entiende el saludo que le hizo Basso cuando se acercó a La Toussuire en pleno Dauphiné. Están todos en el mismo barco. Y las ratas son las primeras que abandonan el barco cuando se está hundiendo.
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08 enero, 2007
"Corredores de su confianza": ahí está la clave
El año nuevo empieza como acabó el último, como a su vez acabó y empezó el año anterior: con Piti. Esta vez la noticia no es su loro o un nuevo documento asociado al número 18, sino fuertes rumores sobre una megaoferta del T-Mobile. Los alemanes manirotos pagarían la claúsula de rescisión de 2 millones de euros, una ficha por temporada de 3 millones de euros (600.000 más de lo que pagaban por Ullrich, o sea que tampoco es para tanto si comparamos las edades de ambos) y otras prebendas que serán el tema de este post. La noticia tiene mucho de fideligna: a pesar de que el periódico que lanzó la liebre es De Teelegraf, que se cubrió de gloria el pasado junio al implicar falsamente a Flecha y Menchov con Eufemiano, lo cierto es que los alemanes nadan en la abundancia económica, su equipo está muy debilitado tras la espantada de los Cecchini/Ferrari boys que tenía en plantilla (Kloden, Kessler, Mazzoleni, además de Wesseman, Ullrich y Sevilla) y lo de Rogers como jefe de filas para el Tour da risa.
Valverde no está muy cómodo con el Caisse d´Epargne. La razón principal es que las mentes pensantes navarras no han renovado al amiguissimo Jose Cayetano Juliá, y Valverde anda muy dolido. Su amigo, incapaz de acabar una carrera profesional en los dos últimos años después de ganar una etapa en la Vuelta completamente dopado (ojito a la velocidad media), anda muy dolido porque tiene que dejar el ciclismo ante la falta de ofertas. En el resto de equipos no son tontos y saben perfectamente el significado de la palabra "paquete". En la casa que fue de Indurain han intentado hacer más llevadera la pérdida, fichando a J.J Rojas y L.L Sánchez, miembros eximios del clan murciano que ha desembarcado de la noche a la mañana en el pelotón. Inútil. Valverde también extraña a su amigo Colom (el del inicio de temporada fulgurante hasta la O.P), pasado al Astaná, y no está nada claro lo de Zaballa.
No es sólo eso. Valverde se siente menospreciado en España. Cuenta por miles sus fans fuera de las fronteras (incluyendo un parisino que lleva un página magnífica sobre su figura), acorde a sus grandes éxitos y su imagen simpática y polivalente, pero ha sido sistemáticamente ninguneado en los resúmenes del año. Sólo El País le ha incluído en su lista de mejores deportistas españoles de 2006, un mérito de sobras acreditado por su victoria en L-B-L (la primera de un español en la carrera más antigua del mundo, saquen ustedes la conclusión) o su victoria en el ProTour. Valverde no se da cuenta de que el problema no es él, es el deporte que practica y la eclosión en España de otras modalidades lo que le ha condenado al ostracismo.
Hay más razones. A Valverde le sentó muy mal este post. Está convencido de que hay un topo dentro del equipo, pero está muy equivocado. Como en tantas otras cosas. De aquel entonces empieza el malestar con el equipo. Me cuentan que Jaimerena imprimió ese artículo y lo leyó en alto ante los miembros de la plantilla que disputaron la Paris-Tours. Que dijo "¡cómo alguien puede escribir algo así!", como si la culpa fuese del mensajero y no de la paloma mensajera. Que los allí presentes se callaron y no defendieron con grandes aspavientos a El Intocable, como parecía preceptivo. Que en Caisse d´Epargne hay gente que no se mete y que se la suda que se metan con Valverde.
Además, el murciano sabe que el goteo de documentos de la O.P puede continuar durante la próxima temporada. Mejor estar lejos y hacer que no se entera de los papeles reproducidos en diferentes medios. En Alemania. Donde las otras clínicas de la red de Eufemiano. En Alemania, donde el dopaje no es delito y sólo una criminóloga (Britta Bannenberg, es importante resaltar algunos nombres) se ha atrevido a encausar a Ullrich y Sevilla por "fraude deportivo". En Alemania, donde le han ofrecido fichar a todo su entorno, de Juliá a Fran Pérez, el del positivo por EPO en 2003. Eso es un amigo. "Corredores de su confianza", que dice Urraburu. Y de sus mismas prácticas y tejemanejes.
En el Caisse d´Epargne están muy preocupados. Ya intentaron hacer a mediados de noviembre una cutre-fusión entre su estructura y la del trístemente célebre 3 Molinos Resort, un engrudo de equipo que, trasladado metafóricamente al mundo de la geopolítica, sería como si Alemania se integrase con Swazilandia. Todo por contentar murcianamente a su estrella. No pudo ser. Las puertas están abiertas. Alejandro se lo está pensando. Pero se vuelve a equivocar si piensa que por irse a Alemania se va a reducir la presión sobre su figura: se va a el país del Suedeutsche Zeitung, hablar de presión mediática sobre Valverde es como de chiste y...este blog va a seguir por donde solía. Feliz Año Nuevo a todo el mundo.
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La teoría de Astarloa sobre Basso. Qué mal.
