El pasado miércoles Maranta nos convocó a una jornada de escalada en el rocódromo cercano a Casa de Campo. Al final nos juntamos 6 personas: Maranta, Pablo, Marcos, Corz, Jose y Manu.
Algunos de nosotros llevábamos largo tiempo sin darle a esto de la escalada y mucho más tiempo sin pisar el rocódromo. Fue corto pero intenso. Os dejamos algunas fotillos.
viernes, 22 de junio de 2012
miércoles, 20 de junio de 2012
A la primera y de primer@s
Desde luego nadie nos puede echar en cara falta de pasión por la montaña o, al menos, falta de obsesión. Incluso un fin de semana como el pasado, en el que todo el mundo andaba liado con compromisos varios y el foro parecía el desierto del Gobi, algunos encontramos el huequecito justo para descargar un poco de mala leche semanal y pasar un rato agradable bien pegaditos a la roca.
En esta ocasión nos juntamos Maranta, Eva, Fátima (amiga de Maranta interesada en unirse al club de los obsesos y que recordaréis por sus aventuras por Colombia el verano pasado) y un servidor. Como el tiempo apremiaba y no era cuestión de perder media mañana buscando nuevas emociones, decidimos que lo mejor era ir a tiro hecho y no devanarse mucho los sesos. Y la verdad es que tampoco había muchas opciones que cumplieran con todo lo que buscábamos: cercano, con sombra, fácil, bien equipado, con un bar a distancia razonable..... blanco y en botella ¡¡¡La majadilla!!!
Lo complicado era que además estuviera vacío y, efectivamente, creo que no he visto tal concentración de personal en tan pocos metros de roca en mucho tiempo. Aun así, y tras un pequeño intento de usurpación, conseguimos hacernos con la vía fácil de la derecha, y allí que nos quedamos un buen rato.
Como casi todos sabéis, es una vía estupenda para iniciarse, tanto que, una vez hecha un par de veces, parece como si estuvieras en el pasillo de tu casa. Así que, por votación popular decidimos que hoy tocaba practicar escalada de primero y sin calentamiento previo.
Ni cortas ni perezosas, Eva y Maranta se liaron la manta a la cabeza y solventaron la papeleta la mar de bien y lo mejor es que parece que eso de descargar adrenalina y pasar miedo mientras calculas lo que te queda para el siguiente seguro, les ha parecido hasta interesante. Así que, ya os podéis poner las pilas el resto, porque estas chicas van con la directa y no me extrañaría que los "quintos" empiecen a aburrirlas soberanamente para cuando decidáis volver.
Para acabar la jornada, la idea era practicar algún rapel de cara a nuestro viaje al Midi pero, dada la concentración de gente en todas y cada una de las vías, nos limitamos intercambiar conocimientos teóricos en espera de otra sesión un poco menos acelerada.
Para terminar, tras despedirnos de Eva, que tenía compromisos ineludibles con la familia (lo que la exime de la terrible sanción que le correspondería por saltarse las cervezas) nos acercamos a Cercedilla a tomar el correspondiente refrigerio antes de volver a eso que algunos llaman civilización...
Saludos
En esta ocasión nos juntamos Maranta, Eva, Fátima (amiga de Maranta interesada en unirse al club de los obsesos y que recordaréis por sus aventuras por Colombia el verano pasado) y un servidor. Como el tiempo apremiaba y no era cuestión de perder media mañana buscando nuevas emociones, decidimos que lo mejor era ir a tiro hecho y no devanarse mucho los sesos. Y la verdad es que tampoco había muchas opciones que cumplieran con todo lo que buscábamos: cercano, con sombra, fácil, bien equipado, con un bar a distancia razonable..... blanco y en botella ¡¡¡La majadilla!!!
Lo complicado era que además estuviera vacío y, efectivamente, creo que no he visto tal concentración de personal en tan pocos metros de roca en mucho tiempo. Aun así, y tras un pequeño intento de usurpación, conseguimos hacernos con la vía fácil de la derecha, y allí que nos quedamos un buen rato.