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¡Cómo manda el ultradopado Giannetti en el Saunier! Gana un concurso de ideas (¿no suele estar prohibido participar a familiares y allegados de las empresas convocantes?) de su patrocinador y los amarillos siguen corriendo por los DD.HH. En breve les darán el Príncipe de Asturias.
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La alegre tropa. Lo dicho: Samuel Sánchez gana la próxima Vuelta a España. Ya le están preparando la excusa para explicar su mejora contra el crono: el famoso túnel del viento. ¿Y que pinta ahí Zubeldia, que tiene 30 años y no ha pisado uno en su vida? Fíjense que bien le ha ido al director de los 29 corredores y los 3 médicos: si hasta cita a Koldo Gil como ejemplo de mejora...
Valverde no está muy cómodo con el Caisse d´Epargne. La razón principal es que las mentes pensantes navarras no han renovado al amiguissimo Jose Cayetano Juliá, y Valverde anda muy dolido. Su amigo, incapaz de acabar una carrera profesional en los dos últimos años después de ganar una etapa en la Vuelta completamente dopado (ojito a la velocidad media), anda muy dolido porque tiene que dejar el ciclismo ante la falta de ofertas. En el resto de equipos no son tontos y saben perfectamente el significado de la palabra "paquete". En la casa que fue de Indurain han intentado hacer más llevadera la pérdida, fichando a J.J Rojas y L.L Sánchez, miembros eximios del clan murciano que ha desembarcado de la noche a la mañana en el pelotón. Inútil. Valverde también extraña a su amigo Colom (el del inicio de temporada fulgurante hasta la O.P), pasado al Astaná, y no está nada claro lo de Zaballa.
No es sólo eso. Valverde se siente menospreciado en España. Cuenta por miles sus fans fuera de las fronteras (incluyendo un parisino que lleva un página magnífica sobre su figura), acorde a sus grandes éxitos y su imagen simpática y polivalente, pero ha sido sistemáticamente ninguneado en los resúmenes del año. Sólo El País le ha incluído en su lista de mejores deportistas españoles de 2006, un mérito de sobras acreditado por su victoria en L-B-L (la primera de un español en la carrera más antigua del mundo, saquen ustedes la conclusión) o su victoria en el ProTour. Valverde no se da cuenta de que el problema no es él, es el deporte que practica y la eclosión en España de otras modalidades lo que le ha condenado al ostracismo.
Hay más razones. A Valverde le sentó muy mal este post. Está convencido de que hay un topo dentro del equipo, pero está muy equivocado. Como en tantas otras cosas. De aquel entonces empieza el malestar con el equipo. Me cuentan que Jaimerena imprimió ese artículo y lo leyó en alto ante los miembros de la plantilla que disputaron la Paris-Tours. Que dijo "¡cómo alguien puede escribir algo así!", como si la culpa fuese del mensajero y no de la paloma mensajera. Que los allí presentes se callaron y no defendieron con grandes aspavientos a El Intocable, como parecía preceptivo. Que en Caisse d´Epargne hay gente que no se mete y que se la suda que se metan con Valverde.
Además, el murciano sabe que el goteo de documentos de la O.P puede continuar durante la próxima temporada. Mejor estar lejos y hacer que no se entera de los papeles reproducidos en diferentes medios. En Alemania. Donde las otras clínicas de la red de Eufemiano. En Alemania, donde el dopaje no es delito y sólo una criminóloga (Britta Bannenberg, es importante resaltar algunos nombres) se ha atrevido a encausar a Ullrich y Sevilla por "fraude deportivo". En Alemania, donde le han ofrecido fichar a todo su entorno, de Juliá a Fran Pérez, el del positivo por EPO en 2003. Eso es un amigo. "Corredores de su confianza", que dice Urraburu. Y de sus mismas prácticas y tejemanejes.
En el Caisse d´Epargne están muy preocupados. Ya intentaron hacer a mediados de noviembre una cutre-fusión entre su estructura y la del trístemente célebre 3 Molinos Resort, un engrudo de equipo que, trasladado metafóricamente al mundo de la geopolítica, sería como si Alemania se integrase con Swazilandia. Todo por contentar murcianamente a su estrella. No pudo ser. Las puertas están abiertas. Alejandro se lo está pensando. Pero se vuelve a equivocar si piensa que por irse a Alemania se va a reducir la presión sobre su figura: se va a el país del Suedeutsche Zeitung, hablar de presión mediática sobre Valverde es como de chiste y...este blog va a seguir por donde solía. Feliz Año Nuevo a todo el mundo.
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La teoría de Astarloa sobre Basso. Qué mal.
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¡Cómo manda el ultradopado Giannetti en el Saunier! Gana un concurso de ideas (¿no suele estar prohibido participar a familiares y allegados de las empresas convocantes?) de su patrocinador y los amarillos siguen corriendo por los DD.HH. En breve les darán el Príncipe de Asturias.
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La alegre tropa. Lo dicho: Samuel Sánchez gana la próxima Vuelta a España. Ya le están preparando la excusa para explicar su mejora contra el crono: el famoso túnel del viento. ¿Y que pinta ahí Zubeldia, que tiene 30 años y no ha pisado uno en su vida? Fíjense que bien le ha ido al director de los 29 corredores y los 3 médicos: si hasta cita a Koldo Gil como ejemplo de mejora...
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