Como casi todos sabéis, es una vía estupenda para iniciarse, tanto que, una vez hecha un par de veces, parece como si estuvieras en el pasillo de tu casa. Así que, por votación popular decidimos que hoy tocaba practicar escalada de primero y sin calentamiento previo.
Ni cortas ni perezosas, Eva y Maranta se liaron la manta a la cabeza y solventaron la papeleta la mar de bien y lo mejor es que parece que eso de descargar adrenalina y pasar miedo mientras calculas lo que te queda para el siguiente seguro, les ha parecido hasta interesante. Así que, ya os podéis poner las pilas el resto, porque estas chicas van con la directa y no me extrañaría que los "quintos" empiecen a aburrirlas soberanamente para cuando decidáis volver.
Para acabar la jornada, la idea era practicar algún rapel de cara a nuestro viaje al Midi pero, dada la concentración de gente en todas y cada una de las vías, nos limitamos intercambiar conocimientos teóricos en espera de otra sesión un poco menos acelerada.
Para terminar, tras despedirnos de Eva, que tenía compromisos ineludibles con la familia (lo que la exime de la terrible sanción que le correspondería por saltarse las cervezas) nos acercamos a Cercedilla a tomar el correspondiente refrigerio antes de volver a eso que algunos llaman civilización...
Saludos
jueves, 14 de junio de 2012
Integral de la Pedriza - 9 de junio de 2012
Sábado 9 de junio. Nos dimos cita a las 8:30 de la mañana 4 machacas: Jesús, Paco, David y una servidora. Nuestro objetivo, las Torres de la Pedriza (en la Pedriza Posterior). Esta ruta llevaba ya un tiempo macerándose en el foro, inspirada, entre otras fuentes, en Senderismo para masoquistas. Así que allá que fuimos.
Dejamos el coche de camino al Tranco y comenzamos a caminar un poco antes de las 10 de la mañana. Por suerte, esta vez el día acompañaba. Aunque ya estemos en pleno mes de junio, ese día hizo sol, pero corría constantemente una fresca brisa, que dejó una temperatura muy agradable durante toda la jornada. Del Tranco, subimos a la pradera del Yelmo para esperar nuestro turno en la fisura. Sin embargo, visto que todos habíamos subido al Yelmo recientemente y que nos quedaba una larga jornada por delante, decidimos obviar esa trepada para seguir ruta (sí señores, una integral de la Pedriza sin el Yelmo). Del Yelmo, Jesús y Paco encontraron una variante divertida para bajar y enganchar con el collado de la Dehesilla.
De ahí, para arriba de nuevo, para poder admirar a los escaladores en la pared de Santillana, para alcanzar el collado de la Ventana y continuar subiendo. Atravesamos varias zonas entre rocas (para mi disfrute) y continuamos siguiendo hitos (las marcas de pintura desaparecen en algún punto y sólo quedan los hitos de piedra). Finalmente alcanzamos una entretenida cuerda, que seguimos hasta llegar a las Torres, punto más alto de la ruta. Tras la correspondiente pausa para comer, no nos queda más que empezar a bajar y bajar... Alcanzamos el Manzanares bastante rápido ladera abajo, para seguir su curso hasta la Charca Verde. Se nota que está más cerca porque empezamos a ver gente de nuevo.
Finalmente, no nos queda más que pasar por Canto Cochino y retornar al Tranco a las 18h siguiendo el río, para tomarnos unas maravillosas cervezas a las (y una cocacola).
En total, 10 horas de ruta, con 22 km recorridos y un desnivel que no tenemos muy claro, pero que seguro que supera con creces los 1.000 m de desnivel acumulado.
Saludotes y hasta la próxima ruta.
lunes, 11 de junio de 2012
Sesión Continua (El Vellón-Quebrantaherraduras)
Aprovechando la supuesta bajada de temperaturas del pasado miércoles, Taber y un servidor decidimos dar un poco de continuidad al inicio de la temporada de escalada acercándonos a varias zonas de la sierra. Y como en la variedad está el gusto, que mejor que darle a dos palos tan diferentes como el Vellón y Pedriza.
Para la primera parte de esta doble sesión, nos acercamos con un sol de justicia pero con un airecillo que lo hacía soportable, al sector de los bloques del Vellón. Más solos que la una y con todas las vías para nosotros, le dimos un buen repaso a un V+ y un 6a que ya habíamos catado en una anterior visita y nos metimos en un 6b que, al abajo firmante lo "escupió" antes de la primera chapa y me hizo entender la descomunal distancia que hay entre las dos primeras letras del abecedario, al menos cuando van detrás del número 6.
Ya un poco sofocados por la solana, decidimos subir al sector de la buhardilla donde los techitos prometían ponernos las cosas incluso más complicadas. Después de tomar un tentempié a la sombra de la vía elegida (un 6a+ de cuyo nombre no logro acordarme) cometí la osadía de intentarla de primero, con el resultado de un sofocón de mucho cuidado y dejar los brazos fuera de servicio para un buen rato. Menos mal que Taber estaba allí para recordarme aquello de que más vale maña que fuerza y pudimos retirarnos con la vía casi finiquitada.
Con las fuerzas ya un poco justas, decidimos que la sesión de músculo ya había durado suficiente, así que pusimos rumbo a Manzanares, donde habíamos quedado con Eva y su "cachorrito" Greta para continuar la jornada a la agradable sombrita de Quebrantaherraduras, no sin antes recuperar fuerzas con una merendola a base de un buen jarro de horchata y bollería variada. Para nuestra sorpresa, no éramos los únicos a los que se les había ocurrido la idea, así que nos tocó esperar un rato a que quedaran libres las primeras vías, mientras Greta hacía de las suyas revolucionando al personal e intentando arrancar el pino al que la habíamos atado (a fe mía que en un par de meses lo conseguirá sin mucho esfuerzo).
Así, de lo más relajados y entre los lametones y las carreras de Greta, logramos hacer un Vº y un V+ en los que Eva nos demostró que, a poco que nos descuidemos, terminará por darnos sopas con onda en esto de andar colgado por las alturas. Tan a gusto se estaba por allí, que solo la falta de luz y los dos kilos de polvo acumulado que llevábamos encima lograron que decidiéramos bajar a Manzanares en busca de nuestra bien ganada jarra de cerveza.
Saludos
Tarabas
De Vellón-Quebrantaherraduras |
Para la primera parte de esta doble sesión, nos acercamos con un sol de justicia pero con un airecillo que lo hacía soportable, al sector de los bloques del Vellón. Más solos que la una y con todas las vías para nosotros, le dimos un buen repaso a un V+ y un 6a que ya habíamos catado en una anterior visita y nos metimos en un 6b que, al abajo firmante lo "escupió" antes de la primera chapa y me hizo entender la descomunal distancia que hay entre las dos primeras letras del abecedario, al menos cuando van detrás del número 6.
De Vellón-Quebrantaherraduras |
Ya un poco sofocados por la solana, decidimos subir al sector de la buhardilla donde los techitos prometían ponernos las cosas incluso más complicadas. Después de tomar un tentempié a la sombra de la vía elegida (un 6a+ de cuyo nombre no logro acordarme) cometí la osadía de intentarla de primero, con el resultado de un sofocón de mucho cuidado y dejar los brazos fuera de servicio para un buen rato. Menos mal que Taber estaba allí para recordarme aquello de que más vale maña que fuerza y pudimos retirarnos con la vía casi finiquitada.
Con las fuerzas ya un poco justas, decidimos que la sesión de músculo ya había durado suficiente, así que pusimos rumbo a Manzanares, donde habíamos quedado con Eva y su "cachorrito" Greta para continuar la jornada a la agradable sombrita de Quebrantaherraduras, no sin antes recuperar fuerzas con una merendola a base de un buen jarro de horchata y bollería variada. Para nuestra sorpresa, no éramos los únicos a los que se les había ocurrido la idea, así que nos tocó esperar un rato a que quedaran libres las primeras vías, mientras Greta hacía de las suyas revolucionando al personal e intentando arrancar el pino al que la habíamos atado (a fe mía que en un par de meses lo conseguirá sin mucho esfuerzo).
Así, de lo más relajados y entre los lametones y las carreras de Greta, logramos hacer un Vº y un V+ en los que Eva nos demostró que, a poco que nos descuidemos, terminará por darnos sopas con onda en esto de andar colgado por las alturas. Tan a gusto se estaba por allí, que solo la falta de luz y los dos kilos de polvo acumulado que llevábamos encima lograron que decidiéramos bajar a Manzanares en busca de nuestra bien ganada jarra de cerveza.
Saludos
Tarabas
miércoles, 6 de junio de 2012
Retomando "malas" costumbres
¡¡Vuelve el calor y vuelve la escalada!!
Aunque la jornada comenzó entre poco tranquilizadoras conversaciones del estilo:
- Escalador al asegurador: ¡¡pues hala!!, ya te puedes hacer el ocho.
- Asegurador al escalador: eh....??????
Aunque ya habíamos hecho un par de intentos a principio de primavera, las lluvias y últimos fríos de la estación habían dejado las buenas intenciones casi en pequeños paréntesis en nuestras habituales pateadas.
Por fin, y aunque los calores no suelen ser el mejor aliado del escalador, este fin de semana parecía el mejor momento para escaparnos a las frescas laderas de Peñalara y pasar cuanto antes los miedos de las primeras vías de la temporada e inyectar un poco de adrenalina a nuestros amodorrados cuerpos de senderistas.
De Peñalara-escalada |
Para esta ocasión, contamos con la presencia de tres caras poco o nada habituales en el grupo: Jesús, que ya experimentó con nosotros las bondades de un buen chapuzón en la Barranca; Celso que, después de varios intentos, por fin ha logrado incorporarse a una de nuestras salidas; y Pablo -¡¡si, otro Pablo!!- (ya sabéis que en este grupo acostumbramos a tener todo por duplicado), compañero del Majalasna y que también participó anteriormente en el memorable palizón de la Integral de la Puebla.
Como acompañamiento, algunos de los más recalcitrantes asistentes a estas cosas del monte, y en particular, de la escalada: Eva, Jose, Taber y un servidor.
Sobre la zona del contrafuerte de la Teresa poco más podemos decir de lo que ya hemos comentado en otras ocasiones: vías entre Vº y 6b en un entorno privilegiado y en un estilo intermedio entre adherencia y fisuras, muy recomendables para romper la monotonía de las interminables placas pedriceras.
Aunque la jornada comenzó entre poco tranquilizadoras conversaciones del estilo:
- Escalador al asegurador: ¡¡pues hala!!, ya te puedes hacer el ocho.
- Asegurador al escalador: eh....??????
nadie se fue sin terminar unas cuantas vías, e incluso nos dio tiempo para que Taber impartiera un interesante taller sobre rápeles, con objeto de refrescar el tema de cara a cercanos proyectos y futuras locuras. Lo peor, la brisilla que se levantó al final de la mañana y que, a unos cuantos osados en pantalón corto, nos puso la piel como la de un pollo recien desplumado.
Para recompensar tanto esfuerzo físico e intelectual, dividimos la segunda fase de la jornada en dos sesiones: un primer refrigerio en Venta Marcelino y una segunda sesión de terraza y charleta (para asentar conocimientos, que conste) en Cerceda
Lo mejor de todo, como no podía ser de otra manera, compartir un día en el monte con la mejor compañía posible.
Saludos
Lo mejor de todo, como no podía ser de otra manera, compartir un día en el monte con la mejor compañía posible.
Saludos
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